Capítulo IV

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Cuando salí afuera estaba todo mojado, estaba lloviendo, no podía creer que no haya sentido una tormenta, y lo peor es que estaba solo y no encontraba a mis amigos, en ese momento la diversión se terminó y desee no haber salido esa noche.
En algún lado tenían que estar esos tres.

Mandé un mensaje a Nicole y Leandro preguntándoles "¿dónde se habían metido?"

Conversación de whatsapp:

Yo: ¿Dónde se metieron?, los estoy buscando!!

Nicole: Estamos yendo de vuelta a casa de Fer, por qué? dónde estás?

Yo: Sigo adentro del boliche, por qué se fueron!?

Nicole: Te buscamos y no te encontramos como se largó a llover creímos que te habías ido, estamos en taxi, si no volveríamos a buscarte.

Yo: Está bien, me voy solo.

Fue un momento desesperante, me tenía que ir sólo, pero bueno no era la muerte.
Antes de llamar el taxi vi mi celular y eran cinco y cinco exactamente y así marque el único número de taxis que conocía, pero me dio desconectado. No podía estar peor.

Cuando de repente sentí que en tocaron el hombro y ya me lo había imaginado. Si, era él de nuevo, Eric.

–¿Estás bien? ¿Te vas? –me preguntó

–Si –dije estoy llamando un taxi, pero me da desconectado, ya busco otro número igual.

–No, te puedo alcanzar donde quieras ir –propuso

No se por qué pero no quería.

–No quiero ser una molestia, además debes querer quedarte un rato más y... No sé.

–Ya me aburrí y mis amigos se fueron –dijo –así que también me quedé sólo, vení, tengo mi auto en la otra cuadra.

Me agarró de la muñeca y me guió unos pasos hasta que lo seguí, continuaba desconfiando, pero nunca lo creí secuestrador ni nada de eso, parecía un tipo honesto. Pero a mi criterio nadie que aparece en un boliche y te propone ir en su auto es sólo por hacer un bien al universo ¿o si?

Corrimos una cuadra y un poco más hasta llegar a su auto, me sentí mal, se ofrecía a llevarme y yo iba a subir todo mojado, era un auto modelo renault logan, lo miré mientras seguía lloviendo esperando que me diga algo.

–No es una limusina, pero algo es algo –me dijo apenas cruzamos miradas

–Estoy mojado, te voy a mojar los asientos, mejor me voy de otra forma, No es necesario...

Abrió la puerta de su lado e inmediato abrió la del acompañante en donde me subí, me dió una campera que tenía en su asiento de atrás, obviamente le pertenecía a él y era de cuero negra.

–No me la voy a poner, también la voy a mojar y está nueva –protesté

–No te pregunté, ponetela, hace frío –dijo con una sonrisa ¿A dónde ibas al final así te llevo?

Me puse la campera de mala gana, no podía creer lo que estaba haciendo por mi, no me conocía por más de unos minutos en un boliche y unas miradas, nada más. Parecía muy bueno para ser verdad. Yo nunca haría eso, soy muy egoísta, odio prestar mis cosas y si me las ensuciarían o mojaran con mas razón las negaría. ¿Por qué el lo hace? ¿Querría algo a cambio? Lo miré y le dije la dirección de la casa de Leandro.

–¿Ahí es tu casa? –preguntó

–No, es la de mi amigo, ésta noche debo quedarme ahí, no iba a volver a mi casa, no tengo llave, nada, por eso debo quedarme con él.

–Pero... Con esta lluvia ni podría pasar ningún auto por ahí, lleva horas lloviendo y están inundadas, esas calles tienen muchos baches –justificó

–Entonces no se que hacer, a mi casa no puedo volver, un taxi me llevará de Leandro.

–Te ofrezco quedarte esta noche en mi casa, tengo un departamento a unas cuadras, vivo solo.

Otra vez me sentí acorralado por sus propuestas, no parecía malo, pero algo raro tenía, por qué, por qué tanta generosidad, no entiendo y tampoco se que contestarle, tantas preguntas pasaron mi mente en unas milésimas de segundos, milésimas que se convierten en segundos que él me esta mirando esperando una respuesta... ¿Qué le digo?

–No quiero ser una molestia –respondí queriendo evadir el tema el cual debía tener que contestar tarde o temprano

–Si fueras una molestia no te lo propondría ¿cierto? –me dijo mirándome a los ojos con una sonrisa

Me quería morir, ya no tenía escapatoria, no me imaginé que podía pasar, pero tuve que responder.

–Bueno –afirmé

Siguió conduciendo hasta su casa, no duro mucho el trayecto porque estaba cerca.
Paró el auto al frente y salió inmediatamente y corrió a la puerta para no mojarse, yo hice lo mismo. Esperaba que el siempre hiciera algo primero para poder copiarle, no quería cometer un error, no estaba del todo cómodo en ese ámbito.

Entramos por una puerta de vidrio hasta unas escaleras, lo seguía en todo momento, había un pasillo enorme, tanto largo como ancho, y muchísimos departamentos, era un lugar súper lujoso, llegamos finalmente a las escalera. Subimos al segundo piso que también esta al aire libre al igual que el pasillo de abajo, en el cual caminamos de manera contraria a como entramos, en un momento paró y sacó sus llaves, tenía el departamento número 12.

–Acá es, pasa –me dijo

Pasé y me quedé parado, seguía sin querer molestar y menos mojar toda su casa. Me trajo una toalla y me sequé.

–Querés tomar o comer algo, yo ya me voy a dormir –dijo

–No, está bien –tartamudeé también estoy cansado.

–Bueno, acá te presto una remera mía te queda grande, pero para que no duermas desnudo o mojado.

–Gracias

Me dirigí hasta el baño y me saqué mi ropa con la que había salido que obviamente estaba húmeda, mi ropa interior estaba seca por suerte, entonces me quede en bóxer y con su remera roja que apenas terminaba antes de mi bóxer. Salí y él me llevó del baño hasta la habitación que estaba al lado del mismo. Tenía una cama matrimonial y dos mesitas de noche. Era algo angosta pero normal.

–Perdón pero solamente tengo una pieza y una cama, podes dormir en la otra punta, mi lado es ése –señaló el lado izquierdo

No lo podía creer, íbamos a dormir en la misma cama, y juntos. Estaba tan cansado de pensar que solo lo miré y me dirigí al lado derecho de la habitación, apagué mi celular dejándolo encima de la mesa de noche y me acosté. El hizo lo mismo sin decir una palabra, se había puesto una remera corta blanca y un pantalón también corto para dormir azul, no emitió otra palabra y apagó la luz.

Yo tenía media cama para dormir, pero estaba en la punta.

PROHIBIDO (Gay) [PAUSADA TEMPORALMENTE]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora