Incomprendidos: Segunda Temporada (CANCELADA)

Capitulo 18 -El regreso de Michelle-

(Eva)

-Hola... -respondo sorprendida

¿Cómo que me porte bien? Osea que si ya de por sí me daba rabia volver a tener a Michelle en medio de Liam y yo aunque solo fuera por un momento en una conversación, encima tengo que aguantarla en mi casa. Esto es una broma, ¿no?

-Liam, ¿podemos hablar un momento tú y yo en la cocina? -pregunto pero no espero una respuesta y arrastro a Liam a la cocina.

-Antes de que te pongas histérica déjame que te explique -comienza diciendo

-Pues tarde, ya lo estoy

-Mira fue ella la que me llamó, quería hablar conmigo porque la estuve mareando demasiado con querer darte celos. La utilicé y le he pedido perdón por comportarme como un verdadero gilipollas y un cerdo con ella. Le dije mque habíamos vuelto y que con ella solo fue un juego, solo tengo ojos para ti. -dice tomando mis mejillas

Pero a mí no me convence, no me gusta un pelo la presencia de Michelle en casa de Liam y cuanto menos merodeando alrededor suyo

-No te prometo nada -le dije

Aunque solo fuese por Liam intentaría comportarme correctamente y aguantarla el tiempo que estuviera en mi casa. Salimos al comedor y allí estaba ella esperando.

-Antes de nada, Eva, quiero decirte que no te preocupes. Liam y yo ya lo hemos aclarado todo y no pasara nada entre nosotros, está todo solucionado -me dice sin yo exigirle explicaciones

-No tienes que decirme nada, Michelle. Siempre hemos sido amigos y eso lo tiene por qué cambiar. Sé muy bien del lado del que está Liam. -le doy un beso a Liam sellando así mi declaración

-Ya lo veo, y me alegro por vosotros. En otro momento no habría dicho lo mismo, y ni siquiera ahora sé si lo digo sinceramente. Pero sé que con Liam nunca podré llegar a nada, está enamorado y la fuerza de ningún dios puede separar un amor como el vuestro. Sois increíbles... Además... Me gustaría pedirte perdón, Eva, por haber intentado quitártelo o cosas así... Lo he hablado con una amiga que algún día os presentaré y me ha abierto los ojos.

-No te preocupes, borrón y cuenta nueva - nos damos un abrazo y veo a Liam poner el pulgar para arriba en señal de que no lo estoy haciendo tan mal

Nos pasamos todo el rato hablando del pasado y de lo que nos hemos perdido en este tiempo que no hemos estado juntos. Pronto, comienzo a encontrar cosas raras en las palabras de Michelle, cosas que me salen de ojo y que me llegan a preocupar.

Cuando Michelle se marcha y nos quedamos Liam y yo solos en casa se lo comento.

-Liam, ¿no has notado rara a Michelle? - le pregunto mientras recogemos los vasos y los platos que hemos usado

-¿Rara? No sé.... ¿por qué?

-No sé, serán cosas mías... - digo zanjando la conversación. Habrán sido imaginaciones mías

-Por cierto, ¿qué tal las cosas con tu madre? -me pregunta Liam

-Igual de mal, apenas hemos hablado y no me apetece nada tener que volver a casa a verle la cara para que no me diga ni hola.

-Sabes que puedes quedarte aquí a dormir si quieres, ¿no? - me dice tomándome de la cintura

-Lo sé... pero no sé si debería, a mi madre no le haría mucha gracia

-Sinceramente, tu madre debería darte igual cuando ni siquiera te deja ser libre para elegir a qué persona amar

Las palabras de Liam me llegan muy al corazón y me lanzo a sus brazos para besarle. Nuestro beso comienza a subir más y más y la temperatura de nuestros cuerpos aumenta con cada roce de nuestros labios. Liam coloca sus manos por debajo de mi camiseta y ambos comenzamos a reír cuando me estremezco por el frío en sus manos.
Sin separarnos apenas un centímetro, Liam me arrastra hasta su habitación y me tumba en ella colocándose él encima de mi mientras acaricia mi cadera. En apenas unos minutos, Liam me hace suya.

A la mañana siguiente, amenzco en la cama de Liam. Al final consiguió que me quedara a dormir con él. Me levanto de la cama haciendo el menor ruido posible para no despertar a Liam. Me coloco los pantalones y la camiseta y voy al baño, me peino y, cuando salgo, Liam no está encima de la cama. Miro para todos lados y no lo encuentro por ningún lado. De pronto, oigo un ruido en la cocina y acudo corriendo.

-Ups, pretendía que fuese una sorpresa pero... buenos días -dice Liam recogiendo la taza que ha tirado al suelo

-¿Te he dicho alguna vez que eres el más bonito del mundo y que te quiero un montón?

-Puede que alguna que otra vez -contesta entre risas

Cuando termino de desayunar, me despido de Liam a regañadientes y paso por casa antes de ir a la universidad.