"Buenos días Mary... Te estarás preguntando por que te escribo a esta hora, pues, quería verte... No se si podrás.. Espero tu respuesta ;)
-Raúl"Mis mejilla se ponen duras y siento una calor en ellas.
—Y esa sonrisa?—pregunta Melania con una ceja arqueada.
—Pues.. No sé, salió de repente—la miro a los ojos y ella sonríe.
—Es Raul?—pregunta ladeando su cabeza.
—Si—bajo la mirada para ver el mensaje nuevamente—Quiere verme—le doy el celular.
Melania coge el celular, lee el contenido y asiente lentamente.
—Uhm, ya veo.
—No se, el me vuelve...estúpida o algo así.
Tiro todo mi cuerpo en la cama.
—Yo te diría que vayas—la miro—Sólo así sabrás sus intenciones—.
Ella tiene razón, sino toda la vida o la secundaria estaré dudando de esto.
---
Me miro al espejo, traigo puesto unos jeans negros con las rodillas abiertas, un polo top blanco suelto, botas caterpillar negras muy cómodas y el cabello suelto.
—No sabes vestirte como para un chico—me dice Malania mientras me barre con la mirada.
—Pues no me visto para él, me visto para mi—le guiñé el ojo.
Puso sus ojos en blanco—Teniendo esas piernas ponte un short o mínimo un pantalón más pegado no?
—No—respondí a secas—Si me pongo algo pegado me sentiré incómoda por ende lo trataré de la patada.
—Y como tu lo quieres tratar bonito—alargó la última letra.
—No es eso... O bueno, tal vez si.
—Te confundió, el muy pendejo sin duda te confundió.
—Que importa, me gusta estar confundida, sólo paro sonriendo.
—Pero cuando ya no estés confundida esa sonrisa desaparecerá—voltee rápidamente a verla—Es más, aparecerán lágrimas.
—Oh! Melania—me siento a su costado y colocó su cabeza sobre mi pecho—Ya pasó, fue hace más de un año.
—Tal vez nunca pueda superarlo sabes?
Ella se refiere a Blake, ese maldito, antes no éramos Melania y yo, antes éramos Melania, "Larissa" y yo.
Y, que paso?... Pues Larissa se metió con Blake o mejor dicho Blake se metió con ella, ella no quería nada con el, pero el siempre estaba detrás de ella aún estando con Melania, Larissa cayó y bueno ahora el trabaja más de 12 horas y ella distribuye su tiempo entre la escuela y en cuidar a un niño de ahora 5 o 6 meses que efectivamente es su hijo.
—Si hubieras seguido con el—hice una pausa—Hubieras sido tu la madre y tu vida estaría arruinada, y ni hablemos de tu cuerpo que es lo que más te preocupa.
Ella sólo sonrió—Tienes razón, gracias por ser mi amiga, sólo no te enamores de Raúl, ambas sabemos como es—me miró con los ojos rojos—No quiero que llores, no lo mereces, yo le fui infiel a Blake varias veces, tal vez me lo merecía , pero tu—baje la cabeza—Tu no eres como yo.
La abrace no pude evitarlo, si, yo sabía de sus infidelidades, fui cómplice también y bueno no la juzgó en nada, es mi amiga, aunque tal vez yo no fui una por no aconsejarla lo suficiente.
—Ya vete—se seco las lágrimas—Raúl te espera.
Le di un beso en la frente y me levante, la mire—Tu te quedarás aquí, sal cuando mi mamá se valla—puse mi dedo en la barbilla—Se ira a eso de las 11 u 11:30 am—sonreí—Ya sabes que esta casa es tuya.
—Gracias Mary—sonrió—Ahora ya sabes, se coqueta—negué con la cabeza.
---
—No va a venir—me dije a mi misma—Que tonta—patié la arena ensuciando mis zapatos—Bueno me voy, ya se sus intenciones—retuve una lágrima con un suspiro—Humillarme.
Camine lentamente a mi casa, de acá a mi casa es lejitos pero tenía ganas de llegar tan rápido así que decidí caminar.
En eso sentí que una sombra me seguía, voltee rápidamente, nadie, bufe—Estoy loca.
Seguí mi camino, pensando en las palabras de Melania...
"La sonrisa dura poco, luego llegan las lágrimas".
Pero que tonto, lo mío fue demasiado rápido.
Hoy en la mañana estaba sonriendo y hoy que sigue siendo de mañana casi medio día y ya quiero llorar, pero no lo haré, no en la calle.
Volví a sentir a alguien detrás de mi, voltee, nadie, acelere el paso.
Y si alguien me esta siguiendo, camine más de prisa, casi corriendo, en es sentí que alguien tiro de mi brazo, voltee no había nadie, paré en seco, nadie.
No enloquezca Maritza por favor.
Unos brazos rodearon mi cintura—No temas—y me jaló.
—Pero, me dejaste esperándote—cruce de brazos.
—No, claro que no, sólo quería verte de lejos, saber si lo que siento, lo siento aún estando lejos de ti—lo mire, esas palabras me embobaron—Y adivina que—colocó un mechón de mi cabello ahora desordenado detrás de mi oreja—Me di cuenta que aquella vez que te vi por primera vez si era un gusto y grande.
—Ton... tonterías—dije muy bajo, casi lo susurré.
Tomo mi barbilla y me beso, era un beso húmedo, sus labios remojados y suaves chocaban con mis labios secos por el temor de hace algunos momentos.
Toque lentamente su dorso conforme el beso seguía avanzando, no podía controlar el tiempo, no había tiempo, no transcurrían minutos en mi cabeza.
Me separo lentamente de entre sus labios, yo no quería abrir los ojos, no quería saber si lo que acababa de vivir era real o no, no quería abrir los ojos.
Sentí un aire en mi oído que llegaba con un mensaje—Quieres estar conmigo?
Solo necesitaba esa frase para saber que fue real, para poder abrir los ojos sin temor a que todo desapareciera y dije
—Sí.
***
Editado.