Jehová mira tu corazón

Jesus me salvó

Jesús me salvó, me alcanzó, me abrazó tan fuerte que supe que en sus brazos es donde yo necesitaba estar siempre...¿Cómo no pude darme cuenta antes de ese amor tan grande e incondicional? A veces no es es Jesus quien se aparta sino que nosotros mismo somos los que decidimos vivir nuestra vida fuera de El.
Me parece increíble de donde me sacó el Señor por eso al momento de adorarle mis lágrimas no pueden contenerse, es sin duda el sentimiento más hermoso.
Cuando somos jóvenes pensamos que no necesitamos de Dios, que lo tenemos todo, que somos "felices" viviendo como el mundo vive, sin embargo la Biblia dice; Bienaventurado el que me da su juventud, ser joven es un gran tesoro que sólo debemos de dárselo al dueño de nosotros mismos.
Te invito a que le des gracias a Dios por cada cosa que El te da, por la dicha que le conoces y el te ama.