Don't care your sex

38. Baile.

—Ustedes me producen diabetes.– Dice Connor mientras hace una mueca.

—Oh cállate.– Sonrío.

Vale, yo misma me estoy produciendo diabetes.

Al llegar a mi casa me despido de los chicos y de Ben, con quienes me encontraría más tarde para el baile de graduación.

Connor entra a su habitación y yo entro a la mía. Saco el lindo vestido celeste por sobre la rodilla, suelto y sin mangas que mi tía me regalo ya hace tiempo, y lo dejo sobre la cama.

Tomo una toalla, mi ropa interior y entro al baño. Media hora después salgo con mi cabello envuelto en la toalla y me coloco el vestido. Busco unos tacones negros, y decido dejarme el cabello suelto y en ondas. Me coloco poco maquillaje, de solo compacto, brillo de labios y rimel.

—Toc-toc.–Escucho a Connor desde mi puerta, mientras termino de colocarme los aretes.

Volteo encontrándome a un Connor bien vestido, con un traje negro, corbata de igual color, la cual resalta por la camisa blanca debajo, todo acompañado por zapatos de vestir.

Sonrío.– Estas muy guapo.

—Tu estas que arde, si no fueras mi hermana, no te dejaría en paz.–Ambos reímos.– Ven.– Me ofrece su brazo y lo tomo.– Romeo te espera.– Me guiña un ojo y ambos salimos de mi habitación hasta las escaleras.

Empezamos a bajar estas, sonriendo y hablando de estupideces. Mi sonrisa se vuelve más grande cuando me encuentro con Maison en mitad de la escalera, el estaba vestido con un traje similar al de Connor, solo que este era completamente negro.

—Estas hermosa Ali.–Me dice con dulzura mientras toma mi mano.
—Tu estas muy lindo, gracias por ir.– Sonrio.

—Eres mi hermanita, y porque te amo soy capaz de ir hasta para China.– Suelto una pequeña risa.

—Bien, entonces ve al fondo del mar y tráeme una perla, para que convine con mi atuendo.– Sonrío y su sonrisa se agranda.

—Mm, no se si esto.– Busca en su abrigo y saca una linda caja azul, con lazo negro.– Cumpla con tus expectativas.– Sonríe.– Pero combinaria bien con tu atuendo.

Mi sonrisa se llena de ternura al ver el lindo collar negro con una gran esfera similar a una perla en el centro.

—Es... Mai... Es hermoso.– Sonrío mientras levanto mi Cabello para que el lo coloque sobre mi cuello.

—Felicidades nena.– Sonríe y empieza a bajar conmigo las escaleras.

Maison se acomoda junto a Kylie y mi mirada empieza a pasar de mis tíos, hacia los chicos, todos estaban con trajes y Dios, gracias por darme a unos amigos tan sexys. Sonrío en mi interior antes de ver al chico a un lado de ellos.

Tenía un traje negro con collarín del mismo color, el cual resaltaba por la camisa blanca bajo este. Su barba había desaparecido, y ya no tenía esas horribles ojeras; tenía el cabello revuelto lo cual le daba un toque muy sexy. Su sonrisa había vuelto y en sus ojos se reflejaba.

Salude a mis tíos y a los chicos, quienes me detuvieron para alagarme por mi atuendo y demás.

—Ali, estas preciosa nena.– Me dice Mike.

—Gracias, nene.–Susurro lo ultimo en su pido.

—Alguien te espera chica.– Dicen todos a la vez señalando hacia el chico quien se gana mi atención instantáneamente.

Acorte la distancia que me separaba de el, y una gran sonrisa apareció en su cara.

—Hola.– Dije simplemente.