Extinción De Mates

Capítulo 22.

Llegamos a la mansion de Leonardo minutos después, tuvimos que transformarnos para llegar mas rápido. Al entrar me sentí en otro mundo la decoración es preciosa, muy fina y delicada las paredes son de color blanco cremoso y tienen arreglos de cristal por toda la casa. Pero no podía concentrarme en otra cosa que no fuera Matthew ¡lastimó a personas inocentes! Sentía la culpa cada vez más fuerte en mi interior, quería desaparecer.

—¡hey! Todo estará bien —me dijo Nina tratando de animarme pero eso no funciono.
—¿recuerdas lo que decíamos cuando eramos niñas? —preguntó con una tierna sonrisa.
—¿que tendríamos sexo hasta los 30?—dije frunciendo el ceño, sin querer reí al recordarlo...Eran tiempos felices.
—¡no! —dijo Nina riendo al igual que yo.
—el problema no es el problema, el problema es tu actitud frente al problema —dijo con una sonrisa dulce, yo suspire y asentí débilmente.

¿Pero como podría ser fuerte ante este problema? No podía ni siquiera fingir que todo estaba bien.

—acabaremos con Matthew —dijo Elio acercándose a nosotras me dio un cálido abrazado y un beso en mi frente.
—eso espero —murmure melancólica. Por esto quería ser una chica normal solo quería no tener nada que ver con lobos y vampiros.

—es mejor que vayamos a descansar —dijo Leonardo agotado, todos estuvimos de acuerdo mañana seria un día largo y seguramente estresante.

—ven conmigo —Leonardo me tomo de la mano y me hizo caminar por un largo pasillo hasta que llegamos a su habitación.

—necesitamos hablar —dijo mirándome preocupado.
—claro dime —dije desanimada, aun seguia pensando en todas las personas que fueron lastimadas por mi culpa.

—Matthew esta obsesionado contigo y no se detendrá hasta conseguirlo pero yo no lo permitiré... Te amo Natale Gabrielli tu me llenas de paz y tranquilidad algo que no había tenido en mucho tiempo. No permitiré que Matthew se quede contigo tu eres mía ¡solo mía! —exclamó de forma exagerada mi labio inferior temblaba, mi vista se había tornado borrosa.

¡Dijo que me ama! No podría estar más feliz es increíble como Leonardo cambia mi estado de ánimo en tan sólo unos segundos.

—yo también te amo —dije con mis ojos llorosos y una sonrisa radiante.

Leonardo exhalo aliviado y me atrajo a su cuerpo, uniendo sus labios a los míos.

—eres... Mía —susurro entre mis labios.
—solo tuya —murmure jadeante.

Me cargo en brazos y me deposito en la cama con delicadeza mientras besaba cada centímetro de mi cuerpo de una forma exitante, me desvistio rápidamente quedándome solo en ropa interior, yo desabroche su camisa y la tire al suelo. Ver a Leonardo era un regalo para mis ojos.

—eres preciosa —dijo mientras besaba mi cuello y lamia la marca que había en mi cuello, yo gemi sin poder evitarlo.

Entro en mi de forma lenta y tortuosa, la mirada de Leonardo decía todo lo que yo sentía.

Amor, cariño, pasión.

Y muchas cosas más, lo amo y es algo que siempre hare no importa lo que nos pase.

Entre gemidos llegamos al clímax, respiraba jadeante al igual que Leonardo.

—Natale —ese tono de voz no era nada conciliador.
—¿si Leonardo? —respondí.
—¿me amas? ¿De verdad me amas? —pregunto en voz baja, yo frunci el ceño y lo mire fijamente.
—si, de verdad te amo —dije con voz dulce.
—¿a pesar de los secretos que puedo ocultar? —dijo en susurro.

Yo solté un bostezo y cerré los ojos sin poder evitarlo no pensaba muy correctamente, estaba agotada.

—si Leonardo, te amo y te amare a pesar de los secretos que puedas ocultar —dije con voz débil mientras caía en la inconsciencia.

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Holaaa ¡¿les gustó este cap!? La verdad creo que tengo bloqueo no puedo escribir bien o eso siento espero que les haya gustado.