Todo por ti

Capítulo 35 : Falsa felicidad

Jacob

Ver a Rose y Emmett sobre el escenario me hizo recordar que Ness y yo también nos ibamos a casar. Una puñalada justo en el corazón. Verla sonreír mientras miraba a su amiga sobre el escenario con Emmett arrodillado junto a ella logró hacerme ver que quería a Ness en mi vida, para siempre. Quería su sonrisa adornando mi habitación cada mañana, despertar junto a su cuerpo tibio y el aroma tan característico de su cabello. Me descubrió observándola como un idiota.
-te amo- no habló pero pude leer sus labios. Salí del trance cuando oí a Rose llamándonos al escenario.
Tomé su mano y caminamos hacia el lugar, cuando pasamos junto a Edward alcance a oír que discutía con Bella.
Riley me guiñó un ojo, eso fue extrañamente perturbador.
El resto yo ya lo sabía, Rose nos pidió a Ness y a mi que fuéramos sus padrinos de boda junto con Alice y Jasper.
Ness se emocionó mucho con la idea, abrazó fuertemente a Rosalie y luego a Emmett que la tomó en el aire y le dio dos vueltas.
-Bueno, ¡esto hay que celebrarlo!- Alice buscaba oportunidades para estar de fiesta.
Todos reímos y bajamos del escenario mientras el público comenzaba a aplaudir nuevamente.
El resto de fiesta fue todo alegría a pesar de las constantes malas caras de Edward. Al parecer todos nos pusimos de acuerdo para ignorarlo, la única que soportaba sus bromas pesadas era Bella.
Cuando Alice se aseguró que todos se habían marchado nos invitó a la Push. Para variar Ness tuvo que obligar a sus padres a subir al auto, asegurarles que llegaría temprano y que Alice cuidaría de ella. Aún así Edward no quería que se fuera conmigo. Bella lo obligó a conducir y se fue hecho una furia.
Emmett y yo nos fuimos en el auto de Rose. Alice y Ness en el carro de Jasper. No había pensado hasta ese momento que a pesar de estar tan cerca jamás visitamos la playa.
-¿Ya cambiaste de opinión?- Rose me habló sacándome del mar de preguntas que azotaban mi cabeza.
-¿Sobre qué?- le devolví la mirada por el espejo retrovisor.
-Sobre el carro que me ibas a regalar- la miré confundido- sobre Renesmee tarado, ¿dejarás que se vaya?-
-Es lo que yo le pedí, tiempo, no puedo tan sólo cambiar de opinión cada cinco minutos-
-¿de qué hablas?, tienes sólo veinte años. Puedes cambiar de opinión cuantas veces quieras-
-eso no funciona así para mi-
-tendrá que funcionar porque si dejas que ella se marche, no regresará-
-¿por qué lo dices?-
-porque la veo sufrir por no poder estar contigo y Renesmee no es de esas chicas que afrontan sus problemas, los evaden. O debo recordarte que quería huir en vez de decirte la verdad. Ella aún se siente culpable por haberte mentido, y no soporta estar cerca de ti sin que la beses o la abraces-
Ya no quería que me siguiera diciendo algo que ya tenía claro y lo mejor para matar el tema fue una estocada -ya tengo las pruebas que necesitaba para meter preso a Charlie-
Un incómodo pero tranquilizador silencio llenó el carro por unos minutos.
-Piensa bien qué es lo que quieres Jacob, seré honesta contigo. Puedes odiarme si quieres pero te lo diré de todas maneras. Meter preso a Charlie no te devolverá a tu madre, por el contrario te quitara lo único que te ha hecho olvidar el dolor de no tenerla. A Renesmee-
-Eso intento Rosalie, intento no hacer algo de lo que deba arrepentirme por el resto de mi vida-
Bajamos a la playa en el sitio donde encontramos estacionado el auto de Jasper.
Me quité los zapatos para caminar mejor. Ness estaba sentada sola un par de metros más allá que Alice y Jasper que habían encendido una fogata.
-Conduces como bebé Rosalie, ya tienen la fogata lista-
-la próxima vez te vienes en tu moto-
-si claro, habría llegado a encender el fuego- me dio un puñetazo en el brazo.
Me senté a su lado e intenté averiguar que miraba con tanta detención aunque la inmensa oscuridad sólo dejaba ver el reflejo de la luna en el mar.
-el mar es un embaucador igual que tú- dijo con la voz quebrada.
-me gustaría saber qué significa eso-
-Su aparente calma y sensación de paz jamás haría dudar a alguien , nadie logra dimensionar las huellas que puede dejar con su paso y mucho menos puedes imaginar que del otro extremo algo totalmente nuevo te espera.
Que jamás podrás llegar a conocer cada rincón de su profundidad-
-no se si ofenderme o nominarte para un premio de literatura- logré que riera.
-Lo que quiero decir es que cuando te conocí no pensé que cambiarías mi vida de este modo, tu eras todo lo contrario a lo que yo buscaba. Que debajo de esa fachada o reputación que tenías existía una hermosa sorpresa.
Tu eres una constante tormenta en mi vida, pero estoy dispuesta a permanecer bajo la lluvia-
-perdoname Ness- me miró no entendiendo nada- perdón por haberme enamorado de ti y no dejarte alternativa. Pero no pude evitarlo-
-la tuve Jake, tuve la oportunidad de ignorarte, de irme lejos cuando mi padre me lo ofreció, tú debes perdonarme también porque no quise hacerlo. No tuve el valor para alejarme de ti cuando tuve la oportunidad. Yo quise seguirte cuando te fuiste sin explicación de mi casa. Yo decidí responder tus llamadas, yo decidí corresponder tu amor, yo decidí que fueras el primero en todo- hizo una pausa- yo decidí mentirte creyendo que te evitaría el dolor y la decepción por lo de tu madre-
-somos culpables de nuestras decisiones y tenemos que vivir con ellas-
-¿cuándo? - sólo eso preguntó y yo comprendí.
-cuando te hayas ido, no quiero que pases por esto-
-quiero estar aquí para verle la cara a mi padre, él no se espera que lo culpen por encubrimiento-
-¿Cómo sabes que ya tengo las pruebas que necesitaba?-
-Tus mensajes, los que me enviaste. Decías que tenías que hablar conmigo pero no era de nosotros, y de qué más podría ser. Además no sé si recuerdas pero yo te ayude a sacar los archivos de la oficina-
-Es cierto, no olvidaré ese día. Pero no por las razones que crees-
-eres un pervertido Jacob Black-
-si, ese soy yo, a sus órdenes siempre que quieras-
-ya deja de coquetear conmigo, ven aquí- se puso de pie y me arrastró a la orilla de la playa.
-¿que vamos a hacer?-pregunté ingenuamente.
-¿vamos?, eso me suena a multitud, sólo tú lo harás- apenas terminó de hablar me empujó al agua. Estaba fría pero no me impidió pensar y rápidamente me puse de pie y la perseguí.
Me encantaba verla reír. Ness debía ser feliz, conmigo o sin mi.
La atrape estrellándonos contra la arena, ella quedó sobre mí llenándome el rostro con su cabello. No sé cómo había sido tan bruto en no percatarme hasta ese momento que llevaba el collar que le regalé.
Nuestras respiraciones estaban agitadas por la carrera, y nuestros etiquetados atuendos llenos de agua y arena.
-No te vayas-solté de pronto sin filtro ni pensando en lo que decía, sólo lo que sentí en el momento.
-Tú estás demente, y eres la persona más bipolar que he conocido-
-Creí que esa persona era Rosalie- levanté una ceja.
-Si, tienes razón. Pero no le digas que yo dije eso-
Soltamos una carcajada al unísono y Nessie se tendió a mi lado.
Las horas pasaron rápidamente, el fuego se había extinguido y todos dormían tendidos y abrazados. Yo había despertado por los finos rayos de sol que comenzaban a asomarse en el horizonte.
Anoche ella no había respondido mi pregunta ¿Cómo saber si había cambiado de opinión y se quedaría conmigo?
-Deja de mirarme así- dijo sorprendiéndome.
-No me canso de hacerlo-
-Pues deberías, no haz dormido en toda noche-
-Hace mucho que no estábamos juntos, quería disfrutarlo-
-Extrañaba dormir a tu lado, llévame a casa Jake-
-Si claro, pero no tengo vehículo. Llamaré un taxi para que nos deje en tu casa y luego a la mía-
-No- me interrumpió- quiero irme a casa, nuestra casa-
Mi corazón casi se salió del pecho, ¿eso era un si? Ness quería regresar a mi lado y yo olvidaría mi obsesión y sed de justicia porque la quería a ella.
-Ok vamonos- dije rápidamente para que no cambiara de opinión.
Tomamos prestado el celular de Alice y pedimos un taxi.
Llegamos a casa y yo aún seguía sin poder creer que ella estuviera aquí de nuevo.
-Todo sigue igual- dijo una vez dentro. -Eso no es cierto, este lugar está vacío sin ti, aunque no lo creas yo casi no pasaba tiempo en esta casa. Los recuerdos me consumían-
-Recuerdos- murmuró- hablando de eso ¿recuerdas la vez que Rosalie y Emmett cayeron sobre la mesa de centro de lo ebrios que estaban?-
-Como olvidarlo, Rose estaba furiosa porque decía que tendría que pagarme la fina mesa que yo había comprado-
Reímos, nos miramos y el fuego se prendió. Me acerqué despacio y pasé mi mano por su nuca enredando mis dedos en su cabello y la bese. Oí como su delicada carterita de fiesta caía al suelo para colocar sus manos sobre mi cuello y pegarse más a mi. Me quité la chaqueta de un movimiento mientras ella aflojaba lo que quedaba del nudo de mi corbata.
Ansioso era la mejor palabra que describía mi situación, quería tenerla ya, me estaba desesperando por sentir su cálido interior. Sin despegarme de su boca subí escaleras arriba arrastrándola conmigo. Cuando ibamos a entrar en mi cuarto me detuvo.
-En el mio- dijo agitada- porque supongo que sigue igual-
-Intacto, igual que mi amor por ti-
Lo demás quedará guardado en mi memoria, nos amamos como la primera vez, con el deseo y los sentimientos desbordando todo tipo de sensaciones.
El sueño se apoderó de mí, llevaba muchas horas sin pegar un ojo.
-Te amaré siempre, no importa donde esté, debes recordar eso a cada instante- fue lo último que oí.
-No me dejes nunca, me olvidaré de todo si te quedas a mi lado- luego de decir eso me dormí como un bebé.
Horas después

Abrí los ojos, escuchaba voces a lo lejos. Busque a Ness pero no estaba.
"debió bajar a comer algo".
Miré por la ventana y ya era de noche nuevamente ¿cuántas horas dormí?
La voz de Rosalie terminó de despertarme.
-No tengo idea Alice, estoy en su casa pero no está en su cuarto pero debieron estar aquí porque la ropa de Jake está en el piso-
Abrí la puerta aún medio dormido y me encontré con Rose de frente.
-¿Qué haces en el antiguo cuarto de Renesmee?-
Sonreí -¿Ness está abajo?, tengo mucha hambre-
-Alice lo encontré, te llamo luego- colgó el teléfono.
Baje bostezando las escaleras, Emmett estaba sentado en el sofá con cara de preocupación.
Rose bajó tras de mi.
-Tengo mucha hambre- reclamé.
-Jake, escúchame-
-Si pero por favor déjame comer algo antes-
-No, esto no puede esperar-
-Claro que si, dame cinco minutos-
-NO JAKE ESCÚCHAME AHORA- gritó lanzándome un cojín que tomó del sofá.
-Está bien, que intensa Rosalie-
Entonces Rosalie comenzó a llorar y yo nunca la había visto así, me preocupe y supe que algo no andaba bien.
-Bella me llamó histérica- Emmett se acercó y la abrazó.
-Rose me estás preocupando ¿Qué sucede?-
- Renesmee-
-¿Le pasó algo?- me altere.
-Renesmee entregó las pruebas que encontraron. Charlie y Edward están en la cárcel junto con el detective que estaba ocultando todo-
-No eso no es posible- subí a mi cuarto y busque el pendrive con la información que saqué de mi correo y no estaba- ¡Mierda!- golpeé el escritorio.
Me vestí y bajé rápidamente.
-¿Dónde está Ness?, debe estar destrozada-
Miré a Rosalie esperando que me respondiera. Luego a Emmett. Nada. Tuve que deducirlo por sus caras.
-No, ella me dijo que quería venir a casa conmigo, me dijo que me amaba, que no olvidara que ella me amaba estuviera donde estuviera- se estaba despidiendo. Ness se había despedido y yo ni cuenta me había dado.
-¿a qué hora sale su vuelo?, voy a buscarla- tomé las llaves de la moto y mi chaqueta.
-Jake, su vuelo salió hace una hora-
Me partí en mil pedazos.
No debí dormirme.
Ahora ya no estaba, mi felicidad se había fugado.