Capítulo 14: ¿Qué estás ocultando? Parte 1

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Jacob

Renesmee se comportó de una forma muy extraña desde que salimos de casa, su cuerpo estaba presente pero sus pensamientos en otro sitio, era la primera vez que la veía así, tal vez el motivo era que hoy no pudo visitar a su madre, Rosalie me comentó durante el  camino que se reconciliaron con Emmett y que Alice y Jasper habían estado de visita.

-Renesmee, Renesmee, Renesmee- intenté captar su atención pero no sirvió de nada entonces decidí llamar su atención de otra manera, comencé a acariciar su suave cabello al mismo tiempo que mis dedos masajeaban su cabeza hasta que cerró los ojos unos segundos para luego mirarme fijamente.

-¿Qué sucede Renesmee?- pregunte una vez que por fin me tomó en cuenta.

-Espero que nada Jake, tengo que irme- ¿irse?, ¿Por qué?, no comprendía nada fue tal la sorpresa que no reaccioné hasta que la vi cruzar la puerta del salón VIP. Antes de salir intercambio unas palabras con Alice y ella le entrego unas llaves que sacó de su bolso. Decidí seguirla.

-¿Pretendes caminar?- pregunté alzando la voz para que me oyera, había salido de la disco.

-Jake, no deberías seguirme, necesito estar sola y debo ir a la casa de mi padre-

-Al menos déjame llevarte, es demasiado peligroso y muy tarde para que vayas tu sola y caminando, ¿Qué sucede?, ¿Qué estás ocultándome?-

-No estoy ocultando nada- casi tartamudeo para decirlo, no la conozco hace mucho pero estaba seguro de que me estaba mintiendo.

-No estoy ocultándote nada, porque no se nada- volvió a decir.

-¿Y que se supone que significa eso?- no me gustaba nada este sentimiento, ¿Qué sería tan terrible como para ocultármelo?-

Se me acercó despacio y me ofreció una sonrisa de esas que me alegraban el día. –Está bien puedes llamarme un taxi si quieres para que no te preocupes-

-No, te llevaré yo mismo, prometo no entorpecer en lo que sea que tengas que hacer-

-No puedo decirte que no ¿verdad?-

-No- dije abrazándola para acercarla a mí.

-Te amo y no soporto la idea de que algo te suceda-

-Nada me sucederá,  vamos- me besó y tiro de mi mano para que avanzáramos, ella prefirió que nos fuéramos en taxi, haría menos ruido que mi moto.

Me gustaría saber qué es eso tan importante que tiene que hacer a las dos de la madrugada en la casa de sus padres sin embargo tendré que esperar  que ella se decida a contarme. Las calles estaban despejadas por lo tanto no nos llevó tanto tiempo llegar hasta la casa de los Cullen. Pague el taxi y ambos nos bajamos.

-Debiste regresar en el mismo taxi, no sé cuánto tiempo demoraré- dijo viendo hacia una ventana que aun dejaba una luz encendida, se percató que yo también me fije y me indicó que era el despacho de su padre.

-Seguro tiene una reunión importante o algo que involucra mucho dinero como para que este despierto a esta hora- comentó desganada era obvio que no compartía ideales con Edward.

-Entonces debes aprovechar que aún no se duerme, así no le darás un susto cuando entres sin autorización a su casa-

-No te preocupes por eso, conozco muy bien esta prisión y se cómo entrar sin que se den cuenta lo hice un par de veces antes de mudarme- yo me quedé viéndola extrañado.

-¿Qué?, ya conoces a Rosalie no me mires así- me dio un beso corto que me dejo queriendo más de su boca y la vi alejarse hacia la entrada, pretendí caminar hacia una de las esquinas para llamar por un taxi pero solo espere que estuviera dentro para instalarme a esperar que saliera.

Todo por tiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora