Buscando a Alguien

Capítulo 6: "Envidia y Celos"

El príncipe Lucas y Alicia no podían creer en el lío que se habían metido por algo que nunca se imaginaron hacer, ellos ni pensaban en eso, solo en recobrar energías para el resto del día. Elisa tenía una sonrisa pícara que les mostró a ellos, ella sabía que Alicia nunca haría eso, pero no pensó eso antes de decirle a su madre. Sin embargo, no se arrepentía por haberlo hecho porque tenía envidia de Alicia, porque el príncipe estaba enamorado de esa pequeña joven, Elisa se sentía tan incapaz de separarlos por su misma cuenta y ahora que vio la oportunidad lo hizo.

Mientras la envidiosa Elisa pensaba en cómo hacer más grande el escándalo y separar a esos dos, Alicia estaba muy triste ordenando su cama y alistándose para la ducha. También ella quería hablar con Erika para entrar en razón del regaño injustificado que les dio. El príncipe se sentía tan mal por Alicia, no podía creer como sería castigada por algo que nunca hizo, él se sentó en su cama viendo a Alicia como su cara se entristecía por culpa de Elisa. Lucas se levantó de un impulso de la cama y fue hasta a Alicia a darle un abrazo por detrás lo cual la sorprendió mucho, que hizo que diera un suave grito, ella dio la vuelta, ambos se observaron pero siempre la tristeza estaba presente.

–“No se preocupe todo saldrá bien. Déjeme ayudarle, Ali, yo hablaré con sus padres para aclarar la situación.” –el príncipe le dijo muy suave para que no escuchara Elisa, terminado de decir eso él se dirigió a ducharse.

Lucas, el príncipe, se puso unos pantalones color azul marino, una camisa celeste y una chaqueta vieja color azul como sus pantalones. Alicia se tranquilizó al escuchar aquellas palabras de Lucas, ella vio a Elisa quien usaba un vestido ceñidísimo de color turquesa que resaltaba su tez blanca, esa joven era la culpable de todo. La joven de cabello marrón claro, Alicia, terminó de prepararse; ordenó su cama, se dio una ducha y se puso un sencillo vestido de color beige con mangas largas. Ella comió muy callada en la mesa donde estaban presente Erika, Elisa y el príncipe Lucas. Cuando todos terminaron de desayunar nadie dijo una sola palabra.

–“Lucas, recuerda que tienes que estar todo el día con el Sr. Robinson, y a las cuatro en punto de la tarde, quiero que regreses a casa, para ir a casa de los padres de Alicia. Y usted jovencita, tendrá que hacer todo lo que he escrito en esta lista. Hija mía, tu como siempre en tus labores. Ya está dicho, a las cuatro nosotros tres iremos a tu casa Alicia, no se les olviden cuatro en punto.” –dijo Erika con un tono muy molesto quien rompió el silencio, luego se fue de la casa.

El príncipe y Alicia observaron a Elisa muy enfadados, ellos querían decirle algunas palabras a ella por lo que hizo, pero no quisieron empeorar las cosas peor de lo que estaba. Ella iba saliendo de casa, hasta que, Alicia no soportó la injusticia que estaba viviendo por culpa de ella, que la tomó del brazo, diciéndole:

–“¡¿Qué he hecho para haberle dicho a tu madre que hicimos algo que tú misma inventaste!? No me interesa si le vas a decir a tu madre esto, pero solamente quiero saber ¿Por qué me odias o que te hice para merecer esto?” –Alicia la soltó del brazo, esperando una respuesta mientras Lucas la calmaba.

–“Si quieres la verdad, te la diré. Tú siempre obtienes lo que quieres, todos los jóvenes tienen sus miradas puestas en ti, mi hermana me dijo años atrás, que hubiera deseado que tú fueras su hermana y no yo. Y lo peor de todo, que el  joven más atractivo que ha venido a este pueblo, está enamorado de ti quien es el príncipe Lucas. Por eso quiero verte tan sola una vez, en problemas.” –Elisa se había desahogado por primera vez lo que pensaba de Alicia, ella terminó de decir eso y se marchó.

Cuando Elisa se marchó, el silencio estaba reinando en esa casa con dos jóvenes que se querían mucho, a pesar que nunca se habían dicho lo que sentían pero llegaría ese día. El príncipe Lucas se quedó tan asombrado de las palabras de Elisa que se sentía mucho peor que antes por Alicia, en cambio, ella ya se lo esperaba, sabía que Elisa siempre le guardaba un rencor hacia a ella pero no opinó nada al respecto. Alicia se despidió de Lucas, para hacer todas las órdenes que le dio Erika; el príncipe Lucas abandonó la casa para ayudarle al Sr. Robinson en la cosecha.