Luego de que Percy nos secara fuimos al comedor, era una gran área abierta sostenida por troncos de madera bien ubicados. Y con muchas mesas, unas con varios chicos y una que otra solo con un miembro.
-—Cada dios tiene una mesa —explicó Percy—. Aún no te reconoce pero creo que podrías comer conmigo.
—Bien —sonreí.
—Nos vemos después de la cena —murmuró Annabeth.
—Te pasaré a recoger —dijo Will.
— ¿Por qué nos miran con caras de preocupados Percy? —susurré.
—Pide lo que quieras comer y aparecerá.
—Percy.
—Los hijos de los tres grandes siempre son protagonistas de grandes profecías.
— ¿Entonces tendré una, y será peligroso?
—No lo sé —soltó con un mueca de preocupación—. Pero no te preocupes, yo te cuidaré.
Y no, eso no me quitó el peso de encima. Tampoco el hecho de que en una hora de cena, porque él comía mucho, me contara de cómo había salvado el mundo en varias ocasiones, contra cronos y gea y un montón de titanes más.
Muchos de los chicos que nos rodeaban cuchicheaban y me miraban acusadoramente, más de una mesa en que la mayoría eran castaños y de ojos acules como el cielo. La mesa de Hermes según había escuchado decir a Will.
—No creo que Quirón quiera que te instales de una vez en la cabaña de Poseidón, así que te quedarás para mientras en la cabaña de Hermes. Solo serán unos cuantos días hasta que él te reconozca y puedas mudarte.
— ¿Estás seguro de que será poco tiempo? —pregunté.
—Sí, cuando la guerra contra cronos, pedí que se reconocieran a los semidioses poco tiempo después de llegar.
—Eres todo un súper héroe Percy —dije golpeándole un brazo.
Él rio, mientras me pasaba un brazo por los hombros. Lo sentía como un hermano, esperaba que lo fuera. Me contaba sobre la guerra y de los miles de caídos, ¿quién creería que el señor D tenía sentimientos? Nunca me hubiera imaginado a ese señor lamentándose por la muerte de su hijo Castor. Aunque le quedaba otro hijo, Polux. Un chico bastante mayor con cara de chulo. La verdad es que sí lo era, tenía el cabello negro y piel olivácea, así como unos ojos azules, que brillaban como cristales en el sol.
— ¿Entonces Silena se hizo pasar por Clarise?
—Así fue, terminó muriendo, pero nos inspiró a todos a luchar con nuestras últimas fuerzas —suspiró.
Asentí, debía ser una gran chica para hacer eso, no podía imaginar lo dolida que podía haberse sentido por la muerte de su novio, y peor aún al saber que ella los había traicionado.
Una sombra se movió por enfrente de nosotros, que estábamos sentados frente al lago, finalmente Will se había tenido que ir a la enfermería por un chico con cortadas serias en una práctica y Annabeth fue llamada por Quirón. Así que habíamos terminado en el mar, no era de extrañar.
— ¿Y en qué escuela estabas? —preguntó Percy.
—En la academia Yancy, es una escuela...
—Para niños con problemas —terminó el chico y se encogió de hombros—. Yo también asistí a esa, junto con Grover al que por cierto Nancy molestaba mucho.
— ¿Bobofit?
—Sí, ¿la conoces?
—Sí, es la hermana mayor de Giley, es una insoportable, le hace la vida imposible a Sami. ¡Maldición!, me olvidé de ella.
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Esto es ser semidiosa (Nico D' Angelo)
Fiksi PenggemarLa mayoría de humanos dicen que son mitos, nosotros sabemos que no. Los dioses griegos existen y son parte del mundo actual. El Olimpo se encuentra en el empire state y los dioses bajan a la tierra para divertirse. En otras palabras, vienen a engend...