Capítulo 4: ¿Pasa la noche aquí?

4.3K 265 39
                                    


-P'Phun, ¿quién es él?


Escucho la voz de mi hermana pequeña detrás nuestro. Sonrío a Noh, y respiro profundo antes de voltearme.


Pang está parada junto a nosotros en sus pijamas, mirando con curiosidad hacia Noh, quien está intentando con todas sus fuerzas pasar tan desapercibido como sea posible, escondiéndose detrás de mí.


-¿No me dijiste que te ibas a la cama? –le pregunto. ¿Había estado recostada? Su cabello está todo enredado y revuelto así que automáticamente estiro la mano para alisarlo, como siempre he hecho. Nadie en la escuela lo sabe, pero puedo hacer una buenísima trenza en cascada luego de todos estos años de práctica con Pang.


-No podía dormir, así que bajé para ver si Papá ya había regresado a casa. Pero entonces te vi –ella está hablándome pero sus ojos están en Noh como si fuese a comérselo. Puedo decir que ya le cae bien. Él, en cambio, le da una mega sonrisa, amplia y falsa, la misma que tenía en su archivo de alumno. Tonto.


-Oh, bueno... un amigo... vino a verme –pongo un énfasis extra en la palabra amigo.


-¿Amigo? –responde, desconcertada. Ella conoce a todos mis amigos, al menos a todos los que sean probables de venir hasta aquí. Noh hace un pequeño saludo con la mano y un apenas perceptible "Hola". La sonrisa falsa aún está en su cara, como si su vida dependiese de ello.


-En realidad... -me volteo para ver a Noh. De acuerdo, ¡hora del show, Napat! No me importa si estás listo o no, éste es el fondo del asunto. Le doy una patada en la espinilla para que deje de esconderse detrás de mí y para que se coloque a mi lado.


-Dijiste que querías conocer a P'Noh, así que le pedí que viniera.


-¿Yo quería conocer a P'Noh? –pregunta, pero la comprensión ya está dibujándose en sus ojos.


-Me dijiste... que querías conocer a mi novio, ¿no? –Las palabras se escapan de mis labios con facilidad. Tomo rápidamente a un Noh en estado de pánico, antes de que pueda alejarse, y pongo mis brazos alrededor suyo.


-¿¡Qué demonios!? –protesta él, golpeando mis brazos. Lo ignoro y tomo sus manos para detenerlo. El idiota aún se retuerce de mi agarre y sonrío disculpándome con Pang, esperando que ella tome todo esto solo como Noh siendo tímido.


Sin embargo, Pang ya está emitiendo un chillido bajito dentro de sus manos. Sus ojos están tan brillantes y felices. Sonrío también, feliz de que ella lo sea.


-Tienes que traerlo adentro, lo trajiste hasta aquí y ¡quiero saber todo sobre P'Noh! –declara y corre adentro.


Aunque no suelto a Noh inmediatamente. Siento que escapará en cuanto lo deje libre. Sus hombros no son muy anchos, así que es fácil sujetarlo.


-Mira, solo sigue el juego, ¿bueno? Ven adentro un rato, toma algo y charla un poco con ella y entonces puedes irte a casa.

El Diario de PhunDonde viven las historias. Descúbrelo ahora