¿O si no que?

CAPÍTULO 5

Srta S por ser la primera en votar en el capítulo anterior seras quien reciba mis mas sinceras "GRACIAS", gracias por leer, gracias por comentar, gracias por votar y sobre todo gracias por esperar cada día y con paciencia (esto es por si algún día me retraso) a que suba un nuevo capitulo

Tres días más tarde, Kate vio desde la ventana de su cocina cómo su padre y algunos trabajadores más, ayudaban a Rick a bajarse del coche de su madre y lo llevaban a su casa.

-Zo, Ian, ¿queréis venir conmigo? -les preguntó, soltando su taza de café encima de la encimera. Los niños levantaron la vista del juego al que estaban jugando.

-¿Dónde? -preguntó el mayor.

-Mmm... -se hizo la interesante. -Es una sorpresa. ¿Venís?

Los dos hermanos se miraron entre ellos con la ilusión reflejada en su rostro.

-¡Sí! -gritaron los dos a la par.

XXX

-¿A casa? -los dos niños la miraron con la nariz arrugada. Dos hombres salieron justamente cuando estaban subiendo los primeros escalones de la entrada principal.

-¡Papá! -exclamó Ian. Estos días atrás su casa había estado cerrada, salvo cuando habían ido a coger ropa o juguetes con Kate pero no había habido movimiento alguno.

-¡Sí! -afirmó Beckett al ver la mirada de los pequeños puestas en ella con un deje de esperanzas e ilusión en sus ojos.

Ian y Zoey salieron corriendo, entrando a la casa a toda prisa. Llamando y buscando a su padre por todos lados hasta que llegaron a su habitación.

Una gran sonrisa se dibujó en los labios de Richard al ver a sus hijos entrar en su dormitorio. Hacía 11 días que no los veía y los echaba mucho de menos. Este que estaba acostado en su cama, abrió los brazos para recibirlos.

Ahogó un quejido cuando los niños, que frenaron su carrera con el cuerpo de su padre, se reunieron con él en ese abrazo.

-Os he echado mucho de menos -les confesó cuando la punzada de dolor que había sentido en su espalda se redujo lo suficiente como para poder hablar.

-Yo te he echado mucho, mucho de menos, papá -Dijo Ian, abrazándose más fuerte a su padre, sin darse cuenta de que la espalda de su padre se resentía. Castle pasó una mano por el pelo de su hijo, despeinándolo.

-Yo también, papi -canturreó la niña, besando su mejilla.

Castle no se dio cuenta de la presencia de Kate, que había llegado después que sus hijos y se había situado al lado de sus padres, hasta que Ian se abrazó a su piernas diciendo algo como "Los doctores mágicos lo han curado como al padre de Carlo", con una gran sonrisa en sus labios.

-Kate... -dijo Richard, rodeando con un brazo a un a su hija.

-Castle, ¿cómo estás? -le preguntó con un deje de timidez en su voz. Sabía que él había preguntado por ella y esperaba que fuese otra vez a visitarlo pero, ella, no se había aparecido de nuevo por aquella habitación de hospital.

-Mejor. -Sonrió, al recordar las palabras del médico. -No operación.

-Lo sé -dijo, ahora más contenta. -Me alegro mucho.

-Gracias. Y gracias por cuidarlos. Significa mucho para mí. -Peinó con sus dedos los cabellos de Zoey.

-No tienes que darla. -Sonrió y rodeó los hombros de Ian que seguía a su lado.

-Claro que sí que tengo que dártelas. Es más, te mereces más que las gracias. -Beckett negó con la cabeza.

-Rick, -intervino Jim -tengo que avisar al hospital -trasteó en su móvil. -¿Vas a querer que manden una enfermera para que te ayude?