* Everybody hurts * (Larry Stylinson)

6.- De inocencia a lujuria

Louis había perdido la noción del tiempo después de eso. No sabía cuánto tiempo había estado apoyado contra esa pared con las piernas ligeramente flexionadas y los puños cerrados con los brazos a sus costados. Se sentía enfermo sabiendo que al chico que había odiado y deseado profundamente en los últimos días era el mismo chico al que unos años atrás enseño a montar en monopatín o a atarse los cordones. Además el alcohol no ayudaba en nada en el momento actual, solo le hacía sentirse más confuso y que su cabeza doliera como el infierno.

Sin embargo Harry se sentía bien, más que bien, se sentía pletórico. Solo por ver la cara de Louis durante 3 segundos mereció la pena haberse mudado de país y haber dejado que Gemma le eligiese ropa ajustada y le maquillase y peinase como si fuese un stripper o un chico de compañía.

Pero Harry no solo había atraído las miradas de Louis, Harry había sido la principal atracción de la fiesta, bueno al menos mientras Zayn no se encontraba, porque todo el mundo sabe que el rey de la fiesta era, es y será siempre Zayn Malik. Harry volvió a integrarse entre la multitud cuando terminó de hablar con Louis y lo único que podía decir es que había estado muy pero que muy bien. Conoció a gente muy diversa y divertida e incluso ligó con varios chicos y chicas, aunque a él no le interesaba pasar de un flirteo con ellos y con ellas. Harry sabía que debía sentirse culpable por Luka, su novio, pero él ni siquiera se había acordado de él en toda la noche. Él no iba a tener nada con nadie porque Louis estaba en esa fiesta y porque a Harry, después de 10 años, todavía le importaba que el mayor tuviera buena imagen de él.

Lo que no esperaba Harry, tras llegar a las 6 de la mañana a su casa, era que alguien estuviera pegando a su puerta a las 10 de la mañana.

- Gemma abre la maldita puerta- Harry gritó y recibió el silencio y un timbrazo más como respuesta.

Gemma y los niños habían salido temprano en la mañana a hacer unas compras y a pasar el día visitando la capital británica y eso era algo que Harry no sabía y era algo que ahora mismo no le estaba haciendo ninguna gracia.

El dueño de la casa se puso su elegante batín de seda egipcia de color negro y bajó a abrir la puerta a él insistente visitante. Lo que Harry no esperaba era que quien estuviese tras las puertas fuese su ex mejor amigo Louis Tomlinson.

Harry miró a Louis con cara de shock. El otro chico iba vestido de una manera sencilla y con un beanie gris en la cabeza. Esto hizo a Harry sonreír mentalmente, nunca le daría la satisfacción a sassy Louis de verle sonreír abiertamente. Louis iba cargando una caja de la pastelería de Tommy, era el lugar preferido de Harry al menos hasta que cumplió 10 años y la dependienta le rompió el corazón.

- ¿tú que haces aquí?- Harry preguntó

- Hola Hazza, yo también me alegro de verte- Contestó Louis sonriendo abiertamente.

- Mi nombre es Harry no Hazza, no tengo 10 años Louis

- Ojalá tuvieras 10 años, tenías mucho mejor humor entonces

- Tengo una resaca enorme para estar con estas tonterías a las 10 de la mañana Tomlinson.

- Solo quería hablar contigo y te he traído tus pasteles favoritos para desayunar

- Yo no como azucares refinados desde hace unos años, pero gracias Louis, venga entra y hablemos un rato.

Harry se hizo a un lado y dejó pasar a Louis. Se cerró la bata mejor para que Louis no viera que no llevaba ropa interior debajo de la finísima y carísima tela.

- ¿Cómo ha estado tu vida Harry?- Louis preguntó amablemente, casi pareciendo el mismo Louis de antes.

- Un trabajo interesante, siguiendo la estela de mi padre, un novio modelo, una hermana y unos sobrinos mellizos. Paris ha sido interesante pero estoy de vuelta en casa ya.

- ¿Has resumido 10 años en 2 frases?- Preguntó Louis de manera divertida.

- Ahora soy un chico de pocas palabras, un empresario de éxito con amigos serios y disciplinados, no soy el mismo que era antes, he madurado.

- Si te soy sincero me gusta mucho más tu cambio físico que tu cambio de personalidad Harry, antes no eras tan aburrido- Louis dijo fingiendo bostezar.

- No soy para nada aburrido, y puedo demostrártelo cuando quieras. Que no sea una puta como algunos de tus amigos no significa que sea un aburrido, se divertirme y cuando quieras puedo demostrártelo- Harry comentó manteniendo esa cara de autosuficiencia que Louis siempre había querido golpear desde que le vio hace unos días.

- Creo que ha sido un error venir aquí, eres un imbécil que te crees mejor que los demás y no lo eres. Zayn no es una puta, él tiene relaciones sexuales de manera libre y consentida y eso no tiene ningún problema, y no deberías juzgarle cuando está claro que ayer te le hubieses follado en la fiesta.

- Louis... yo lo siento, tienes razón ayer me hubiese follado a zayn e incluso te hubiese propuesto un trio, pero a mí me va algo más que el sexo ocasional, tengo un novio, y es algo serio aunque cada vez estoy menos seguro de si va a funcionar. Por favor quédate, al menos podemos tratar de ser amigos ¿sí?- Harry le extendió la mano para estrechársela y así cerrar esa especie de trato.

Louis estrechó la mano de Harry y le sonrió amablemente, mostrando una bonita sonrisa que a Harry le pareció sincera.

- Está bien, pero debes dejar de ser un idiota prejuicioso e intentar abrir tu mente a un mundo de fiestas con alcohol y sexo, esa es mi vida ahora. Esto no quiere decir que sea un imbécil sin oficio ni beneficio, yo estoy trabajando como profesor de teatro pero aunque tenga casi 30 todavía se divertirme.

Harry asintió sonriendo y sonrió más ampliamente cuando recordó el traje que llevaba su antiguo amigo la noche anterior.

- Louis ¿lo de vestirte con disfraces sexy de mujer lo haces mucho o solo fue anoche? Porque por mi cabeza se están pasando un par de trajes que podrías probarte para mi una noche en mi habitación, a solas- Harry miró a Louis y le guiñó un ojo de forma descarada.

Louis se puso de 50 tonos de rojo y apartó la mirada hasta que consiguió calmarse, entonces suspiró y comenzó a contestar a Harry.

- Eso fue una absurda apuesta con Zayn que perdí, y el muy imbécil tiene algunos fetiches raros que yo siempre tengo que cumplir. Por cierto se hace tarde y debo irme. Deberías subir arriba y alimentar a la nueva bestia sexual en la que te has convertido Styles, me siento orgulloso de que hayas seguido mi ejemplo viejo amigo. Por cierto ten cuidado conmigo, ya no somos niños y el que juega con fuego se quema.

Esta vez fue Louis quien guiño un ojo a Harry mientras se limpiaba con la lengua los restos de nata que habían quedado tras comerse el pastelito.

Harry acompañó a Louis a la puerta y cuando este se fue subió a su habitación y se tumbó en la cama. Harry rememoró en su cabeza la conversación con Louis una y otra vez en su cabeza y empezó a tener un sentimiento que nunca antes había estado allí cuando pensaba en Louis, solo desde los últimos 3 días. Era ese deseo irrefrenable de poseerle o de ser poseído, la lujuria.

Harry sonrió al recordar las palabras que Louis le había dicho. Louis pensaba que Harry podría quemarse si jugaba con él, y Harry estaba seguro. Lo que Louis no sabía es que Harry también podía ser como fuego para él y que Harry era como un pirómano que amaba jugar con fuego.