Inside

Capitulo 1

Despierto con una gran dolor de cabeza, no recuerdo nada de la noche pasada.
Ah si, fui a una discoteca y bebí para olvidar mis "problemas" un poco, donde está Charlie?
Esperen, dónde estoy? En un gran cuarto blanco y gris, hay una computadora y una taza de café.
C A F É! Lo necesito en este momento, aunque lo odio, tengo que despertarme e irme de esta casa.

No me interesa como llegué aquí, espero no haber hecho nada con alguien.
Me alzo de la cama directo al café, y me doy cuenta de no estar vestida como ayer por la noche, tengo una camisa gris y gracias al cielo tengo todavía mi jeans blancos.
Cojo la taza de café y bebo un sorbo, dios me parece la cosa más buena del mundo.
Al dejar la taza creo hacerla caer, pero no, bueno al menos eso creo.

Salgo  a revisar la casa, es acogedora, se ve que es de alguien con clase, es solo un poco pequeña para una familia, o quizás soy yo que he vivido siempre llena de lujos, odio a los ricos, en especial a mi madre.
Si no tuviera tanta hambre, me hubiera ido al instante, pero después de haber exagerado un poco ayer, creo que me haría bien comer un poco.

Abro la refrigeradora y encuentro de todo, cualquier cosa que les pueda venir a la mente, está adentro de ella.
Me hago un simple sándwich con un vaso de jugo, espero que la persona que me trajo aquí, no regrese hasta que me vaya.
Ni dos minutos después de pensarlo, escucho abrir la puerta, y veo entrar al hombre más guapo del mundo.
Es alto, muy alto, le doy más o menos un metro ochenta, tendrá unos 30 años, pero es malditamente sexy.
Tiene los ojos cafés, el pelo también y...Dios la barba, lo hace ver tan Asshh!

«No es un poco temprano? Pensé que despertarías mucho más tarde» me dice riéndose
«Como llegue hasta aquí? Y que hago con esta camisa que no es mía?» respondo seca
«Ayer estaba tomando unas fotos por la carretera y te vi caminando sola, estabas muy tomada. Te traje a mi casa porqué era lo mínimo que podía hacer por ti, y no te iba a dejar dormir en mi cama con una blusa que tenia un olor insoportable de alcohol»
«Ah gracias, ahora me tengo que ir» digo desinteresada.
«Así como estas? No es que me meta en tus asuntos, pero no tendrías que beber así tanto, tienes solo 21 años» Que? Yo no tengo 21 años, tengo solo 17!
«No me mires con esa cara, pensé que eras menor de edad, y te estaba hasta por llevar a la policia. No me quedo otra opción que ver tus documentos» Oh claro, vió la identificación falsa que uso para entrar a las discotecas.
«Hey! Es mío» Le quitó mi vaso de jugo de la mano, del cual acaba de beber.
«Recuerda que estás en mi casa» sonríe, no sé con cuáles adjetivos describirlo, es un dios
«Nathaniel pero me puedes llamar Nate» me da la mano
«Mia y no cojo manos, lo siento. Ah y no vuelvas a coger mis cosas, ni siquiera pienses en tocarlas.» respondo fastidiada, el cree que soy mayor de edad! Y no le voy a decir que no lo soy, perdería mi reputación! Cual reputación? No lo sé, pero no se lo voy a decir, además no lo volveré a ver más cuando salga de esta casa.
«Está bien, me voy a seguir trabajando en mis fotos, adiós» Es fotógrafo?
Me alzo para pedirle si podía usar un baño, no puedo regresar a casa así, estoy segura que me matarían!
Pero mientras me dirijo a la habitación en la cual dormí escucho un grito.
«MIAAA, QUE MIERDA HICISTE?» Grita, esta...Enojado? Pero que le pasa?
«Nad...» No termino de pronunciar la frase porqué veo que... sí, hice caer la taza de café, como pensé cuando salí de la habitación, y lo peor es que cayó en su computadora.
«Oh dios...» No sé si lo digo por la computadora, o por haberme dado cuenta que está sin camisa. Tiene un cuerpo del hp! Okok tranquila Mía, convéncete que es un gordo panzón y deja de mirarlo!
«Lo siento, no me di cuenta, bueno si. Ósea sentí que la taza se calló, pero no estaba segura, y nunca imaginé que hubiera podido caer en tu computadora...Lo siento, si quieres llamó a mi papá y te doy el dinero para repararla» pronuncio mirando al piso, no era mi intención
«No importa, no necesito de dinero, perdóname por haber gritado.»
«Te quería preguntar si me podías prestar un baño, me tengo que duchar. Y si fueras tan gentil, me podrías decir dónde está la lavadora? Quisiera lavar mi ropa»
«Hay 4 cuartos, elige uno y usa la ducha, la lavadora está en el cuarto al lado de la cocina.»
«Gracias» sonrio.