Dos semanas después.
Hoy es Noviembre 8, son las 13.45. La nieve cae sobre el pavimento, Elías se encuentra en su casa, acaba de despedirse de su esposa Natalie ya que debe ir a trabajar, besa su frente.
Se sube al auto, lo enciende y se dirige hacia su trabajo. Al llegar, encuentra un sobre proveniente de Madrid sobre su escritorio. Emocionado, al saber que es de Talía, lo abre y se encuentra con una carta, desdobla la hoja y la lee lenta y atentamente. Esta dice:
'Elías, quiero contarte que mi padre ha aparecido, no fue en el mejor momento ni de la mejor forma, terminé asesinándolo. Sé que es duro saberlo pero lo es más para mí contarlo.
Él era dueño de una empresa bastante adinerada, descubrieron que yo era la heredera y ahora yo soy la dueña, pero siento que no es suficiente, siento que estoy sola y que mi vida siempre ha sido una mentira.
Quiero agradecerte por haberme recibido en tu hogar y ayudarme en todo lo que necesité. Sé que podré contar contigo en todo momento, y tú conmigo. Eres una de las mejores personas que he conocido y que agradezco que se haya cruzado en mi vida. Espero que tú y tu familia siempre tengan lo mejor, pues se lo merecen.
Para finalizar, debo contarte algo que ha sucedido desde hace muchísimos años y que siempre lamentaré. Elías, el bar donde trabajaba nunca fue verdad, todo el dinero que tenía era robado, Héctor me ayudaba a robar, el robo al banco EBank lo realicé yo. Lamento haberte dado dinero ganado de manera ilegal, pero era algo que debía hacer, pues lo necesitabas.
Espero que puedas perdonarme por lo que va a suceder, siempre te querré, no lo olvides.
Te quiere, Talía.'
Los ojos de Elías derraman lágrimas las cuales caen sobre la carta mojándola. Se sienta en su silla de cuero negra y relee la carta. Luego hunde su rostro entre sus brazos y llora desconsoladamente.
A esa misma hora, en Madrid, en un departamento de la ciudad, se encuentra Ana sentada en el sofá de su departamento, está viendo la correspondencia. Se detiene en un sobre proveniente de la empresa de su mejor amiga Talía. Su rostro se ilumina.
Abre el sobre, este también contiene una carta, la desdobla y se dispone a leer, coloca los pies sobre la mesa café oscuro que tiene frente a ella y se revuelve en el sofá. Esta carta dice:
'Ana, tengo muchas cosas por decirte. Quiero empezar diciéndote que he encontrado a mi padre, ¡a que no adivinas donde! Era el dueño de, ahora, mi empresa, sí, Pablo no se fue a otro lugar y dejó su empresa a mi mando, te mentí y lo lamento. Pablo era el hombre que amaba y mi padre, lo asesine cuando iba a robar su empresa, porque eso es lo que hago, soy una ladrona. Cuando te conocí no te conté por obvias razones, pero creo que ahora es el momento indicado, pues me iré, me alejaré de todo y de todos, pero no quiero hacerlo sin antes decirte la verdad. Robo desde muy joven para lograr sobrevivir.
He mentido a muchas personas y en varias ocasiones, pero en lo que si te seré sincera toda la vida es que te quiero con todo mi corazón y que siempre estarás en él, no importa que suceda quiero que sepas que conocerte fue uno de los mejores regalos que me ha dado la vida. Solo espero que logres perdonarme por lo que haré.
Te quiere tu mejor amiga, Talía.'
Instantáneamente los ojos de Ana comienzan a llorar desesperadamente.
Mientras esto sucede, de nuevo en Portugal, Thiago acaba de entrar a la torre de su antiguo apartamento, hace dos días salió de la cárcel y, por el momento, no ha vuelto a robar. Está buscando trabajo, ha enviado varias solicitudes.
Se acerca a los casilleros donde se guarda el correo, recorre con la vista los números hasta que logra ver el suyo. Tiene correspondencia, lleno de emoción la toma y sube a su apartamento.
Abre la puerta, se quita el abrigo, lo cuelga y va a la cocina. Deja el correo sobre el mesón de la cocina, abre la nevera, se sirve limonada. Toma un sorbo, se sienta sobre una silla blanca que se encuentra junto al mesón.
Levanta los sobres y los coloca sobre el mesón negro después de leerlo. Sus ojos se detienen en un sobre peculiar, según la inscripción viene de Madrid.
Piensa que es de su madre, lo abre lleno de curiosidad, una carta se encuentra dentro, la saca y la abre. Nota que no es de su madre sino de Talía, su rostro se llena de emoción, toma un sorbo de la limonada, lo coloca nuevamente sobre el mesón. Se acomoda y comienza a leerla. Esta dice:
'Thiago, como ya debiste notar, esta carta no es de tu madre. Después del robo debí irme a Madrid, lamento demasiado haberte dejado y no poder hacer nada para ayudarte.
Cuando llegué a Madrid conocí a Ana, mi ahora mejor amiga, y a Pablo, mi jefe y... y mi pareja, lo amé con todo mi corazón, pero lo asesiné en un robo. Él era dueño de una empresa muy prestigiosa, de la cual ahora soy dueña. Pues resuelta que él era mi padre, y lo asesiné, no sé si eso es bueno o malo, lo que sí sé que es muy malo es haberme enamorado de él.
Esta carta la escribí para agradecerte por haberme hecho tan feliz a pesar de lo cretino que eres, siempre te estarás en mi corazón y nunca me arrepentiré de lo que pasamos. Te quise y te quiero mucho. Espero que te vaya muy bien en tu vida y pienses mejor si vas a seguir en 'el negocio de los robos' pues tal vez no es lo mejor.
En fin, quiero finalizar diciendo que siempre te querré y perdóname por lo que haré.
Te quiere, Talía'
Mientras todos leen sus respectivas cartas, Talía se encuentra mirando por la ventana del último piso del edificio de su empresa, el viento hace que su corto cabello se eleve ligeramente. Sobre su escritorio reposan unos tiquetes de avión.
Las lágrimas se apoderan de los cuatro rostros y corren incontrolablemente por las mejillas de los tres lectores y de la escritora de las cartas. Todos dirigen su mirada al reloj más cercano que tienen.
A las 13.52 todos los lectores terminan de leer sus cartas y lloran desconsoladamente.
A las 13.52 Talía por fin decide dar un salto al lugar donde vivirá de ahora en adelante.
A las 14.00 los lectores encienden su televisor al mismo tiempo.
A las 14.03 pasan la noticia de la muerte de una joven que salto del último piso del edificio de su empresa a exactamente las 13.52.
