Encuentros Peligrosos (CAMREN)

Encuentros Peligrosos - cap 44

Capitulo 44

Narra Camila
La semana había pasado muy rápido ya era viernes y se podía notar en el ambiente que algunos se irían a divertir yo la verdad necesitaba descansar antes de pensar en irme de fiesta. Durante la semana no vi a Lauren, no entiendo para que se inscribió a estudiar a una universidad si no se lo toma enserio. No creo que haya dejado de venir por la discusión que tuvimos el otro día en la facultad aunque... aun me acordaba de lo que me dijo tenía ese "te amo" en mi cabeza duran los 5 días de la semana y 24 horas, me estaba volviendo loca.
-Hola – una voz me sacó de mis recuerdos - ¿Cómo estás?
-Vaya tu no te había visto en toda la semana, creo que la gente suele desaparecer durante la semana.
-No es eso, solo no vengo mucho la primera semana.
-Oh ya veo chico popular.
-prefiero que me digas Ed antes de chico.
-¿Cómo estas Ed?
-Bien y tu hermosa.
-Deja el piropo que conmigo no funciona y estoy bien gracias.
-¿Por qué andas tan a la defensiva?
-Estoy buscando a mis amigas en estos momentos Ed.
-Solo quería saber si iras a la fiesta de la facultad esta noche.
-NO sé por eso necesito a mis amigas.
-Acaso ¿no sales sin ellas?
-Cada día que pasa me caer peor ¿sabías? – lo quede mirando y noté a Alexa con Lucy – me voy si voy hoy nos vemos si no, nos vemos el lunes – le di un beso en la mejilla y me fui.
Corrí hacia la salida y le agarre el brazo a Alexa – como están – no paraba de respirar fuertemente.
-¿Por qué estas tan agitada? – pregunto Alexa.
-Venía corriendo.
-Hola – había llegado Mani con Ally - ¿Cómo estas Camila?
-Bien, quería saber primero si saben algo de Lauren.
-¿Te importa? – Todas incluyéndome miramos a Lucy - ¿Por qué me miran así?
-¿Por qué me hablas así?
-Si, estas un poco a la defensiva creo – dijo Mani – no es culpa de Camila.
-¿De que hablan? – estaba algo confusa.
-De nada – Lucy agarro a Alexa y se alejaron y yo salí corriendo detrás de Lucy y agarre su brazo - ¿Qué mierda te pasa?
-¿Qué, QUE ME PASA? – Alcé un poco la voz – no se que le habrá pasado a Lolo pero me importa ¿bueno?
-Creo que me iré con Ally y Mani a buscar a los niños de ahí nos alcanzas.
-Hoy llega Wess, Keaton y Drew – pregunté.
-Si, estaban en pequeños conciertos.
-¿Cómo es que no sepa nada de lo que pasa con nuestro grupo?
-Dejaste hace bastante tiempo ser de este grupo Camila – dijo Lucy y no podía sacarle la mirada de encima.
-Creo que me iré ustedes tienen mucho que hablar – dijo Alexa y se fue.
-Dame una razón para que me vaya y no te vuelta a hablar en toda mi vida Lucy.
-¿Qué esperabas Camila? Que podrías llegar como si nada hubiera pasado y que todo iba a ser como antes ¿Verdad?
-Claramente las cosas no son como antes – mis ojos comenzaron a llenarse de lágrimas – tu... creo que de cualquier persona me esperaba esta reacción pero no de ti.
-Lo siento pero si veo a mi mejor amiga sufriendo como una estúpida y haciéndose mierda la vida por alguien como tu que crees que...
-¿Qué clase de persona soy? – Interrumpí – dímelo ahora que me tienes a la cara.
-No me hagas hablar con rabia Camila.
-Se defenderme Lucy, nunca creí que tendría que defenderme ante la única persona que hacia mis días felices y llenos de risa aparte de Lolo alguna vez pero creo que llegó.
-Eres una persona que no le importa nada que mas que tu ahora, Lauren te dijo que la amabas y tu...
-Y yo le dije que no – la quede mirando – me hace mal persona ser realista con mis sentimientos Lucy.
-No, pero hay formas y formas tu no sabes todo lo que hemos tenido que pasar con Lolo.
-Y tú no sabes cuánto esperes una puta llamada de cualquiera de ustedes cuando mis padres se murieron, un puto mensaje al celular pero nunca obtuve nada. Yo tampoco lo pase bien Lucy pero nunca las entrometí a ustedes en nada. Me hiciste mucha falta cuando paso lo de mis padres – Lucy me estaba mirando directamente a los ojos – extrañaba tus abrazos, tus estúpidas bromas eras como una mejor amiga acá en Miami pero perdí a todas y ahora creo que te termine de perder a ti.
-Camila.
-Creo que mejor me voy.
Me di media vuelta pero Lucy me agarró la mano y me dio vuelta para mirarla tenia sus ojos llenos de lágrimas, sabia que quería pedirme perdón pero no lo haría era igual a Lolo.
-Toma – me hizo abrir mi mano y me dio las llaves de su auto – ve a la casa de la playa de Lolo ahí la encontraras.
-¿Por qué crees que iré?
-Porque necesitas respuesta que nadie te dará mas que ella.
-Ella me debe odiar.
-Te dijo que te ama ¿Cómo se puede odiar y amar a la vez Camz?
-Gracias
-Perdón por la estupidez que te dije.
-Tendrás que hacer meritos para que te perdone.
-Camila quiero preguntarte algo.
-Dime.
-Cuando Louis se murió me acorde mucho de ti – nos quedamos mirando – y quiero saber algo.
-¿Qué cosa?
-Tu te acostaste con Harry ¿verdad?
-Si.
-Según Louis él le pego el sida – creo que se hacia donde quería ir - ¿nunca te hiciste un examen?
-Si me lo hice, me tuve que hacer uno cuando mis padres fallecieron.
-¿Por qué tuviste que hacértelo?
-El accidente les desfiguró la cara a los dos a si que tenia que hacer un examen de ADN y no tenia nada raro... no creas que no lo pensé en hacérmelo antes, me refiero a cuando supe que Harry era gay y también mantenía relaciones con Hombres.
-¿Cómo es posible que no tengas sida si te acostaste con el?
-Lo obligue a que se cuidara, no soy una perra Lucy.
-LO sé, tuviste suerte.
-Lo sé no mas hombres en mi vida.
-¿Ed?
-Es un estúpido Lucy.
-Anda a ver a Lolo y dile que cuente todo.
-¿A que te refieres con todo?
-A porque falto toda la semana.
-Está bien iré de inmediato.
-Cuida Camila y perdón.
-Tú también cuídate, dale mis saludos a los niños y espero verlos el fin de semana y te perdono estúpida.
Nos despedimos y me subí al auto de Lucy en dirección a la casa de la playa de Lolo – no puedo creer que tenga que volver a ese lugar – pensé en voz alta.
Narra Lauren
Había estado lunes y martes hospitalizada todo el día y toda la noche, se me ocurrió mezclar heroína con alcohol y casi me maté. Creo que ha sido una de las cosas mas estúpidas que he hecho, tenia una enorme marca en el brazo por el pinchazo de la aguja de la jeringa y un dolor insoportable de estomago.
Estando en el hospital llame a Lucy y le dije que le dijera a las niñas que estaba bien pero que no quería que Camila se enterara de nada, también le explique que lo hice porque Camila no me amaba y que era la única opción que tenia para olvidarme de una de mis peores vergüenza. Antes que Camila llegara a mi vida estaba acostumbrada a que me rogaran, me suplicaran aunque sea por un beso pero desde que la conocí... todo en mi cambio, estaba como estúpida tras ella, todo lo que hacia era para ella... puedo jurar que vivía para ella. Ahora, ahora era un puto zombie que me estaba echando a perder la vida, sabia que la heroína estaba mal, sabia el daño que le estaba haciendo a mis mas cercanos y especialmente a mi pero aun asi seguía haciéndolo – tenia lágrimas en los ojos – prometí nunca mas volver a esta estúpida casa pero era el único lugar en donde podía estar tranquila, por lo menos mis padres sabían donde estaba.
-¿Qué hace la señorita con los ojos mas lindos de todo Miami acá sola? – mire hacia atrás y era Camila con un vestido largo y suelto, traía sus chalas en la mano – hola.
-¿Qué haces acá? – fue lo único que se me ocurrió.
-Te vine a ver – el viento que corría en esa playa hacia que el pelo de Camila estuviera un poco loco pero se veía hermosa... como siempre – crees que te podrías esconder de mi toda tu vida Jauregui.
-Por lo visto no – me di vuelta y volví a estar sentada mirando hacia el mar y Camila se agacho frente a mi - ¿Por qué viniste Camz?
-Porque discutí con Lucy y creo que fue lo único que se le ocurrió que podía hacer para que la perdonara después de toda la mierda que me dijo.
-Es increíble – mire hacia el suelo – lo único que le pedi era que no te dijera nada y ahora te tengo acá.
-Si quieres me puedo ir, vine en auto.
-No, ya estas acá a si que hagamos que valga la pena – la mire directamente a los ojos - ¿Por qué discutieron?
-Porque me dijo que yo ya no era parte del grupo porque te había hecho sufrir y le hice entender que al igual que tu necesitabas de alguien cuando tu y yo terminamos yo también lo necesite cuadno se murieron mis padres y ella ni siquiera me llamo.
-Perfecto ocupaste tu poder de hacer sentir mal a las personas.
-Es un poder que vale la pena.
-Me quedo claro.
-Y acá estoy esperando que me digas ¿Por qué no fuiste en toda la semana?
-Tengo reposo por toda la semana – la mire a sus ojos chocolates hermoso que tiene – por eso.
-El lunes estabas perfecta ¿Qué te paso?
-Después de hacer el ridículo contigo en la facultad.
-Hey – me interrumpió – no hiciste el ridículo, sácate eso de la cabeza.
-Camila cállate tengo que contarte algo importante.
-Esta bien, prosigue.
-Después de eso me fui a emborrachar a un bar y me junte con un tipo – Camila me miró muy raro cuando dije tipo – que me consigue una droga que vengo consumiendo de hace dos años – la mire nuevamente – desde que terminamos... de hecho la primera vez que la consumí fue al otro día de haber terminado contigo.
-¿Por qué me hablas de esa droga como si te fuera a golpear si supiera que es?
-Es heroína – la mire directamente a los ojos – y el lunes tuve una sobredosis por mezclar con alcohol y bueno...
Antes de terminar la frase Camila me había pegado la 2º cachetada de lo que lleva la semana, me agarre la mejilla y me pelo quedo tapando mi cara.
-Crees que es gracioso ¿verdad? – no quería mirar a Camila, pero podía escuchar que estaba llorando – eres una imbécil, no has aprendido nada en dos años. No todo se soluciona con drogas o alcohol Lolo si me dijeras, si me aseguraras que si me emborrachara hasta no dar mas volvería a tener a mis padres conmigo o a tenerte a ti a mi lado lo haría de inmediato pero las cosas no son tan fáciles en la realidad... por lo visto pasas mas tiempo en tu mundo de fantasías que en este.
-Me has dos veces que no volverías conmigo Camila desde que llegaste a Miami – me saque el pelo de la cara y la mire a los ojos – me has pegado dos cachetas de lo que llevas en Miami, me has recordado dos veces que terminamos hace dos años ¿crees que no lose? – grité – crees que no me duele acordarme todas las putas mañanas de ti, de pasar por ese cuarto de mierda y querer tirarme a tu cama para sentir tu olor... porque Camila aun esta tu puto olor en esa cama – Camila solo me miraba en shock y yo no paraba de llorar – lo único que quiero es olvidarte por un segundo, solo un segundo... cuando entra esa puta droga por mi brazo – le mostré mi brazo que estaba morado por la hemorragia del lunes pasado – es la única solución que encontré para sacarme tu estúpido recuerdo de mi cabeza – me golpee lentamente la cabeza con mis manos – tu no sabes cuánto duele amarte Camila, cuanto duele no tenerte día a día a mi lado, el querer volver el tiempo y detenerlo en el barco de la bahía, tengo todos nuestros recuerdos acá – apunte mi corazón y mi cabeza – han pasado dos años y tengo que controlarme para no comerte la boca de un beso, para no decirte cuanto te amo, para no quedar como imbécil si te digo que extraño tu manera tan cálida que tenias de hacerme el amor o cuando dejabas que me durmiera encima de tu pecho desnudo, bañarnos en la tina y que me dejaras refregarte la espalda, quedarme noches enteras a tu lado cuando te resfriaste por salir corriendo detrás mío ¿te acuerdas?... extraño solo ser nosotras – mire hacia la arena – extraño el nosotras – levante la vista y la cara de Camila estaba inundada por lágrimas y yo no sabia que hacer, solo puse mi cabeza entra mis rodillas y apreté mis piernas con mis brazos y me quedé ahí llorando.
Sentia que Camila también lloraba pero ya no daba mas, mi corazón estaba totalmente despedazado me dolia el brazo, el estomago y ahora el corazón mierda, todo esto es una mierda.
-Creo que tendrías que irte – me pare y quede mirando a Camila hacia abajo y ella levanto la vista para mirame – se hace tarde y es mejor que te vayas.
-¿quieres que me vaya?
-Dejate de ocupar tu psicología inversa conmigo por la mierda – estaba perdiendo el control – como me preguntas si quiero que te quedes Camila quiero que te quedes ¿ok? Quiero que te quedes conmigo a mi lado – Ya no daba mas y caí al suelo y comencé a pegarle al suelo combos con mucha fuerza.
-Para Lauren- Camila trato de sostener mi cuerpo pero no podía – Lolo para, por favor deja de hacerte daño – no paraba de llorar y de maldecirme – PARA LAUREN! – Camz cayó encima mío y me abrazo con todas sus fuerzas y de poco comencé a tranquilizarme, no se si fue el olor a su cabello o el hecho de que tuviera abrazada y acariciándome la cara.
-Para por favor – Camila seguía hablando – deja de hacerte daño bebe – me dijo bebe al oído y creí que estaba en un sueño, porque miles de explosiones explotaron en mi estomago – para de hacerte sufrir – Camila levanto la cara y me quedo mirando – si pudiera cambiar mi vida por la tuya lo haría – nos sentamos de nuevo una frente a la otra, pero esta vez mas cerca y las manos de Camila estaban en los costados de mi cara – No sabes como me duele verte a sí – tenia los ojos cerrados y mi frente pegada a la suya solo quería escuchar su voz – solo deja de hacerte daño Lauren, me muero si te pasa algo.
-No te mueras – abrí los ojos – si tu te mueres yo me mato, no quiero vivir sin ti esta puta vida. Aunque no seamos nada con el solo hecho de tenerte hoy acá soy feliz.
-Lauren...
-No somos pareja y lo entiendo, no somos amigas y creo que nunca podré serlo Camila y perdón por eso – Camila solo me miraba – no te pido que respondas nada, ni que sientas igual que yo, entiendo que me quede en el pasado que no te supere y fue mi culpa por querer volver a tener ese amor bonito que teníamos.
-Te das cuenta que haz hablado mucho ¿verdad?
-necesito sacarme esto de acá – tome las manos de Camila y las envolví con las mias y las acerqué a mi pecho – necesito dejar de amarte.
-Eres la criatura mas hermosa y tierna que he conocido – Camila soltó mis manos y colocó un dedo en mi brazo que estaba morado por lo de la heroína – esta muy feo esto.
-Lo sé.
Camila alzó mi brazo y besó la herida y luego me miro – aun así sigues siendo igual de perfecta, igual de perfecta desde el primer día en que te vi – no dejaba de mirarla estaba preciosa, es preciosa.
-Camila se te esta haciendo tarde, tienes que irte.
-No, no me quiero ir – no sé si tenia sus manos pegadas a las mías aun porque no se había dado cuenta o solo porque quiere tenerlas con ellas – quiero – Camila miró hacia la arena.
Agarre su barbilla e hice que me mirara a los ojos, mis ojos vagaron por todas sus facciones hermosas, lleve uno de mis dedos hacia su cara y saqué un mechon de pelo. Senti como su piel reacciono a mi tacto – hay cosas que no cambiaran nunca creo – la mire a los ojos.
-Creo – Camila no dejaba de mirarme.
-¿Por qué no te quieres ir?
-Porque me quiero quedar contigo.
-Te quedaras solo porque es tarde ¿ok?
-Bueno – me pare y corté el momento de amor porque sabia que no era bueno y le extendí mi mano a Camz – vamos para dentro esta corriendo un viento helado.
Camila me agarro la mano y antes de que pudiera pararse me empujo hacia ella y caímos a la arena - ¿Qué te pasa Camz? – dije con algo de risa.
-Es que necesito, necesito...
-¿Qué necesitas? – puse uno de mis pulgares en sus labios y comencé a acariciarlo entonces Camila sacó su lengua lentamente y rozó mi dedo -¿Qué quieres? – se lo pregunté por ultima vez mirándola a los ojos.
-Que me perdones por dejarte sola, te prometí una vez que no lo iba hacer nunca.
-Nos abandonamos las dos Camila.
-¿Perdón?
-Te perdonaría cualquier cosa.
-Hermosa – me acerqué y bese su mejilla.
-Ven vamos.
Nos levantamos de la arena y subimos hasta la casa de la playa. Cuando íbamos caminando paré en seco.
-¿Qué pasa? – preguntó Camila.
De la nada me acerqué a ella y la pegue contra un muro de piedras que había en la playa y la besé. No aguantaba mas habían sido dos años sin esos labios no paso ni un segundo y Camz me había devuelto el beso, sus brazos subieron hasta mi cara y mis manos se quedaron en sus caderas, nuestras lenguas jugaban como cuando éramos dos niñas que no sabían que hacían y solo se querían pero ahora... ahora era diferente, las dos habíamos cambiado pero aun así nuestros cuerpos se reconocían mutuamente. Terminé el beso y pegue mi frente a la de ella y nuestros labios rozaban – lo siento pero me moría de ganas de comerte la boca – Camila tenia los ojos cerrados.
-Y yo de que lo hicieras – abrimos los ojos al mismo tiempo y sonreímos juntas – entremos – entrelazo sus dedos a los míos y entramos a la casa. Era la mujer mas feliz del mundo en estos momentos y no que ocurra dentro de esa casa pero tendremos que hablar de lo que acaba de pasar. Mierda Camz seguía besando excelente y eso me mataba. Te amo Camila Cabello. Te amo.