¡Kiss Me! ©

1.4 (Noche)

9:30 p.m.

«¡Jolines! En el lío que me he metido» pensaba Amaia sin dejar de besar los labios de su primo.

Aitor, bajó sus manos hasta el culo de Amaia. Cuando ella sintió sus manos en ese lugar, tan discreto para ella, abrió con intensidad sus ojos. Aitor sonrió.

-¿Que pasa? -preguntó Amaia mirando a su primo, el cual sonreía.

-Nada, sólo que mis sueños se han hecho realidad -dijo él susurrando.

Aitor se sentó en el brazo del sofá, a la vez que atraía a Amaia en frente suya, haciendo que esta se juntara a él.

-Pero Aitor. Tu y yo somos primos, no podemos tener nada... Es mejor que olvidemos lo que acaba de pasar -dijo ella alejándose de él.

-¿Quieres que olvide un día tan especial como este? Vamos Amaia, nadie lo sabrá

-¿Y como sabes que nadie lo sabrá? ¿Y si nos ven? ¡Dime!

-Tranquila. Te prometo que nadie lo sabrá, ya que no quiero perder la posibilidad de besar tus labios

Aitor se acercó a Amaia, y la besaba como un animal.

Ya saben a lo que me refiero.

Se veía que Aitor deseaba eso con ansias, y al fin lo logró. Amaia no lo detenía, ya que al probar los labios prohibidos de su primo, sintió ganas de más besos suyos.
Y es que, los besos de Aitor, eran muy "sabrosos" por así decirlo.
Amaia dando besos, era una novata comparándola con Aitor.

-Aitor... Creo que ya no hay que llegar más lejos -dijo Amaia algo nerviosa.

¿Por que nerviosa? Simplemente porque Aitor tumbó en la cama a su prima para besarla con mucha más brutalidad. Pero Amaia dijo "Creo que ya no hay que llegar más lejos" eso lo dijo porque Aitor se subió encima de su prima, y esta se dio cuenta que hasta ese punto, ella no podría llegar.

-¿Por qué no? Quiero hacerte mía -dijo él besando el cuello de Amaia, y dejando a su vez, pequeños chupetones.

-Pero, mi tía puede subir, o quizá Dick...

-No te preocupes, será sólo un rato

-No me quiero arriesgar

-Pero será sólo un momento... ¿Eres virgen primita?

-S..si y tu? Seguro que no

-Te equivocas. No hay mejor forma de perderla... Que con un familiar

-Aitor, no... Eso no ayuda. Yo creo que si hay mejor manera, y esa es que no sea con un familiar

-Sólo un poquito

-No, sólo besame

Aitor quería llegar más lejos que un "simple" beso. Pero si su prima no quería, pues él no podía hacer nada.

-Quiero tener sexo contigo... -susurró Aitor en el oído de Amaia.

Esto que le dijo, hizo que Amaia suspire con algo de ganas de cometer el delito que su primo desea tener.

-No podemos -dijo ella soltando más suspiros.

-Al menos, deja que tengamos sexo con ropa...

-¿Con ropa? ¿Y como es eso?

-Así...

Aitor empezó a moverse, haciendo que al menos, sus partes íntimas sintieran algo de placer.
Amaia soltaba algún que otro gemido.

-¿Te gusta eh? -dijo Aitor sin parar.

-S..si

-Quiero desnudarte...

-No, tengo miedo

Aitor no le insistió, siguió con lo que al menos pudo conseguir.
Cada vez iba más rápido, y eso le gustaba a Amaia. Ella sentía mucho placer, ella no quería parar...

-¡Aitor! -gritó su tía.

-Ai..Aitor -tartamudeó Amaia, muy nerviosa, haciendo que Aitor se quitase encima de ella.

-Tranquila, está asomada a la puerta de abajo. No va a subir

Aitor se asomó por la escalera, y ahí estaba su madre, con el pijama y algo seria.

-Vete ya a dormir -dijo ella.

-Esta bien, mamá. Deja que vaya a buscar mi móvil... -dijo Aitor adentrándose en la habitación de su prima.

-¿Que...que pasó?

-Tranquila, ya se fue... Tu y yo, sigamos hasta que amanezca.
¿Quieres que vaya a buscar un preservativo?

-¿Por qué tienes preservativos?

-Siempre hay que ser precavidos, lo sabes ¿no?

Aitor, sin decir nada más. Bajó sin hacer ruido. Entró a su habitación, y ahí estaba Dick, profundamente dormido. Aitor apagó la luz, y cerró la puerta de las escaleras para que nadie subiera.

Cuando Aitor tenía el preservativo en sus manos, estaba nervioso, pero él sabía que no se arrepentiría de lo que estaba apunto de hacer con su prima.

-Ya lo tengo -dijo Aitor cerrando la puerta de la habitación de Amaia.

Ella estaba acostada, con una mirada muy confusa y a la vez, con miedo.

-Tranquila

-Aitor, no quiero ser borde, pero esto de perder mi virginidad contigo, no es tan normal

-¿Por qué? Ambos lo deseamos

-Si... Pero, somos primos. No me insistas más, por favor

-Esta bien... No te obligare. Entonces, yo ya me voy a dormir

Aitor se acercó a su prima, y le alcanzó a dar un beso.
Amaia no quería dejar de besarlo, se empezaba a volver adicta a los besos de su primo.

Aitor volvió a colocarse y a mover su cuerpo con la de ella, haciendo que los dos vuelvan a entrar en placer.
Aitor empezó a quitarse los pantalones, Amaia no le detuvo, ya que ella se estaba quitando la camisa...

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