Luna de miel

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Me cambie rápidamente y Luis y yo salimos ha tomar un taxi para ir aeropuerto, hicimos 30 minutos de camino y una vez estando hay esperamos al rededor de dos horas para poder subir al avión.
Una ves arriba del avión tomamos nuestro lugar y al tiempo de despegar yo, ya me estaba quedando dormida. Desperté y ya estábamos llegando a nuestro destino, aterrizamos y después bajamos del avión al salir del aeropuerto tomamos un taxi el cual nos llevó a un lujoso hotel. Bajamos del taxi y entramos y Luis empezó a hablar con la recepcionista y pidió la llave de nuestra habitación, la cual ya estaba reservada, subimos al décimo quinto piso y entramos a nuestra habitación la cual tenía una cama con pétalos de rosa, dos burós y una pequeña sala la cual tenía una mesita la cual tenía una botella de vino rosa, dos copas y una charola con frutos rojos. Luis sirvió vino en las copas y brindamos, después de brindar salí al balcón el cual tenía una hermosa vista.

-Ani, amor, te gusta el regalo de Juan.

-Si, es maravilloso.

Luis camino hacia mi y me tomó de la mano para llevarme ala cama, una ves dentro me empezó a besar y bajo el circuito de mi vestido y lo dejó caer, yo estaba nerviosa y no sabía por que, no era la primera vez que estaba con el en la cama. Luis notó mis nervios y empezó a besarme suavemente y me tomó en sus brazos y me levantó para dejarme en la cama, me empezó a besar y fue bajando lentamente a mi cuello, mis senos y mis cintura me quitó el sostén y mis pantis, me dejó completamente desnuda, el se quitó el saco la camisa la corbata y el pantalón junto con el bóxer, me abrió las piernas y se posó encima de mi, su miembro erecto rozaba con mi intimidad y empezó a penetrar lentamente mientras recorría mi cuerpo con sus manos, era tan delicado y me trataba con tantos amor después de unos minutos me acomodo boca abajo y empezó a penetrar lentamente y poco a poco fue aumentando la velocidad haciéndome gemir una y otra ves, mientras me penetraba besaba mi espalda y acariciaba mi trasero después de unos minutos se vacío dentro de mi, después nos quedamos dormidos y al despertar nos metimos a bañar y nos vestimos para salir de paseó después de todo era nuestra luna de miel.

Visitamos varios museos, restaurantes y algunos antros, después de una semana regresamos a casa a nuestra nueva casa.

Pasaron dos años y Juan murió, Luz, estaba embarazada y no quería a su bebé. Luis y yo no podíamos tener hijos, pues yo, no era fértil, hablamos con Luz y ella nos lo quiso dar en adopción, cuando nació el niño, decidimos ponerle Juan, como su padre biológico. Después de que Luz nos entregó al niño ella desapareció, y tres años más tarde ella había muerto, le hicimos unas pruebas a Juan para descartar la posibilidad de que tuviera la misma enfermedad por la que Luz murió, y no, el no estaba infectado, lo cual nos hizo muy felices a Luis y a mi, el niño fue creciendo sano, fuerte y muy guapo.

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