Solo amigos

Primer encuentro

Cuenta Ani

-Sabes Luis, me pareces muy guapo y atractivo, realmente me atraes, no hay noche o día que no piense en ti y en tenerte.

-Ani, tu también me atraes mucho y te deseo pero, eres la prima de me mejor amigo y no quisiera ser irrespetuoso contigo.

-Luis, soy mayor de edad y puedo tomar mis decisiones y una de ellas es esta.

Dicho esto, lo comencé a besar mientras le quitaba la camisa y desabrochaba su pantalón dejándolo en puro bóxer, lo aventé a la cama y me quite el vestido, quedándome en interiores.

Me acosté en la cama junto a Luis y nos empezamos a besar apasionada mente, Luis me tomo de la cintura y me acomodo arriba de el, me beso el cuello mientras acariciaba mi trasero, de pronto me bajo de el y me acomodo en la cama me quitó los tacones y empezó a besar mis piernas subiendo lentamente hasta llegar a mis senos, me quitó el sujetador y mi trusa, me levante y lo empuje a la cama.

Por dios que cuerpo que...que rico se ve empecé a besarlo en los labios y poco a poco fui bajando a su cuello, su pecho, su cintura y su cadera en la cual le di un pequeño mordisco lo cual lo hizo gemir de placer

-humm...bebé.

-No digas nada y disfruta.

Seguí besándolo y le quite el bóxer con los dientes, dejándolo completamente desnudo. Seguí besándole la cadera y el vientre hasta llegar a su miembro ya erecto, y en pese a chupar...mmm, que delicia de hombre.

El empezó a acariciar mi cabello mientras gemía y pedía mas. Después de unos minutos, me acosté con el y me empezó a besar lleno de pasión mientras acariciaba mis senos, los beso, y chupo, los lamió y mordió haciéndome gemir de placer.

-mmm...Ho papi...
-Si princesa
-Te quiero tener dentro.
-Tranquila nena, no hay prisa.

Empezó a besar mis labios nuevamente mientras con su mano acariciaba mi intimidad.

-Princesa, estas bien mojadita, como me gusta.

Y sin más empezó a penetrar

-mmm...ho...así,así ,papi sigue...ho si que delicia.

-Así, nena, te gusta.

Me siguió embistiendo unos minutos más y después me subió en el y empecé a mover mis caderas, provocando un placer indescriptible para ambos. Mientras yo me movía arriba de el, el acariciaba con una mano mis pechos y con otra mi trasero. Y después de unos minutos llegamos al clímax, los dos al mismo tiempo. Terminado el acto sexual empecé a hablar mientras me bestia nuevamente.

-Ho Luis, que rico coges.
-De verdad te gusto princesa.
-Si, sólo que, necesitamos dejar las cosas claras.