Capítulo 45: Sea

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Capitulo 46: Sea

-Zayn
No, no, no, no y más. Negué con la cabeza y tomé la silla que estaba allí. La arrojé con fuerza hacia un costado, haciendo que todas las cosas que estaban sobre aquel escritorio cayeran al suelo. Ella se acercó a mí y me tomó del rostro.
-¡Cálmate! -me exigió.
-¡¿Cómo quieres que me calme, maldita sea?! -pregunté histérico -¡Esa... esa loca tiene a mi hijo!
-¡No ganaras nada perdiendo el control, Zayn!
La miré fijo a los ojos. Se veía preocupada, en su mirada Miel había preocupación. Desde que habíamos encontrado a Miranda en el departamento de TN_________ tirada en el suelo, golpeada y casi inconsciente, mi mundo se había venido abajo. Todos mis esfuerzos por mantener a salvo a Chris y TN_________, se habían ido a la mierda.
Janis había logrado lo que quería... llegar al niño. ¿Cómo pude haber sido tan idiota? ¿Cómo? Jamás tuve que haberlo dejado. Todo es mi culpa, todo.
-Por favor, Sea -le rogué -Necesito que me ayudes a encontrarlo...
Ella semisonrio y acarició mi mejilla.
-Jamás voy a dejarte de lado y solo. Voy a mover el cielo y la tierra si es necesario para encontrar a ese niño. Te lo prometo.
La abracé con algo de fuerza. Saber que ella iba a ayudarme me calmaba bastante. Escuchamos que alguien entraba. Levanté la cabeza y TN_________ estaba allí.
Sea se giró a verla y se alejó de mí. Caminó hacia la puerta, y se paró al lado de la morena.
-Voy a seguir buscando... creo que sé en donde lo puede tener -le dijo. TN_________ solo asintió sin dejar de mirarme. Sea desapareció de allí.
Estábamos en el cuartel. Todo el mundo había sido avisado y estaban haciendo hasta lo imposible por encontrar a Janis.
Ella seguía en silencio... y yo me sentía extraño. Quería abrazarla pero a la vez sabía que ella no lo aceptaría.
-Quiero de nuevo a mi hijo -me dijo.
-También yo...
-¿Y por eso abrazas a otras? -su voz tembló.
Entonces me acerqué a ella, dio un paso hacia atrás. Pero la tomé del brazo y la jalé hacia mi cuerpo. Escondió su rostro en mi pecho y se echó a llorar. Acaricié su espalda y besé su cabeza. Soy un maldito imbécil. En vez de acercarme a ella, intenté alejarme, creyendo que me estaba odiando por haber dejado que se llevaran a nuestro hijo.
-Te juro que lo voy a encontrar, TN_________.
-Debe estar asustado, Zayn...
-No... te aseguro que debe estar haciéndole bromas a Janis. Él sabe que vamos a ir por él. Lo presiente.
-Si le hace algo, me muero...
La alejé para que me mirara a los ojos. Con mis dedos acaricié sus mejillas y sequé sus lágrimas.
-No le va a hacer nada... porque lo que ella quiere soy yo. Y cuando sepa en donde lo tiene, voy a ir para cambiar los lugares.
-No -musitó exaltada.
-Shhh, tranquila -la calmé -Solo será hasta que tenga todo bajo control. Luego, voy a deshacerme de ella.
Sterling entró a la oficina. Ambos nos giramos a verlo.
-Tenemos las coordenadas... están en la estatua de la libertad.
-¿Qué? -pregunté sorprendido.
-Al parece Janis ha estado llevando al niño de excursión por toda la cuidad. Verdaderamente esa mujer está totalmente loca.
-Voy a ir para allá -dije.
-¡Yo voy contigo! -exclamó ella.
-No, no... tú te quedas aquí.
-¡No puedes pedirme que me quede, maldita sea! -me gritó. Las lágrimas volvieron a resbalar por su mejilla -Tiene a mi hijo.
-No quiero arriesgarte, TN_________.
-Esa es mi decisión, Zayn. Tómala o déjala.
La miré fijo a los ojos, tratando de intimidarla. Pero... demonios, ¿Cómo iba a intimidarla si ella es la que me intimida a mí? Solté un suspiro.
-Está bien... pero vas a hacer todo lo que yo te diga, ¿te quedó claro?
-Si -asintió efusivamente.
Nos dirigimos hacia donde supuestamente estaban Chris. Mi corazón latía angustiado. Algo me decía que no tenía que tener a TN_________ conmigo en este momento. Pero ella es tan... tan terca.
Llegamos. Di la orden de que no prendieran las sirenas. Así Janis no tendría tiempo de reaccionar y escapar hacia otro lado.
-TN_________, vas a quedarte aquí en el auto...
-No, Zayn...
-¡Dijiste que ibas a hacer lo que yo te dijera!
-¡Maldita sea, eres... te odio! -chilló. Tomé su rostro.
-No, tu no me odias... me amas.
Sus ojos se llenaron de lágrimas.
-Por favor... ten cuidado. Y si, yo te amo.
Sonreí levemente y besé sus labios.
-Yo te amo más.
Me bajé del auto y miré una vez más a TN_________.
-Por favor... vuelve pronto.
-En dos minutos me tendrás de nuevo. Y está vez será para siempre.
Sonrió y me fui de allí. Para poder ser feliz, solo necesitaba terminar con la basura que había en nuestro camino. Y así todo sería perfecto.

Lo vi alejarse a través de la ventana. ¿Haré bien en quedarme aquí? No sé, no lo sé... sacudí la cabeza. Todo había pasado tan rápido. El pobre de Richard ni siquiera había podido ver a mi bebé. Me sequé las lágrimas. Zayn iba a traerlo de nuevo.
Mi celular comenzó a sonar. Lo tomé rápidamente.
-¿Hola? -dije algo exaltada.
-Mami... -murmuró él.
-Mi amor, hijo... ¿estás bien? -pregunté preocupada.
-Mami... una mujer, algo loca, me fue a buscar a casa -su voz tembló -Le pegó a la tía Miranda y me llevó. Ha estado llevándome de aquí para allá.
-¿Te hizo algo? -quise saber.
-No, no me ha hecho nada -habló en voz aun más baja -Ahora te estoy hablando desde su celular. Se lo saqué sin que se diera cuenta...
-Zayn te está yendo a buscar.
-¿De verdad? -preguntó emocionado.
-Si, mi vida -sonreí -Tu padre va a sacarte de las manos de esa loca.
-¿Qué haces, niño? -escuché que ella decía. Me tensé -Dame eso acá... ¿Quién habla?
-¡Devuélveme a mi hijo, maldita zorra!
-Ooooh, pero mira a quien has llamado... bonito -le dijo a Chris -A tu linda madre.
-Déjalo en paz, infeliz.
-Deberías saber, querida, que no debes hacer enojar a un secuestrador... podría mandarte un dedo de tu hijo.
Mi corazón se aceleró.
-¡Le tocas un pelo... y voy a acabar con tu miserable vida! -le grité.
-¡Janis! -alguien le gritó -¡Están aquí!
-Oh, maldita sea -gruñó ella -Es hora de hacer explotar a algunos agentes. Adiós, querida, que tengas una linda tarde...
Me colgó. Miré sorprendida mi celular. No, yo no me podía quedar quieta mientras esa loca tenía a mi bebé y era capaz de hacerle algo a Zayn.
-Sterling -le dije. Él estaba concentrado con los auriculares, indicándole a los demás agente por donde tenían que ingresar. Se giró a verme -Dame un arma...
-¿Estás loca? -me preguntó.
-Dame un arma o no respondo de mí.
Me miró inseguro.
-Zayn va a matarme si te dejo salir de aquí.
-Yo misma voy a matarte si no haces lo que te digo.
Al instante buscó algo debajo de uno de los asientos. Sacó la pequeña pistola y me la dio. La tomé con cuidado, con algo de duda. Y de repente me sentí como cuando tenía 17. Me sentí conectada con aquella arma. Esa era yo.
Salí del auto y corrí hacia la entrada de la estatua de la libertad. Era algo raro que no hubiera movimiento por aquella zona. O eso creo.
Ingresé... todo estaba en un escalofriante silencio. Y de repente el sonido de una explosión llegó a mis oídos.
-Zayn -murmuré. Y comencé a correr hacia el lugar de donde había provenido el sonido. No podía estar pasando esto, no... Mi corazón latía angustiado, agitado.
Llegué hacia un lugar que estaba lleno de humo. Sin dudarlo entré... me tape la boca al ver varios cuerpos tirados en el suelo. El de Zayn podía estar por allí. Nononono y más no, dios mío no permitas que Zayn este aquí. Comencé a toser. El humo era cada vez más intenso. Otra explosión llegó a mis oídos, y también el sonido de varios disparos.
Dirigí mis pasos hacia allí. Zayn tenía que estar en ese lugar... cerré los ojos y rogué, rogué porque así fuera. Choqué con alguien. Él se giró a verme.
-¡Zayn! -exclamé y al instante lo abracé. Él me apretó con fuerza.
-¡Maldita sea! -gruñó contra mi pelo -¡Te dije que te quedaras en el auto!
-¡Me llamó! ¡Chris me llamó! -chillé. Él me hizo mirarlo a la cara -¡Está asustado, Zayn! ¡Y esa loca me amenazó con mandarme uno de sus dedos!
-Shhh, tranquila -me calmó. Más disparos llegaron a nuestros oídos -Nada va a hacerle.
-Esto me recuerda tanto a aquel día en el muelle, Zayn.
-Si, a mi también. Pero está vez no voy a perderte...
-No -negué en un susurro. Junto nuestras frentes y nos quedamos así por unos cuantos segundos. Luego se alejó -Vamos, debemos seguir. Al parecer Janis está en el último piso. Creo que me está esperando.
Asentí y empezamos a correr de la mano. Los disparos eran cada vez más seguidos. Y de repente nos encontramos en medio de un tiroteo.
-¡Abajo! -gritó él. Ahogué un gritito y nos tiramos al suelo. Zayn cubrió mi cuerpo con el suyo y comenzó a arrastrarnos hacia una puerta -¡Diablos, diablos... TN_________! Dime que estás bien...
-Estoy bien -dije agitada. Llegamos hacia la puerta. Zayn se incorporó y se sentó contra la pared. Me sentó sobre él. Acarició mi rostro.
-No estás herida, ¿verdad? -preguntó y comenzó a revisarme. Sonreí levemente.
-No, amor, no estoy herida.
Él me abrazó.
-Cásate conmigo, TN_________-

N.E.M.C. 2° TemporadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora