Capítulo 49: Codelincuente

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Hoseok apretó la frente contra el frío cristal, al mismo tiempo que su mano se acurrucó fuertemente en un puño contra éste. Tenía su otra mano escondida profundamente en el bolsillo de su pantalón por ninguna otra razón más que para evitar que esté temblando visiblemente.



- ¿Seguro que quieres ver esto? -le preguntó Jimin en voz tan baja mientras colocaba una mano sobre el hombro de Hoseok, a lo cual éste se encogió fuera de su alcance tan rápido como había llegado hasta ahí.



-No voy a dejarlo morir solo -escupió, luchando por contener las lágrimas cuando sus ojos se encontraron con los de Taehyung a través del cristal. Taehyung le sonrió suavemente, como si dijera: "está bien" y eso era tan malo. Era él quien debería estar dándole consuelo a Taehyung. No dejó que sus ojos se desviaran a cualquiera de los equipos médicos o al monitor de frecuencia cardiaca ni a nada en absoluto, tenía que seguir estando un tanto tranquilo y mirar hacia esas cosas sólo causaba que su pánico fuera peor. Taehyung estaba atado a una camilla, con las manos y las piernas aseguradas firmemente y había un cinturón gigante alrededor de su cintura que mantenía todo su cuerpo inmóvil. Tenía una vía intravenosa en cada brazo. Hoseok apretó los dientes tan fuerte como pudo, mirando a otro lado, y se tragó el bulto doloroso que cargaba en la garganta.



Sus ojos se posaron en el paramédico, médico o lo que demonios fuera, que estaba en el lado izquierdo de la sala preparando la primera aguja... la que iba a dejar a Taehyung inconsciente. Hoseok no podía mirarlo con buena cara así que volvió a encontrarse con los ojos de Taehyung en su lugar. A diferencia de Hoseok, Taehyung no había apartado la mirada de él ni una vez desde que había llegado, sus intensos ojos se habían quedado en Hoseok todo el tiempo, casi sin pestañear.



El paramédico se acercó y limpió el interior del codo de Taehyung con una bola de algodón y fue entonces cuando Taehyung levantó su mano derecha lo más que pudo con las cintas ajustadas sobre él, y Hoseok poso su mirada en lo que se suponía era una onda.



Adiós.



Hoseok sintió como si le hubieran dado un puñetazo en pleno estómago. El puño que había presionado contra el cristal se abrió hasta que se hundió contra la superficie fría y se imaginó que estaba uniendo su palma con la de Taehyung. Por el rabillo del ojo, Hoseok vio como Jimin se apartó para tratar de secar sus ojos.



Por encima de todo lo demás, el día había comenzado ridículamente temprano, como un adicional "vete a la mierda". Hoseok había venido aquí a las seis y media de la mañana para una reunión informativa de lo que iba a pasar y luego se había quedado a tomar un café y galletas. Hoseok había escuchado a la gente (los demás testigos, los de al azar, las personas que sólo se habían ofrecido para el bien de su propia curiosidad), hablar de esto como si no fuera gran cosa, como si fuera sólo otro criminal que se merecía la muerte. Jimin y Joon habían discutido por sus armas y se rieron de cuando una vez Jimin olvidó cargar su arma antes de salir en una redada de drogas-. ¿Recordaste mantener la tuya cargada, Hoseok? -le preguntó Joon, riendo-. No querrás que te disparen sólo porque eres un cabeza hueca.-



Hoseok, que no estaba de humor para bromas, había estado a punto de tirar golpes durante toda la mañana. Para detenerse a sí mismo de explotar, tuvo que distraerse con las galletas y el café.



Y ahora él estaba observando la primera aguja apunto de atravesar la piel de Taehyung.



-A la mierda con esto -dijo Hoseok en voz alta y se apartó del vidrio. Pasó a Jimin, Anne, Jin y a todos los demás, y se dirigió hacia la puerta que conducía a la habitación del otro lado de la ventana.



[ VHope ] El Primer CambioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora