Diez

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Sospechas

[NARRADOR]

Stiles había salido del hospital una semana atrás y había vuelto a vivir con su padre, le realizaron unos segundos análisis y los doctores se quedaron estupefactos al ver que el tumor que Stiles tenía había desaparecido sin dejar rastro, ni siquiera encontraban células cancerígenas en su sangre. Pero el chico no estaba bien, todos a su alrededor podían asegurar eso, últimamente el de cabello castaño lucía unas horribles ojeras debajo de sus ojos, además de que últimamente casi no hablaba con ningún miembro de la manada.

Por su parte, Stiles intentaba mantenerse alejado de todos sus amigos lo mas posible, aunque desde que buscaban a aquella criatura llamada Nogitsune no le prestaban mucha atención al humano hiperactivo. Cosa que el de ojos color miel agradecía, porque desde que no dormía bien estaba de muy mal humor, por lo que evitaba hablar incluso con su padre para no tratarlo mal o comenzar una pelea que acabaría con alguno de ellos yéndose de la casa.

- ¿Hiciste la tarea de matemáticas? -Malia se sentó junto a él en la clase, a ella no la evitaba.

- Si, tuve tiempo para hacerlo anoche.

- ¿Las pesadillas de nuevo? -Stiles solo asintió y la chica soltó un suspiro.- ¿Qué fue esta vez?

- Siempre es lo mismo, un hombre con vendajes en la cara, solo puedo ver su boca y de verdad es horrible, tiene dientes puntiagudos y su voz es realmente aterradora. No se como hacer para que me deje en paz.

- Díselo, después de todo es tu sueño, dile que te deje en paz.

- ¿Como sabes que lo hará? -La chica se encogió de hombros.- Que respuesta mas buena y convincente -Volvió a hablar Stiles con obvio sarcasmo.

Dejaron de hablar porque Harris los regañó, aunque ambos rieron al ver el seño fruncido que ponía el profesor al verlos, sobre todo a Stiles. La chica coyote solía decir que Harris estaba enamorado del castaño secretamente y por eso lo trataba tan mal.

- Algunas personas son agresivas con las personas a las que aman -Luego de decir eso la chica coyote le guiñó un ojo.

Ella sentía cierta atracción por Stiles, pero sabía que este estaba interesado en cierto lobo gruñón con unos enormes ojos verdes y unas cejas pobladas, también sabía algo acerca de Derek, el secreto que él mas guardaba. Pero había prometido no decir nada a nadie, aunque mas bien su primo la había amenazado con arrancarle el corazón con sus propias manos si no se quedaba callada, e iba a cumplir su promesa por el bien de su propia y hermosa existencia.

El resto de las clases transcurrieron normales y Stiles salió de la escuela con el humor un poco mas alto, aunque este se esfumó al ver a Derek en la entrada.

- "De seguro espera a Cora" -Pensó el de ojos color miel mientras pasaba del mayor y caminaba a su Jeep.

Cuando estaba a punto de llegar a su hermoso vehículo el mayor lo cogió por el brazo y lo hizo voltear, Stiles estaba mas preocupado por las personas a su alrededor que se detenían a mirarlos y murmuraban que por el seño fruncido que le dedicaba Derek. Al ver que el de cabello castaño no le prestaba atención el Hombre lobo lo arrastró hasta el Camaro y lo hizo subir para luego cerrar la puerta y subirse al asiento del conductor, el Camaro salió del estacionamiento de la escuela.

- ¿Me puedes decir qué demonios te pasa? -Preguntó Stiles algo harto ya de la actitud del contrario.

El de cabello negro lo miro con sus ojos brillando de un color azul eléctrico y luego gruñó, el ojimiel soltó todo el aire de sus pulmones y desvió la mirada. Esos ojos le traían malos recuerdos de su niñez que prefería olvidar.

Ultima Oportunidad #SterekAwardsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora