Sentí una presión en el pecho.
Pero no iba a llorar.
Aprendí a no llorar, cuando tienes tantas desiluciones no tienes otra opción.
Aún observando como ambos sonreían, no podía evitar pensar en que nunca iba a terminar así con alguien.
Porque ser puta no es fácil
Y las putas no tenemos finales felices.
Caminé nuevamente hacia mi casa.
Al llegar me puse a leer y a escuchar música, ésta es una faceta que nadie conoce de las putas, no pasamos todo el día pensando en cómo nos vemos.
***
No se cuando ni cómo me quede dormida, sólo sé que es domingo y son las 6 a.m
Me vestí con ropa deportiva y no, no salí a correr. Me coloqué mis patines y salí.
Comenzé a patinar sintiendo el viento en mi cabello, me coloqué esos pequeños aparatitos que te transportan al mundo de la música y continué con mi tour por la ciudad.
Patiné y patiné, hasta que vi a la persona causante de todos mis problemas.
Ahí estaba Dante.
Y no acompañado de cualquier persona.
Ustedes pensarán...
Una chica??
Pues la respuesta es no.
Dante estaba con nada más y nada menos que Matt.
Confundida, me acerqué patinando hasta pasar junto a ellos, y escuché una pequeña fracción de conversación que me dejó desconcertada.
-Estás seguro de que los vió?
-Muy seguro, salió de la heladería con el rostro desfigurado.
-Entonces tu trabajo está hecho Jake- esperen, Jake? Matt se llama Jake?
-Y mi dinero?
-Ten, está justo. Espero que eso no te cause problemas con tu pequeña novia.
-No metas a Jamie en esto.
Vaya, Matt o Jake o quien sea que fuese me las pagaría, al igual que Dante.
Al verlos irse cada uno por su cuenta, seguí el auto de Dante llendo a toda velocidad en mis patines.
Lo estacionó fuera de un departamento, y al verlo adentrarse en él, tomé un gran bastón de hierro que encontré por allí, y comenzé a descargarme con su lujoso Audi.
Al terminar mi obra maestra, tomé mi labial rojo y escribí en el vidrio: Esto es solo una parte de mi venganza, ya me extrañabas? A.
Volví a casa pensando en la venganza para quien fuera que fuese ese estúpido.
Matt, Jake o Pedrito, me las vas a pagar.
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Ser Una Puta Tampoco Es Fácil
Teen FictionMi nombre es Ashley, soy una chica normal como cualquier chica de 14 años, esta historia demuestra como unos pocos errores te pueden catalogar como puta... eternamente. Cuando uno comienza, ya no hay vuelta atrás. *** No se permiten copias. En caso...