la seducción de Elisa

Capitulo 11

Al terminar de vestirse con una camisa azul celeste, unos vaqueros negro y unas zapatillas negras, Sebastián salió en busca de Elisa y la encontró con su camisa puesta más hermosa que nunca preparando el desayuno, que sensación mas cálida le generaba verla hacer eso, no pudo evitar pensar en lo intenso que era lo que tenían y en lo posesiva que era, se quedo en el umbral mirándola, era cegadora, simplemente la mujer más hermosa y pasional que había conocido, con el esos vacios ojos adquirían algo de calidez.

De pronto sus miradas se encontraron y ella sonriendo le dijo – ven vamos a desayunar – él se acerco la beso intensamente de nuevo, era como si no pudiera mantener las manos lejos de ella, se sentaron a desayunar, ella sobre sus piernas y el dándole el desayuno entre beso y beso, al terminar Elisa se vistió y se fueron juntos.

la llevo hasta su apartamento y se dirigió al trabajo sin sacársela de la cabeza, su actitud de no puedo darte promesas de amor y luego de tu eres mío, era una contradicción andante, no sabía nada de ella, quería descubrir porque su absurdo miedo al compromiso y se propuso hacerlo.

Los días pasaron tranquilos, Elisa continuo con los ensayos y presentaciones , estaba preparando "la dama de las camelias" y su popularidad aumentaba, Sebastián por otro lado pasaba de un reportaje a otro y eso le encanta, casi siempre almorzaban juntos y todos los días amanecían abrazados, si Elisa tenia presentación el iba a verla y después en el camerino le demostraba cuanto lo excitaba verla en el escenario.

normalmente se quedaban en el apartamento de Elisa y Sebastián había empezado a dejar algunas cosas, eso a Elisa no le molestaba en absoluto, Hacían el amor como posesos, nunca se cansaban, las charlas calientes continuaron y los celos disminuyeron.

Dos semanas después, al terminar de ensayar el jueves Johana se acerco a ella y le pregunto –Eli ¿Por qué me tienes tan olvidada? – Esta le sonrió a su amiga y contesto – que dices si la que desapareció fuiste tú cachonda, ¿Por qué no comemos algo en el restaurante de en frente y hablamos? – Johana con su energía arrollado contesto de inmediato que si y salieron al restaurante – al llegar al pequeño sitio se sentaron y pidieron la carta, era un pequeño restaurante italiano así que pidieron el plato del día que era Risotto. Minutos después noto que Johana la observaba con su miradita de "te tengo pillada", así que le pregunto divertida - ¿Qué? – la morena contesto con cara de picara – no te hagas la boba Eli, ¿Quién es el Dios griego con quien ahora vive? – Elisa casi se atraganto con el agua que bebía y de inmediato pregunto -¿queee?, yo no vivo con nadie ¿de dónde sacas eso? – Johana la miro incrédula y le soltó de sopetón – lo vi, al hombre ese con el que te fuiste la noche que estuvimos en éxtasis, hace unos días fui a buscarte y el estaba en tu casa en pijama, le dije que no te contara que había ido, ¿desde cuándo dejas que alguien se quede? – Elisa levanto una ceja y contesto – primero, no vive conmigo a veces se queda y segundo dejaba quedar a Brandon de vez en cuando – Johana arremedo el gesto de Elisa y dijo – pequeña mentirosa se que dejabas quedar a Brandon pero no ha a desayunar, soy su amiga también y se cosas de ustedes, así que desembucha ¿Qué significa ese hombre para ti? – esta se ruborizo, que podía contestar pensó, Sebastián significaba tanto y a la vez nada o eso se decía, así que dudosa contesto – Algo similar a mi relación con Brandon, solo que Sebastián es.. no se me gusta mucho y me gusta que se quede – Johana pensó un momento y al final dijo – creo que te estás enamorando, mira que estas radiante – Elisa no pudo más que reírse de semejante absurdez, pero Johana permanecía seria así que sacudiendo la cabeza contesto – estás loca, yo no me enamoro y lo que siento por él no es más que lujuria, veras que pronto me aburrirá – Johana la miro sin creer nada de lo que decía y pregunto – y en un mes que creo llevan viéndose ¿Cuántas veces se ha quedado en tu casa? – Elisa puso los ojos en blanco y contesto – mira que eres pesadita, pues se queda casi siempre pero es que es un Dios en la cama – su amiga levanto una ceja y divertida soltó – no esperaba menos de un hombre que esta así de bueno, ayy amiga te veré colgadita de él, dentro de poco empezara a dejar ropa y cosas por el estilo en tu casa y cuando eso pase significa que no hay vuelta atrás, dejo de ser tu amante y ahora es tu novio – Elisa trato de reírse pero miles de dudas se instalaron sobre ella, se pregunto si realmente estaba dejando ir las cosas demasiado lejos y si debía detener aquello. En ese momento el camarero trajo la comida y ambas guardaron silencio mientras comían, al terminar Johana dijo como leyéndole la mente - ¿y si le das una oportunidad a lo que sientes Eli? – Está un poco cabreada contesto – yo no puedo depender de nada o nadie que no sea yo misma y no tengo más sentimientos hacia ese hombre que lujuria y pasión – Johana asintiendo le dijo para cerrar el tema – si no puedes hacerle frente a esos sentimientos no dejes que avancen mas-.