Tú por nada del mundo te das cuenta
del gran amor que en mis entrañas arde.
Y yo no sé decir otra palabra
que no sea tu nombre, soy cobarde.
Tú me miras sin ver que en mis pupilas
se refleja la imagen de tu rostro.
Y yo en cambio, te miro con ternura,
porque no sé mirarte de otro modo.
Tu voz llega a mi ser y en él se queda.
Cada palabra tuya la recojo.
Y si te hablo yo, tú ni me escuchas,
ni te enteras que sueño con tus ojos.
Pero cerca está el día en que, sin prisa
la pasión será un leño de tu hoguera...
y buscarás mi sombra, mis cenizas,
pudiendo haber tenido mi alma entera.
Yo seré como el ave, que a su nido
regresa con la nueva primavera.
Y te estaré esperando porque quiero
escribir en tus labios mi poema.
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Prohibido olvidarte
PoesiaSiempre hay alguien que cruza por nuestra vida, la llena de magia y entusiasmo y luego desaparece. Así, sin más... sin dar explicaciones. Amores, que por ser tan profundos, no se olvidan... ¿Les sucedió alguna vez? Este libro fue escrito entre lág...