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Aunque estuviera tan románticon en mis pensamientos, mi cuerpo me estaba pidiendo algo...tocarla, mi mano paso a su abdomen pude ver como ella sonrió, pero eso no era suficiente...quería besarla y no solo en sus labios...satisfacer mi deseo de tenerla, sentir su olor tan cerca no ayudaba mucho a controlar lo que estaba a punto de hacer, empecé a darle besos en su hombro, la acerque a mi completamente para luego comenzar a subir mi mano con la intención de llegar a uno de sus pechos, pero ella me detuvo poniendo su mano encima.
-Ni creas que no me doy cuenta que querías coger uno de mis pequeños pechos-ella sentenció y yo me reí.
-¿Pequeños?-dije acariciando sus dedos y haciéndome el que no sabia que así era-no te creo, demuéstramelo-anuncie con un tono picaron mientras ella reía y bajaba mi mano a su abdomen de nuevo.
-Te tocara confiar en mi palabra-dijo y yo negaba con la cabeza-si son pequeños-dijo como avergonzada pero a la vez muy orgullosa del cuerpo que tenía.
-Tal vez-pase mi mano por debajo de su camisa y sentí como se erizo, me encantaba-pero eso no me quita las ganas de querer tocarlos-susurre mientras subía mi mano pero ella de nuevo la detuvo antes de llegar a mi objetivo.
-Déjamelos quietos-dijo sacando mi mano de su camisa, yo la hice girar para quedar frente a frente.
-Dicen que con buena estimulación crecen-le dije mientras sostenía su mentón, pero ella no sonrió como yo imagine que iba a hacer.
-¿Acaso tu estas inconforme con su tamaño?-me dijo un poco enojada, diablos la regué, ¿qué hago? ¿Que digo? La verdad siempre me han atraído mas las piernas y glúteos, ella tiene esa parte perfecta, pero no puedo argumentarle con eso, podía enojarse aun mas.
-¿lo estás tú?-dije titubeante, apoyaría lo que ella dijera.
-Eso no responde lo que te pregunte-dijo porque no iba a cooperar en mi estrategia.
-Así están bien-dije y no me pude sentir mas estúpido, ¿cómo le iba a decir eso? Como si ella tuviera que acomodarse a lo que yo quisiera, como si ella necesitará una aprobación mía para ser mas hermosa de lo que ya es, eso solo confirmaba lo que dijo maite era cierto: nunca he estado con una mujer que en verdad me importe. Ella se separó un poco de mi-puede que los demás opinen algo diferente, pero para mi son más que suficientes-dije porque la verdad no quería discutir con ella, menos que se sintiera mal, pero de nuevo me equivoque.
-Nunca dude que así lo fuera-dijo muy segura, no se sentía mal por eso-solo que pensé que no fuera a importarte-dijo y me sentí de nuevo culpable.
-No lo hace...o sea si...pero...pero no que sean pequeños-dije y ella levanto una ceja, yo estaba empezándome a desesperarme, mi boca y mi cerebro parecían haberse desconectado-mira-le tome su rostro en mis manos-si son pequeños, grandes, medianos, desuniformes o inexistentes, me gustarían...porque son tuyos-dije con los ojos cerrados y sintiéndome lo mas enamorado que puede haber, abrí lentamente los ojos y ella tenía una leve sonrisa-cuanto te dije lo de la estimulación solo fue porque quería tocarte-acepte avergonzado y ella aumentó su sonrisa como si aún no creyera lo que le había dicho-lamento haberte dicho eso-evidentemente yo hablaba cuando le dije "así están bien"-...hasta yo me confundí.
-No me molesta tenerlos pequeños-me dijo y yo no podía estar más seguro de cuanto me gustaba esa mujer-a ti también te faltan cosas-dijo divertida, yo levante una ceja para que creyera que estaba enojado cuando no-no tienes cola-afirmó frunciendo el ceño, yo me reí.
-¿Apoco te molesta?-dije en el mismo tono como cuando ella me lo pregunto.
-Si, muchísimo-me dijo en un tono burlón y tierno que no pude enojarme con ella sino seguirle el juego.
-Entonces empezare a hacer ejercicio para sacar-dije ella se rió y no pude evitar abrazarla.
-Tus glúteos no son solo músculos, también es grasa, no quiero a que te arriesgues a ser gordito-dijo tan inteligente y yo quise seguir la conversación pero no lo hice, me sentía tan bien acostado con mi cara en el hueco de su cuello y ella abrazándome.
-Te quiero-dije sin pensar, literalmente se me salieron las palabras porque no tenía pensado decirlo, sentí como ella detenía sus caricias en mi cabello y el miedo inundo mi cuerpo, ¿qué me iba a responder?

NARRA ANAHI:
-Tus glúteos no son solo músculos, también es grasa, no quiero a que te arriesgues a ser gordito-dije pero él no me respondió nada después de nuestra divertida dinámica, podía sentir como es que él se sentía tan bien acostado con su cara en el hueco de mi cuello y yo abrazándolo.
-Te quiero-me dijo luego de unos momentos casi en un susurro dejándome completamente helada, abrí los ojos de par en par, siento que hasta se me olvida respirar y logre notar que él no solía decirlo muy a menudo, al menos no siendo sincero, como en este momento. Entre mi emoción me quede completamente quieta, él lo noto, pero no porque me molestara que lo hubiera dicho, sino por todo lo que me movió esas dos palabras, él dio un suspiro como de resignación, pero yo no podía callarme después de lo que me había dicho, me aleje un poco de él e hice que me viera a los ojos.
-Y yo a ti-afirme muy segura y él me dio una de sus sonrisas, se veía feliz, me hubiera encantado saber que pensaba, seguro lo mismo que yo cuando lo escuche, incluso aún más ya que él fue el que lo dijo primero, me alegraba que sucediera así, se me acercó y me beso tiernamente en los labios para luego volver a acostarse como estaba antes y él mismo poner mi mano en su cabello para que lo consintiera, sin dudarlo lo hice-descansa-le dije tiernamente para luego dejarle un beso en su frente. #FinNarracionAny

Inesperado [terminada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora