Kiera Lestrange #Wattys2016

Al fin, el baile.

Después de la pelea con Draco, me dirigí corriendo a mi habitación, intentando no llorar.
- Pensé que no estabas tan emocionada por lo de cambiarte- me dijo Hermione cuando entre corriendo a la habitación.
Tenía su vestido azul, con un elaborado peinado, y un maquillaje que resaltaba sus ojos marrones.
- Vaya, te ves muy bien- le dije.
- Gracias. ¿Porque no empezamos contigo ahora?
- Me parece bien- le conteste.
Hermione me ayudó a ponerme el vestido, rojo como la sangre. Este pensamiento me hizo acordar a mi madre, por alguna razón. Luego me maquillo y peino.
- No está nada mal- le dije yo- creo que te iría mejor en esto que de profesora de 'comportarse'.
- Gracias, tú eres mi alumna ejemplar.- me contestó sarcástica.
- Oye, ahora que lo pienso, no te pregunte con quien irías al baile.
- Yo... - Hermione se notaba muy nerviosa, y se sonrojó un poco- iré con Ron.
- ¿Ron? ¿Ronald Weasley? - pregunte sorprendida.
- no me digas que él te odia, porque es el mejor amigo de Harry, y posiblemente pasen juntos toda la noche.
- me odiaba- le conteste yo- pero ya arreglamos las cosas. Así que supongo que no le molestara que esté cerca.
- Creo que ya deberíamos ir al gran salón...- le dije a Hermione.
- Supongo que si.
Juntas salimos de la sala común de Gryffindor y nos encaminamos al gran salón.
Bajamos las escaleras, y junto a estas estaban Harry y Ron.
- ¡Chicos! ¡Llegamos!- los llamo Hermione.
Ronald se dio vuelta y se quedó mirando a Hermione enbobado, mientras que Harry se dio vuelta y dirigió su mirada a mi. Ni bien me vio, el vaso que sostenía en sus manos callo al suelo. Pero aún así, cuando Ron volvió a la realidad, Harry seguía mirándome fijamente.
Baje y me acerqué a él.
- ¿Estás bien?- le pregunte un poco preocupada. Aún me miraba fijamente- sé que no estoy muy linda, pero no tienes que verme como si fuera un mounstro.- le dije riendo.
- Estas hermosa.
Note que me sonrojaba un poco. ¿Porque me pasaba esto? Harry solo era mi amigo, y me había hecho un simple cumplido, igual que lo que me había dicho Hermione antes de salir de la habitación. Pero quizá era normal sonrojarse con los amigos. Después de todo, no había tenido muchos desde hace años.
- Gracias. Tú también estás muy bien.- y allí Harry se sonrojó. Entonces si era cosa de amigos.
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Durante casi toda la noche, Harry y yo nos quedamos sentados junto con Ron y Hermione, charlando y riendo. Jamás me había divertido tanto simplemente hablando con alguien, ni siquiera con Draco. Estaba muy feliz, porque jamás había ido a un baile, y pensé que en estos debías pasarte toda la noche bailando, pero al parecer no se bailaba, solo se charlaba con amigos, como en una reunión. Esto me gustaba, pues era más tranquilo y cómodo para mí, sin mencionar que era pésima bailarina.
Pero cuando pensé que la noche sería completamente tranquila, me lleve una sorpresa al ver que Ron y Hermione se paraban y se alejaban para bailar, y nos dejaban a Harry y a mí solos. No me resultó raro que estemos solos, ya que él era mi amigo, y casi siempre que estábamos juntos, estábamos solos. Pero por alguna razón, Harry parecía muy nervioso, y no sabia que decir.
Viendo que estaba repentinamente mudo, decidí comenzar la charla:
- ¿te está gustando el baile?- le pregunte.
- Si- fue lo único que respondió, sin poder mirarme.
- Pensé que en los bailes la gente solo bailaba, sin ni siquiera hablarse, pero al parecer estaba equivocada, ¿verdad?- seguí yo.
Pero Harry simplemente asintió.
- ¿estás bien?- le pregunte preocupada.
- Yo... Solo estoy un poco nervioso- me respondió, al fin con una pequeña sonrisa en su cara.
- ¿porque estás nervioso?- le pregunte confundida.
- Porque estoy contigo.- me respondió.
Ahora sí tenía un caos en la mente.
- ¡pero si hemos estado solos durante toda la semana!
- Si, pero no en un baile.
- Bueno, mira. Que sea una pésima bailarina no quiere decir que tengas qué avergonzarte de estar conmigo. Si no quieres pasar vergüenza, no tenemos que bailar. No me molesta quedarme sentada y bailar.
- Pero yo sí quiero bailar.- me espetó.
- ¡Y si estás tan avergonzado de mi, y quieres bailar, ¿para qué diablos me invitaste?!- le pregunte furiosa.
- Porque quería bailar contigo.
- Bueno, te habrás llevado una gran decepción. La próxima vez no invitaras a alguien por lastima, Potter.
Y sin dejar que siga discutiendo, me levante para dirigirme afuera, al jardín de la escuela, o quizá a las canchas de qudditch. A cualquier lugar lejos de aquí.
- Tengo que salir a tomar aire. Vuelvo en un rato. Puedes invitar a bailar a alguien que no sea tan patética.- y con eso deje a Harry con cara de idiota. Salí al jardín. Camine hasta las gradas de la cancha y me senté allí, a pensar.
Pensé que el baile sería divertido. Pensé que la pasaría bien con mis amigos, con Hermione y hasta con Ron. Qué la pasaría bien con Harry. Porque él era mi amigo. Mi mejor amigo. Pero como siempre, era causa de lastima, no de cariño. Lastima porque mis padres estaban en Azkaban, porque mis tíos me abandonaron, porque mi primo, mi mejor amigo en el mundo, me odiaba más que a nadie. Porque no tenía amigos. Porque leía simplemente porque no tenía con nadie con quien hablar. Porque la persona más cercana a mí era mi prima de veinti tantos años.
Porque daba pena.
No tenía amigos. Tenía gente que se apiadaba de mi.