Los Golpes de la Vida

Capítulo XIII

Derek.
Ya habían pasado ocho meses, localizar a Shay cada vez se me dificultaba más,  pero no me pienso rendir,  Shay es una chica excepcional, tímida pero muy divertida a la hora de hablar, la mayoría de las chicas son bastante zorras o al menos en esta cuidad, donde las chicas cambian de novio como de calzoncillos, me río ante el pensamiento.

— ¿qué te pasa hermano? —
Pregunta mi hermano quien conduce nuestro auto.

—nada.... — le contesto apenas prestandole atención.

—nada... ¿Ya te viste el rostro? ¿en que piensas? Estás raro desde hace mucho y simplemente no me quieres decir nada. Soy tu hermano se supone que nos contamos todo estúpida —  me río ante sus palabras —es una chica ¿cierto?—

— vaya que me conoces — doy un largo suspiro al recordar que hace mucho le perdí la pista a Shay hace meses dejó de trabajar aún así, como un estúpido sigo asistiendo con la esperanza de verla entrar por la puerta principal y me prepare mi deliciosa comida, ver esa hermosa sonrisa que adorna perfectamente su rostro. —¿que piensas de las chicas?—

—que ahora todas se te quieren tirar encima— comienza a reir pero para al ver mi semblante serio —woouu esa chica debe ser especial—

—lo es —
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Shay
—Hola Frank — dije al entrar a casa y verlo en el sofá frente al sillón.

—sabes que detesto que me llames por mi nombre— dice en un tono molesto.

—vere como sigue mamá— avanzo hasta la habitación de mamá ya esta en casa desde hace algunos meses y renuncié a mi trabajo y a la escuela para venir a cuidarla
No me arrepiento estoy feliz cuidándola ya que paso mas tiempo con ella y está muy feliz apesar de que al principio no lo tomó tan bien

FLASHBACK

—mamá — digo al entrar a su cuarto y sentándome a su lado —hoy fue mi último día de escuela y estaré ahora más tiempo cuidando de tu embarazo — abrí los ojos tanto que creí que se me saldrían, no le había dicho a mamá de su estado por temor a como lo iba a tomar, se lo tendría que decir en algún momento pero no ahora.

Su expresión es seria y me mira fihamente, noti como su rostro se descompone en tan solo un segundo y comienza a llirar desesperadamente, meciendose hacia adelante y atrás repitiendo —lo siento, lo siento, lo siento, lo siento.... — repetía una y otra vez apretando su estómago y comprendí que se disculpaba con mi hermanito y no conmigo.

FIN DE FLASH

Cada día que pasaba sentía como mis nervios aumentaban, ya pasaron más de ocho meses y no evito estar siepre alerta por si algo sucede, en cambio a frank parece no importarle, aún parece aturdido por la noticia y lo se porque ahora pasa menos tiempo en casa y evita lo más que puede vernos aunque me agrade no verlo duele saber que no quiere saber nada de su hija, aunque en realidad la pequeña estará mejor sin él, hace tiempo que supimos que sería niña y es fantástico ya quiero que mamá decida cuál será su nombre. 

Mis planes concisten en no avisarle a Frank cuando a mamá se le rompa la fuente, y agadezco que ahora nos esté evitando.

—¿cómo te sientes mamá?—

—como un enorme saco de sandias—

—¿ya pensaste en algunos nombres?—

—si. Lo decidirás tú— me sorprendo ante su respuesta

—pero eso te corresponde a ti mamá— la verdad no tengo ningún nombre en la mente y no creo que sea buena en ello —mamá de verdad pienso que deberías elejirlo tú—