Capítulo 9.

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—¡Justin! ¡Llamen a Justin ahora! ¡JUSTIIIIIIIN!


El grupo de mujeres en los asientos detrás de mi esta gritando jodiendo sus gargantas.


Así que puedes entender como es realmente, realmente difícil bloquear al hombre cuando todos a tu alrededor lo están aclamando, sobre todo cuando mi cuerpo esta lleno de adrenalina por la lucha que esta a punto de comenzar.


Es una sensación deliciosamente familiar, en realidad, esta hirviendo a fuego lento en mi mientras me siento en el Subterráneo de Atlanta, esperando a que Justin salga al ring. Siento que soy el contrincante y mi cuerpo esta preparado perfectamente. Mis piernas están inmóviles debajo de mi asiento, y también mis manos, pero esto no es más que un engaño. Mi interior, esta rugiendo fuego. La quietud de la preparación. Cuando en el exterior todo esta en calma, y en el interior hay un fuego rugiendo. Este es el minuto en el que todo cae en silencio y se guarda, hasta que llega el momento de explotar, será concentradamente preciso que da rienda suelta a tu energía en un perfectamente planeado estallido.


Incluso ahora, recuerdo mi perfecta posición en cuclillas en la parrilla de salida, la forma en que todos mis sentidos perecían estar afinados con el sonido del disparo de salida, donde todo- y me refiero a todo- despierta con ese sonido, y tu corazón se para una fracción de segundo.


Ahora parece que lo único que estoy a la espera de escuchar es el nombre que va a ser anunciado, y cuando por fin oigo "JUSTIN BIEBER, RIIIIIPTIDE" hay una fiebre barriendo a través de mi, y sin embargo no hay lugar por el que yo pueda correr, no hay alivio para lo que esta sucediendo en mi cuerpo, solo esta ese increíblemente poderoso dolor siendo alimentado por las mismas hormonas que mi cuerpo mantiene afuera, que no tengo manera de detener.


Me levanto de mi asiento al igual que toda la gente en la sala, pero es todo lo que puedo hacer mientras lo miro salir al escenario de la manera en que solo el sabe. El público lo recibe al instante en lo alto, y estoy mareada también. Ahí esta, la fantasía viva y respirando de una mujer, haciendo su camino lento, arrogante, con su cabello rubio oscuro en puntas, una sonrisa asesina con hoyuelos, todo el paquete Justin Bieber. El es la mismísima perfección, y una nueva ola de hormonas barre a través de mí como en el resto de las personas mientras lo tomo visualmente, tan descaradamente exhibicionista en sus pantalones cortos de boxeo y tan sorprendentemente atractivo, se convierte en el centro de mi atención.


El centro. De mi. Mundo.


Desde que deje de competir, he ganado mi grasa corporal y ahora estoy un dieciocho por ciento saludable. Tengo más curvas de las que solía tener, con un poco mas de impulso en mi trasero y un buen relleno en mis pechos. Pero nunca he sido mas consciente de mi cuerpo y sus piezas internas y externas que cuando me relacione con este hombre. Yo no se si alguna vez me acostumbrare a el. Alguna vez podré hacer que deje de provocarme esto. Si, este hombre pone a mi cuerpo fuera de control.


—¡Y ahora, el famoso y aclamado Owen Wilkes, el "Irish Grasschoper"!


Mientras su rival pelirrojo llega al ring, la mirada miel de Justin barre la multitud hasta que me encuentra. Nuestros ojos se encuentran, y al instante estoy sin aliento. Sus hoyuelos salen para formar una sonrisa tan perfecta, que corre todo el camino a través de mí, electrizando mis terminaciones nerviosas.

Eres mía (Miley Cyrus & Justin Bieber) JileyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora