7.La mafia, ha vuelto

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Una vez que recogí mi moto, me encamine a casa con la intencion de darme una baño relajante y dormir como nunca lo habia hecho.
Pero los sueños, sueños son.

Pare en un semaforo que se habia puesto en rojo, cuando oí el motor de un coche que iba a gran velocidad en mi dirección.
No le di importancia y segui a lo mio.
El ruido se hacia mas fuerte hasta que vi por el espejo retrovisor de mi moto un coche negro, sin matricula y con los cristales polarizados.
El coche freno muy cerca de mi, demasiado para mi gusto.
Del coche bajaron cuatro hombres vestidos de negro.

-Pequeña Moore, hacia mucho que no te veia- esa voz me resultaba familiar pero era incapaz de ponerle cara- Por tu cara deduzco que no te acuerdas de mi, voy a darte una pista, ¿te acuerdas de Nikolay Kozlov?

En ese momento se me helo la sangre y no era capaz de reaccionar.

-No puede ser ...- ¿la mafia rusa? ¿otra vez?- ¿Que quereis?

-Tu padre quiere verte ahora- dijo haciendo énfasis en la palabra "ahora" con su acento ruso

-Va a ser que no. Yo ya deje todo eso atras, dile a mi padre que no me meta en sus mierdas otra vez- solo de decir la palabra " padre" me entran arcadas.

-Vas a venir con nosotros si o si, te estoy dando la opcion de elegir si por las buenas o por las malas.

-Por las malas, entonces- dije con una sonrisa malvada a la vez que le guiñaba un ojo

-Tu lo has querido

Los tres hombres que acompañaban a Nikolay se empezaron a acercar a mi lentamente.
El golpe del primer hombre no tardo en llegar, afortunadamente consegui esquivarlo sin dificultad, no deje que recuperase la posicion inicial cuando le di un puñetazo en la mandibula y una patada en el abdomen haciendo que cayese inconsciente al suelo.

El segundo hombre era mas grande que el primero, sin embargo no tenia ni tecnica ni experiencia ya que no sabia como proteger su rostro, con una unica patada en el pecho cayó al suelo adolorido.
El ultimo hombre que quedaba se acerco a mi tan rapido que no me di cuenta cuando su puño aterrizo en mi mejilla dejando un doloroso ardor en ella.
Seria el primer y ultimo golpe que me daba. Hice mi mano derecha un puño que acabo aterrizando en su garganta, dejando al hombre caer al suelo asfixiado.

-Veo, pequeña Moore, que sigues acordandote de las clases de boxeo que te dio tu padre

-Lo que pasa, es que mi padre es tan imbecil que me manda a cuatro estupidos que ni siquiera sabian que llevo desde los diez años en peleas ilegales. Cuando te vayas, vas a decirle a mi padre que me deje en paz, sino sere yo la que lo vaya a buscar. Adios Nikolay- le dije lo mas friamente posible

-Nos volveremos a ver Moore, eso tenlo por seguro- me dijo mientras se metia en el coche

-Por tu bien espero que no Kozlov- le dije alto para que me escuchara, cerro la puerta y se marcho a gran velocidad, dejandome sola en medio de la carretera.

Me monte en la moto y me dirigi a casa, esta vez sin interrupciones en el camino.

Un Mar de PosibilidadesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora