El noxiano llevaba ya horas avanzando entre la vegetación en busca de su hermano, incluso había encontrado su arma, pero alguien le interrumpió. Draven estaba convencido de que la joven demaciana venía a cobrarse la vida de su aislado hermano y no podía permitir aquello. Aunque sí se le hizo extraño que la rubia estuviese en aquel lugar, y era de extrañar que no hubiesen mandado a una asesina. O quizá los demacianos no tenían asesinos de aquel tipo por temas de honor. ¿Pero importaba en aquel momento? En absoluto.
La verdad es que se habría quitado una gran molestia de encima si el hacha de su hermano hubiese acertado en la contraria, cosa que no logró por muy poco, pero ya pasaría más tarde a por ella.
—¿Dónde estás, rata demaciana...?
El silencio. La otra no parecía una especialista en armas pero llevaba una lanza con ella, una lanza que ni siquiera estaba utilizando como debería. Era más bien como si hubiese buscado un bastón que combinar con su técnica física, pero con filo. Lamentable. Sería fácil acabar con ella... si lograba verla. ¿Cómo podía guiarse tan fácilmente en aquel bosque tan horrible?
No, no. No podía ser más rápida que él, no podía ser más rápida que Draven. Por una vez estaba por encima de su hermano, él necesitaba que fuese a salvarle y no dejaría que una rata lo arruinase tratando de matarlo. Si la Mano de Noxus caía ante una mujer demaciana de su poca destreza, la nación sería el hazmerreir de todo el mundo.
Finalmente, una pista. Un sonido proveniente de unos arbustos, una dirección clara entre los árboles. Hacia allí fueron lanzadas ambas hachas del noxiano, casi por acto reflejo, pero no fue el único arma arrojada. De repente se sentía incapaz de moverse, y cuando la demaciana salió de aquellos arbustos fue para lanzar el arma que portaba directa hacia él, con una puntería inesperada. Ambos se habían expuesto al ataque ajeno para poder golpear, ambos podían morir si aquellas armas llegaban a su destino.
Draven, tras inútiles esfuerzos por moverse en el poco tiempo que tenía, trató de tomar aire para esperar a que aquel arma le alcanzase; lo mismo hizo Lux.
Sin embargo él no fue golpeado, aquella lanza se incrustó en un árbol tras él gracias a que alguien lo embistió, apartándolo del peligro. Sin embargo, no se trataba de aquel que él esperaba.
![](https://img.wattpad.com/cover/56059419-288-k935457.jpg)