Capítulo 12

120 12 5
                                    

-Ay, Dani, ¿qué hora es?¿Y por qué me despiertas tan pronto?- mascullo tapándome con las sábanas.

-No es pronto cariño, son las 11:00- dice Jesús apareciendo al lado de su gemelo. Yo abro mucho los ojos sorprendida.- Ayer nos despertamos a las 5:00, necesitabas dormir- dice Jesús depositando un beso en mi frente.

Dani asiente.

-¿Y vosotros por qué os habéis levantado antes?- pregunto con interés incorporándome en la cama.

-Tu hermano ha entrado tocando la pandereta y cantando villancicos- ríe Dani.

Mi hermano se acerca a nosotros con una sonrisa triunfante.

-Lo que pasa es que como eres una puta marmota no te has enterado- dice Marina riendo.

-Buenos días a ti también, imbécil- digo sacándole la lengua a mi amiga.

-¡Buenos días!- exclama Marina tirándose a mi lado en la cama, y rodeando mi cuello con sus brazos, risueña.

Yo le devuelvo el abrazo riendo. Los gemelos miran la escena divertidos.

-¡Buenos días!- dice mi madre apareciendo en nuestra habitación.- ¿Habéis descansado?

-Sí, sobre todo ______- dice Jesús riendo, a lo que yo le lanzo un cojín.

-Bueno, daos prisa que tenemos que ir a desayunar, y si no se nos va a hacer tarde- dice mi madre sonriendo antes de desaparecer por el pasillo.

(...)

-¡Daniel Oviedo!- grita Marina, desde el baño.- ¡O dejas de aporrear la puerta, o salgo y te meto el champú por donde te quepa!- dice algo molesta, y a la vez divertida.

Dani pone cara de disgusto, a lo que yo me río. Éste se aleja a preparar sus cosas para hoy. Según nos ha dicho mi madre, haremos un poco de turismo, y comeremos en un restaurante que le han recomendado. Creo que es la primera vez que me apetece hacer turismo. Pero claro, es Nueva York, ¿cómo no me iba a apetecer?

-Ya está, pesado- dice Marina saliendo del baño y dándole un beso en la mejilla a Dani a lo que él pone cara de niño bueno y se adentra en el aseo.

(...)

Mis padres se adentran en el ascensor para bajar a la cafetería del hotel, mientras que nosotros decidimos bajar por las escaleras, ya que solo son 2 pisos. Parece ser que ellos son más rápidos, porque cuando llegamos abajo ellos ya están allí. Y están hablando con un matrimonio más o menos de su edad. A su lado hay una chica, que parece ser su hija. Nos acercamos a ellos sonrientes.

-Chicos, estos son Antonio y Pilar, unos amigos míos de la Universidad, y ésta es su hija, Laura- dice mi padre.- Y ellos son mis hijos, Mario y _______- indica señalándonos a mi hermano y a mi- y ellos son amigos de ______, Daniel, Jesús y Marina- dice esta vez señalándoles a ellos. Mientras, ellos se levantan para darnos dos besos a cada uno, a los que nosotros correspondemos.

-Encantada de conoceros- dice Pilar.- Es una casualidad haber coincidido aquí, y no haber coincidido nunca en Madrid. Además, vivimos muy cerca.

-Sí, deberíamos vernos más a menudo- dice mi madre esbozando una sonrisa.

-Bueno, nosotros ya hemos terminado de desayunar hace un rato, así que vamos a dar una vuelta por los alrededores- dice Antonio.

-Nosotros teníamos pensado hacer turismo cuando terminemos de desayunar, si queréis podéis acompañarnos, ¿verdad, chicos?- nos pregunta mi padre sonriente. Todos asentimos.

Antonio, Pilar y Laura se miran entre ellos, buscando la aprobación de los demás miembros de su familia, y segundos después los tres asienten sonrientes.

-Por nosotros genial, si queréis subimos a nuestra habitación para hacer un poco de tiempo hasta que vosotros terminéis de desayunar y quedamos en la puerta del hotel a las 12:00- dice la mujer.

-Perfecto- sonríe mi madre.

(...)

-¿Es una Canon?- le pregunto a Laura señalando la cámara que lleva colgada al cuello.

-Sí, me la regalaron por mi cumpleaños, que fue hace poco.

-¿Cuántos cumpliste?- pregunta Marina.

-16- responde Laura sonriente.

-Así que vas a 1ero de Bachillerato- concluyo yo.

-Exactamente- ríe ella.

-Como nosotros- dicen Jesús y Dani a la vez.

-Y los demás, ¿cuántos años tenéis?- pregunta Laura con curiosidad.

-Marina y yo 15, y Mario 19- respondo por los tres.

-Según me ha dicho mi madre, vuestro instituto está cerca del mío- dice Laura sonriente.

-Que guay, así podremos vernos más a menudo- dice Dani.

Yo sonrío mirando a la morena de ojos verdes que acaba de entrar en nuestras vidas, pero que no tardará en quedarse en ellas.

(...)

Marina y yo posamos para la foto que nos está haciendo Laura con su cámara.

La fuente de detrás nos moja ligeramente. Las dos tenemos dos trenzas de espiga, y sonreímos en dirección a la cámara. Cuando oímos que la foto ya está hecha, cambiamos de cara sacando la lengua. Después de hacernos unas cuantas fotos, le pedimos a la madre de Laura que nos haga una foto a los seis juntos. Luego nos sentamos en el bordillo de la fuente a verlas. Todos sonreímos, y nos juntamos con los padres para seguir haciendo turismo y aprovechar del buen tiempo.

¡Hola!
Pff me vais a matar por haber estado tanto tiempo sin actualizar, pero no tenía nada de inspiración. Lo siento, en serio.

Bueno, no soy de las que felicitan el Año Nuevo, pero creo que vosotr@s os lo merecéis. Este no ha sido mi mejor año, pero me alegro de que hayáis formado parte de él. Gracias por todo, en serio, que con cada comentario, con cada voto, sois capaces de sacarme una sonrisa, de alegrarme el día. Gracias por esos 1,59k leídos, sois increíbles. Espero que este 2016 sea mejor que el 2015, haya sido un buen año o no. Juntaos con los que os quieren, con vuestra familia y vuestros amigos, no solo hoy, sino todos y cada uno de los días del año. Y bueno, soy la persona menos indicada para decir esto pero sonreíd, sed felices y disfrutad de la vida al máximo. Cuidad mucho de los vuestros, en serio, y haced de este 2016 un año inolvidable. Gracias otra vez, os quiero♥

Por qué me enamoré de ti{Gemeliers}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora