CRIS
Con la noticia que acababa de darme mi padre me quedé helada. O sea, que realmente iba en serio con la propuesta de Claudia.
Me quedé unos segundos pensativa mientras tenía los ojos inmóviles en la mesa y la mano pasaba lentamente por mi cara. Esa decisión iba a suponer varios cambios, y no estaba segura de qué decir.
Mi padre mientras tanto me seguía mirando expectante esperando encontrar una respuesta al respecto. Yo, sin embargo, seguía pensando en las posibles consecuencias.
He viajado muy poco, y siempre que lo he hecho ha sido con mi familia, no sola, y no sé, me da miedo. Soy responsable y sé que teniendo a mi padre, que es el controlador absoluto, no pasaría nada. Me daría todas las indicaciones posibles, con todo lujo de detalles, pero no sé... igualmente prefiero estar acompañada.
Por otra parte la llamada de Alex, ha sido también repentina, y me gustaría buscar alguna forma de dar con ella.
Mientras sigo absorta en mis pensamientos, la falsa tos de mi padre como señal de impaciencia me despierta, devolviéndome al salón.
Claudia se sienta al lado de mi padre y mientras le da unas caricias en el brazo, como si fuera de la familia, me dice:
- Cris, de verdad. Tu padre lo que quiere es lo mejor para ti y yo también. Después de lo de Alex te hemos notado triste, y no queremos verte así.
Yo creo que más bien es ella la que no quiere verme.
Tras una pausa, continúa - Además, aquí tampoco estás muy bien, es decir...
- Ya, ya lo sé, no hace falta que lo digas - le interrumpo - No tengo amigos, ya.
- ...No sé, pienso - mira a mi padre - bueno, pensamos que un cambio no vendría nada mal.
Resoplo mientras doy vuelta alrededor de los sillones del salón.
Pff... en realidad, mi padre tiene razón. A Claudia desde luego no voy a prestarle la más mínima atención. Conociéndola seguro que lo hace en beneficio suyo...
Pero es verdad, aquí no tengo a nadie más que mi ordenador... A lo mejor con este viaje podría conocer a gente que me comprendiera, gente con la que me sintiera a gusto. Desde luego, no creo que lo pueda pasar peor que aquí, que paso desapercibida.
No sé... además siempre me ha apetecido viajar a Estados Unidos... Preferiría ir a Nueva York, pero bueno... siempre puedo ir en metro. Tiene que ser genial observar la ciudad tan viva, con tantas tiendas y edificios y todo tan lleno de color. Siempre me ha gustado esa ciudad... En Navidades debe de estar todo precioso... Las calles llenas de gente, decorados por todas partes y la ciudad emblanquecida por la nieve... Además ver la bola caer a las doce de la noche debe de ser alucinante...
Sí, Nueva York me apasiona, creo que las películas me la han pintado muy bien, pero de aquí a que sea otra vez Navidades queda todo un año.
Sigo dándole vueltas a la cabeza, puesto que es muy tentador, pero también es muy distinto a lo que estoy acostumbrada... O sea, no por el idioma, porque el inglés se me da bien, es más, la única música que escucho es extranjera y las pelis y las series también suelo verlas la mayoría en inglés.
Sin embargo, tengo más miedo por el tema del instituto... ¿Y si no encajo?, ¿y si me va peor en aquel instituto y bajo mi media?...
Demasiadas preguntas rondan en mi cabeza a la vez que los ojos ansiosos de mi padre y Claudia se depositan sobre mí en este momento, ejerciendo aún más presión de la que yo misma ejerzo.
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Unexpected
RomanceAlex y Cristina son dos hermanas muy distintas; una rebelde y otra precavida, mas son uña y carne. Ambas emprenderán un viaje hacia otro país en el cual, además de aprender otro idioma, conocerán a su otra yo. Emociones, amistades, trabajo; no saben...