III

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Llegué a casa y lo primero que hice fue ir a mi habitación y tumbarme en la cama. Hoy había sido mi primer día en el instituto y la verdad es que me asombra que ya tenga mínimo dos enemigos en clase.
Por lo menos, es una suerte haber conocido a Erik. Tengo que investigar la desaparición de su padre. Tal vez fueron los vaenlane.

Verónica entró a mi habitación y se sentó a mi lado.

-¿Qué tal te ha ido el primer día en el instituto? ¿Has visto o hecho algo fuera de lo normal?

-Que va, solo dejé paralizado a un subnormal de mi clase un cuarto de hora, pero por lo demás todo bien.

-¿Cómo se te ocurre hacer eso? Sabes perfectamente que solo puedes hacerlo en caso de emergencia.- Me dijo alzando mucho la voz.

-Para mi, colarse en la fila de la cafetería es una emergencia. Llevaba esperando un buen rato mi turno y cuando me tocaba a mi, intentó colarse así que lo menos que podía hacer era apartarle de mi camino y esa era la única forma.-Dije medio enfadada.

Entonces Luis llegó a mi habitación pero se quedó en el marco de la puerta.

-¿A que viene tanto escándalo chicas?-Dijo medio preocupado mientras se colocaba las mangas de la camisa que llevaba.

-Pues que Elisa a dejado paralizado a un chico de su clase solo porque se le coló en la fila de la cafetería.

-Guou, bien hecho, y ¿cuánto tiempo le dejaste paralizado?-Se acercó y chocamos los puños.

-Pues un cuarto de hora para que pudiera almorzar el pobre chaval.- Dije sintiéndome superior por unos momentos.

-¡Luis! Se supone que deberías estar riñéndola por hacer lo que hizo y no felicitarle.

-Em, sí.-Rascándose la cabeza-Sabes que no puedes hacer esas cosas delante de tanta gente. Estás castigada sin cenar.

-Joder pero que asco tío. Si lo he hecho, es porque se lo merecía. A la próxima que se meta con alguien de su mismo coeficiente intelectual y no conmigo.

Verónica se levantó y se fue a la cocina para preparar la cena dejándome sola con Luis.

-Psst, acércate.-Me dijo susurrándome

Me levante un poco de la cama y fui a donde se encontraba.

-Eso estuvo increíble. Seguro que se le quedó cara de idiota cuando se cayó al suelo.-Dijo mientras intentaba aguantarse la risa.

-Lo mejor fue cuando una chica que va a mi clase, Amber creo que se llama, vino a decirme que le dijera como había hecho eso mientras otra intentaba levantar al otro subnormal. Fue épico.

-Todos sabemos que fue épico. Seguro que Vero también lo piensa pero sabes que tiene que parecer una madre y se lo está tomando más enserio que yo, para que mentirte. Así que no te preocupes que cuando esté distraída te traeré un poco de cena o algo.

-Gracias Luis.-Le abracé todo lo fuerte que pude agradeciéndole en silencio que estuviera allí siendo quien es.

Luis se levantó y se iba a ir cuando de repente se paró y volvió a mi lado.

-Casi se me olvida decirte una cosa sobre el enemigo. Mis contactos de Trixio me han comentado que el chico tiene la misma edad que tú. Ten cuidado y llévate esto. 

Me dio un bolígrafo y le miré con cara de "Me estas bromeando".

-¿Para qué quiero yo un boli? Ya tengo uno en mi mochila.

Este boli a diferencia de los que tengo tiene dos botones. 

-Prueba a apretar los dos botones.

2018 ha llegadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora