Un asesino a sueldo. [ziam]

once

Han pasado dos semanas y el plazo se cumplió. Justo ahora Yaser Malik debe de estar revolcándose en el infierno, o eso se supone.

Después del deceso de mi madre, Joe me dio días libres para arreglar lo que fuera que tuviera que arreglar, y Niall no podía hacer solo el trabajo así que él se quedaba a observar pero nos alargaron una semana más para que ese bastardo tuviera que pagar. Desde que el Niall se sabía con exactitud los movimientos que se realizaban en la residencia Malik, eliminarlos era pan comido.

Vendí la casa que compartí con mamá y papá toda mi vida, estar ahí me era doloroso y si no lo hacía, superarlo me iba a ser imposible. Mi actual residencia era un pequeño departamento en el mismo edificio que Niall.

Y con Zayn, hablamos por mensajes de texto ya que vernos era muy arriesgado. No quería meterlo en mi trabajo pero tenía que morir.

Ese día me desperté temprano a ducharme para ir a trabajar. Cuando estuve listo, salí en busca de Niall y para mi sorpresa, él estaba esperándome. Comúnmente tarda demasiado en arreglarse, no entiendo el por qué si solo es cuestión de tomar unos jeans y cualquier camisa, en cambio él se detenía a revisar si combinaba, si resaltaba su figura, si estaba de moda o no; tal como una mujer.

Días atrás habíamos cambiado de móvil por cuestiones de seguridad, y ambos nos transportamos en un Lamborghini Aventador LP 700-4, probablemente demasiado lujoso para la ocasión, como sea. A unos minutos estábamos en el mismo lugar que hacía dos semanas, pero ahora con un distinto objetivo: deshacernos por completo de Yaser Malik y cualquiera dentro de esa casa. En base a los movimientos que habíamos observado, regularmente era este horario en el que Yaser arribaba a casa, entre 6:00 p.m. y 6:42 p.m., y actualmente eran 6:28 p.m., no esperaríamos mucho.

Entre la respiración tranquila de Niall y el leve sonido del viento fuera del auto, mi menté remontó a hace una semana cuando mamá murió. "Prométeme que serás feliz siempre, Liam. Hazlo por mí". Esa frase azotaba mi mente cada segundo en ese instante. No podía fallarle, lo había estado haciendo desde 2 años atrás y no quería hacerlo de nuevo, era, definitivamente, un momento crucial en mi vida tanto laboral como romántica; Zayn era tan fácil de amar, rea. El chico era la cosa más adorable en la vida, tenía todo para hacerme feliz el resto de nuestros días y la mejor parte es que todo el sentimiento era mutuo. Estaba a minutos de llevarme todo, o nada.

–Deberíamos salir. –Niall irrumpió en mis pensamientos.

–Seguro. –afirmé y le sonreí nervioso. Cargamos nuestras armas y para disimular, la mía la puse detrás de mi espalda, y en el bolsillo derecho una navaja de supervivencia, sólo por si acaso. Ambos salimos y él aseguró el coche, cruzamos la acera y nos detuvimos uno delante del otro.

– ¿Quieres esperar aquí, o entraremos de una vez? –le pregunté. Él rió.

–Sabes cómo me gusta hacer las cosas, entremos ya. –Dio media vuelta e intentando burlar la seguridad de la casa, entramos sin problemas. – ¿Tú arriba, y yo abajo? –sugirió y acepté.

Me alejé de él y subí escaleras arriba mientras portaba mi arma como un policía llegando a la casa del criminal y así como tal, abrí puerta por puerta, revisando quién estaba dentro de la habitación. Que realmente no eran muchas personas las que salían y entraban de la residencia, solo habíamos notado a tres.

Al abrir una de las puertas, la primera imagen en mis ojos fue Zayn recostado en su cama con audífonos puestos cantando algo parecido a Karma Police de Radiohead. Él, al percatarse de mi presencia inmediatamente retiró el aparato de sus oídos y se acercó a mí.

–Nunca pensé encontrarte aquí. –dijo sonriendo.

Y justo ese fue el momento en que tomé mi decisión final, Zayn me hacía feliz y por ende, debía protegerlo a toda costa. Ahora estaba seguro que no le fallaría a mamá.

–Zayne, tienes que irte. –le respondí.

– ¿Por qué? Ésta es mi casa, tú tienes que irte. –me contradijo haciendo un puchero.

–En serio, Zayn, vete ya. Hay una estación de servicio a unas tres calles de aquí. Saldrás por el patio trasero y correrás hacia ahí. –su expresión facial cambió y era tan vulnerable verlo asustado– No mires atrás, yo iré por ti. No hables con nadie, y nadie es nadie Zayn.

– ¿¡No me puedes explicar lo que está pasando!? –me gritó exaltado, y yo lo comprendía.

– ¡No hay tiempo para dramas! ¡Vete ahora mismo!

Me reprochó con la mirada y salió de la habitación, rápidamente miré por la ventana y pude ver a Niall revisando el jardín minuciosamente. Fui detrás de Zayn que estaba ya en la sala de estar. Me acerqué a él y lo abracé por la espalda.

–Perdón bebé, necesito protegerte. –susurré en su oreja.

– ¿De quién? Estoy en casa, aquí es seguro.

–Ya habrá momento de explicaciones. –sostuvimos la mirada unos segundos y le pedí: –Por favor...

Unos ruidos vinieron de afuera, era un coche llegando. El tiempo se agotaba y si Niall me descubría hablando con Zayn, ambos seríamos hombres muertos.

–No me falles. –fue lo último que me dijo antes de salir corriendo y perderse de mi horizonte.

–Por supuesto que no. –le respondí, aunque él ya no podía escucharme.

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felices fiestas a todos, ily :) x