El verano había llegado a su fin, y con él las vacaciones. Mis padres se tenían que ir a Londres a solucionar unas cosas que tenían pendientes.
Me encontraba en mi habitación cuando Marylin entró.
-¿Se puede señorita Sophie?- me preguntó.
-Claro pase.
-Su madre me ha pedido que haga las maletas, está tarde volvéis a Londres.
Se acercó y se sentó junto a mí.
-Sophie no puedes seguir así – me dijo mientras me pasaba sus dedos entre mi pelo, nadie me hacía eso, ni si quiera mi madre- tienes que ser feliz.
-La única persona que me hizo sentirme así fue Peter.
-¡Marylin, vasta de charlas y prepárala el equipaje!- se oyeron las voces de mi madre desde el piso de abajo.
-Sophie escúchame bien, no hagas lo que la gente quiera de ti, haz lo que te marque el corazón y te haga sentir bien contigo misma, no dejes que te puedan manipular, haz lo que verdaderamente te importe en la vida y así puedas ser feliz.
Marylin se levantó y comenzó a hacerme el equipaje.
-¿Dónde está Peter?
-Salió temprano esta mañana.
Salí corriendo de mi habitación, baje las escaleras lo más rápido que pude.
-¿A dónde vas Sophie?- dijo mi madre pero no contesté.
Salí de la casa, era una mañana fresca de Octubre, el otoño había llegado y los árboles comenzaron a perder sus hojas.
Estuve buscándole toda la mañana, pero no le encontré. Cuando llegué a la casa mis padres estaban metiendo las maletas al coche.
-Cariño, ¿dónde estabas?- dijo mi madre.
-Qué más da- la contesté.
Subí a mi cuarto a coger mis maletas, cuando vi en mi escritorio una pluma y una hoja en blanco. Me resultó raro porque yo no lo había dejado allí, pero ya que estaba tenía que usarlo.
<<Querido Peter:
Estos últimos meses han sido los mejores de mi vida. Me he dado cuenta que en el mundo no importa lo que seas, siempre habrá alguien junto a ti que te hará feliz, y siempre estará dispuesto a ayudarte.
Tú has sido para mí como un hermano que ha sabido comprender. He aprendido que no importa si una persona es rica o pobre, si se comprenden se podrán ayudar. No te sientas culpable por lo que ha pasado, tú no has tenido la culpa de nada, aquel día por primera vez en mi vida me sentí libre, y fue gracias a ti. Te echaré de menos, espero volverte a ver algún día, porque no sé cuando volveré, las cosas entre mi familia están muy difíciles, no sé porque, pero mis padres están muy preocupados por las tensiones que tiene nuestro país con otros. No importa lo que pase te recordaré siempre y espero que hagas realidad tu sueño de volar.
En mi habitación debajo de la cama te he dejado dinero y algo de ropa que os vendrá bien en los tiempos que corren.
Con cariño Sophie>>
Dejé debajo de la cama lo que les daba, cogí las maletas y eché el último vistazo a mi habitación.
Uno de los sirvientes me ayudó a bajar las maletas, mis padres ya estaban dentro del coche. Mientras el sirviente me guardaba mis maletas, me fui a despedir de Marylin
-Gracias por todo Marylin.
-No tienes porque dármelas mi niña- dijo acariciándome la cara.
-Te las doy porque has sido una madre para mí, y también dáselas a Peter por haberme enseñado a sonreír.
Nos dimos un abrazo, antes de entrar en el coche miré la casa y por último a Marylin.
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Battle of Britain
RomanceJamás creí que una simple historia me haría cambiar tan rápido mi punto de ver la vida. Yo tenía 16 años y como cualquier adolescente odiaba los libros y sobre todo leer. Una tarde mi abuela comenzó a leerme una historia de un amor imposible. Un amo...