6.

86 2 1
                                    

Se sentía como si hubiera fuego en sus pulmones, parecía como si se hubiera olvidado de como respirar. Empezó a gritar a todo volumen para que alguien lo ayudara, en menos de lo que se pudo dar cuenta se encontraba en el asiento trasero haciendo ruidos con la cabeza sobre los hombros de su hermana Gemma. Pero lo único que podía pensar era ¿Dónde se había metido Louis?


Se despertó a causa de un pequeño dolor en su brazo derecho, abrió los ojos lentamente y se dio cuenta que estaba conectado a cientos de cables, si, había tenido una recaída. Su vista se aclaró un poco y se encontró a su madre sentada en el sillón de la habitación donde lo internaban siempre.


—Hola, corazón. —Lo saludo—Fue liquido en los pulmones... al parecer no hay noticias tan malas por el momento, pero tienen que hacerte más estudios.


—L-louis—logró decir.


—Está afuera ¿Quieres que le diga que quieres verlo? —Harry asintió. —Bien...—Le dio un beso en la frente para después ir a llamar a Louis. Él estaba realmente preocupado por Harry, no sabía porque pero había tenido mucho miedo de perderlo.


—Hola, Hazz... cielos que susto nos diste—rio un poco. —Vas a matarme de un infarto ¿sabes? No soportaría perderte.


Aquello le enterneció demasiado, le dedicó una sonrisa cálida y decidió que tenía que cuidarse... porque si no ¿Cómo iba a quedarse más tiempo con Louis?


—No me iré—dijo—Me quedare aquí, a causar muchos problemas y a matarte de un infarto al corazón—Sonrió a pesar de que todo el cuerpo le dolía.


Se sentía terriblemente mal, deprimido y con terrible dolor de cabeza, pero aun con suficientes fuerzas para sonreír para Louis.


Los días pasaron y Harry se sentía cada vez mejor a pesar de que tenía un nido de pájaros en lugar de cabello, Louis siempre le decía que se veía bien, pero le mentía, él se veía hermoso.


Harry veía una película junto a Louis en el sillón de su casa, Harry tenía que tener suero pero eso no impedía que pasara buenos ratos con Louis y sus ocurrentes bromas. Louis hacía sonreír a Harry como nadie más en el mundo.


Pero hubo un momento... un momento en el cual el mundo se detuvo, un momento en donde no existió la enfermedad de Harry ni el odio a la vida de Louis, ni peleas, ni odio, ni nada malo... en el mundo solo existía lo hermoso y en ese momento, se besaron.


Fue un beso lento pero largo, Harry no sabía cómo reaccionar así que solo cerró los ojos y se dejó llevar por los suaves labios de Louis, al separarse, Louis susurró un casi inaudible:


—Te amo—después abrazó a Harry quien aún no decía nada, Harry se dejó abrazar pero al mismo tiempo se sentía triste, ¿Ahora como haría para despedirse de él? Ahora sería más difícil para Louis dejarlo partir.


Era un día soleado, así que después de un rato, Louis le propuso a Harry que salieran a caminar, estirar las piernas le haría bien a Harry para que mejorara su circulación y así se distrajera un poco. Louis comentaba lo hermoso que era el paisaje aunque solo estaban a pocos metros de la casa de Harry. Louis lo tenía que ayudar a caminar ya que estaba débil pero aun así ambos disfrutaban de la caminata.

I'm Sick (Larry Stylinson) By: Dbanhi CastilloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora