Simplemente yo.

Irrealidad.

Bajemos los párpados durante un segundo y recordemos todo lo que nunca ocurrió;

Aquello que sin importar las circunstancias y problemas, además de inesperadamente, en mi cabeza se manifestó.

Rememoremos la manera en que tu mirada danzaba sobre mi largo vestido cuando la campana sonó,

Así como el brillo con el que tus pupilas deslumbraban en el mismo instante en que una fuerte ventisca nos abrazó.

Cambiemos de recuerdo, que el corazón se me achicó.

Revivamos la forma en que nuestros cuerpos corrían de calle en calle,

Observando los rascacielos y deleitándonos con cada detalle,

Riéndonos a carcajadas, sintiendo a nuestra cabeza estallar,

Viviendo cada ocasión como si el mundo se fuese a acabar.

Cambiemos nuevamente de recuerdo, que las lágrimas han iniciado a amenazar.

¿Recuerdas a la tormenta corriendo por nuestro cuerpo?

Aún sigo sufriendo los estragos del momento.

Giramos bajo la lluvia hasta que nuestros rostros se encontraron,

Y sin distancia de por medio, nuestros labios se juntaron;

Amanecí con gripe la siguiente madrugada

Y cuidaste de mí mientras tu cintura yo abrazaba.

Volemos hacia otro recuerdo, que de cursilerías ya estoy cansada.

¿Sabes qué? Abramos la vista y topémonos con la realidad,

Es mucho más doloroso viajar a tu lado de ciudad en ciudad,

Ya que aquellas pequeñas travesías sólo en mi mente tienen lugar

Y aunque día con día me lo recrimine, enamorada de ti siempre voy a estar.