Darkness and Light [EN EDICIÓN]

El pasado y la condena

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Hey! De nuevo yo, lamento no haber actualizado ayer pero no tenia internet xC pero acá está el capítulo, si tienen dudas, los próximos capítulos responderán a ellas, pero, si quieren pueden comentar, y si no lo veo como spoiler o algo, les responderé con gusto ;D Está canción siempre me gustó, y fue la que me inspiró a re escribir este cap (Se me borro dos veces) y, la verdad, me quedó mucho mejor, espero les guste Butterfly fly away de Miley Cyrus. Disfruten el capitulo, gracias por leer.

P.D: Bebé Camille en multimedia

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Capítulo #14

{Narrador universal}

Katy se veía hermosa y también muy intimidante, una extraña combinación, que solo ella podría lograr con tanta naturalidad, su cabello castaño oscuro caía en ondas muy sutiles por su espalda, y vestía unos pantalones ajustados, una blusa arremangada hasta los codos y unos zapatos altos negro, que la hacían ver elegante y amenazadora, sus ojos completamente negros te hacían aullar literalmente de dolor si le mirabas por mucho tiempo, no se movía, apenas para respirar, y Jev, que estaba a su lado derecho, no relava mucho el tenso ambiente, con su mirada verdosa posándose en todo lo a su alrededor, desconfiando de cada movimiento y completamente alerta. Ambos estaban en un territorio que no les favorecía, y allí, no eran tan fuertes.

La pequeña Camille con apenas unos pocos meses de vida, estaba escondida en lo profundo de aquel bosque cuyos árboles eran tan altos, que hasta Michael Jordan se sentiría empequeñecido ante ellos, donde el sonido de los animales era un susurro apenas audible, pero muy presente en todos lados, y el silbido del viento removía las hojas caídas en las viejas raíces de los árboles, en un lugar que muy remoto, donde era muy difícil llegar, y donde aquella cabaña no puede ser encontrada por mera casualidad, ella estaba al cuidado de Nora, que no era capaz de mantenerse quieta más de dos minutos por el nerviosismo, dando vueltas por la pequeña cabaña, con Camille en brazos, y, aun así, daba miradas tranquilizadoras, sonrisas llenas de paz y arrullaba con total serenidad a la pequeña en sus brazos, que se sonreía y estiraba sus pequeñas manitos hacia la cara de Nora de vez en cuando, dormía y despertaba en intervalos de poco tiempo, mientras Nora no paraba de dar vueltas por todos lados.

Katy y Jev, estaban en el tercer plano esperando en una gran sala gris, con escaza iluminación, sin muebles y sin ventanas, sin nada más que paredes y la puerta por donde habían entrado, esperando, a quien ellos creía acabaría con todo, lo que ninguno de ellos sabía era que todo recién comenzaba, y que por más que quisieran, no podrían evitar lo inevitable. La sombra apareció en frente de ellos, con una sonrisa ladeada de suficiencia que irritó a Katy. —Estás sentenciada, tú, la última descendiente con sangre real de aquel ángel que nos condenó a quedarnos aquí, sin derecho a juicio divino, sin derecho a paz, a darnos la luz que necesitamos para volver al plano físico, y tener otra oportunidad, dándonos de tu interminable luz, y ayudando a todas las almas sentenciadas, incluido, claro, el alma de aquel hombre que tanto presumes amar. Claro, que como todos tus ascendencia, puedes negarte, y vivir lo que te queda de vida con normalidad, sin ninguna responsabilidad con nosotros, y sin persecuciones de nuestra parte— La sombra hablo en un susurro directo a la mente de Katy, y, a pesar de eso Katy notó perfectamente la suficiencia y la satisfacción en su tono de voz, y, lucía una sonrisa ladeada que desbordaba una superioridad, que él no poseía, al menos no frente a Katy.

Katy sabía perfectamente las consecuencias, y no se negaría, por el simple hecho de que estaba en su poder ayudar a muchas almas inocentes, que serian sentenciadas sin pecado alguno, porque no forma parte de su ser dejar sufrir a inocentes, tomo aire para hablar, y encaró a aquella sombra, mirándolo sin titubeos, segura de cada palabra que iba a salir de su boca, una imagen de su pequeña hija paso por su mente, haciendo que sus ojos se llenaran de amor, solo por un segundo, para luego volver a ser completamente fríos y sobrios. —Quiero diez años más— Dijo, y recibió como respuesta instantánea una sonora carcajada sin gracia y algo amarga e incrédula de aquella sombra, que calló al momento de sentir la mirada irritada de Katy, cuyos ojos dejaron de ser negros, para dar paso a un fuego blancuzco que brillaba en su iris, cuyas llamas hicieron retroceder a la sombra.