Summer's Wishes. [[Lashton]]

Capítulo//11

Los próximos dos días luego de la fiesta fueron algo raros. Quizá había sido por la dura ingesta de alcohol en Luke que le había hecho olvidar casi todo lo que había pasado o quizá solo había preferido hacer caso omiso a los recuerdos. Deker se encontraba empacando sus cosas en una maleta de oscuro cuero marrón. Doblaba sus remeras, y algunas de Luke que le había tomado con antes permiso y acomodaba sus cosas sin decir palabra alguna. Luke se encontraba de espaldas contra el marco de la puerta, con los brazos cruzados, mirando como su primo empacaba sus prendas de ropa.

—Mhmmmm. — Musitó Luke haciéndole notar su presencia a Deker. —

— Ah, hola. ¿Cómo estás? Del tropezón, hablo. — Preguntó su primo sonriéndose a medias soltando una risa débil sin dejar de mover sus manos doblando ahora unos jeans poco ajustados a comparación de los que Luke solía llevar pegados a su cuerpo. —

— Bien. Más o menos. — Reformuló mientras llevaba su dedo índice a la cabeza tocándose la marca que se había hecho al caer de mala manera en la piscina. — ¿Te vas hoy? — Preguntó Luke. —

— Sí. — Afirmó su primo guardando la última remera sin mangas en la maleta y cerrándola a apretujos. —

— Ah. Buen viaje. — Se limitó a desearle a su primo. No iba a echarlo de menos, no es como si lo necesitara o se hubiera encariñado en unos pocos días compartidos. Pero si es cierto que la casa se escucharía algo vacía sin los gritos de las fiestas y las personas que traía Deker a la casa sin su previo permiso, cabe en cuenta agregar. —

— Gracias. — Sonrió torpemente su primo sentándose arriba de la maleta. — ¿De qué vas? — Preguntó con la sonrisa aún esbozada en su rostro, ahora con intenciones más maliciosas. —

— ¿De que voy con qué? — Preguntó Luke arqueando una ceja algo desconcertado ante la pregunta de su primo. —

— De que vas con Ashton. — Atacó Deker. —

Las piernas de Luke se tensaron y sus manos se hicieron un puño. La forma repulsiva con la que se había referido su primo le causó un ardor dentro del cuerpo.

— ¿Cómo que de que voy? ¿A que te refieres? — Preguntó Luke tratando de que el ardor no se le subiera hasta la cara y se mezclara con sus palabras. —

— No sé.. tú y él. Dijeron que te vieron salir del baño y unos minutos después a él. — Comentó con desagrado. —

Luke abrió sus ojos tan grande como pudo. Pensó en lo idiota que había sido Ashton en salir minutos después de él, de forma tan rápida y evidente. Pensó en quién los abría visto. Si dos personas o tres, quizá cuatro, o una multitud de borrachos colados por los pasillos.

— ¿Qué cosas dices? ¡Que ridiculez! — Se defendió Luke. — Se habrán confundido. Pasé toda la fiesta abajo, ni siquiera subí a mi habitación.. — Mintió. —

— Bueno.. si es que tú lo dices. — Dió por terminado el tema Deker. Si bien, le causaba bastante desagrado que hayan dicho eso de su primo, y de solo pensarlo, bien sabía que Ashton tenía un historial bastante grande con los chicos. Y también sabía que lo que más le gustaba era meterse con chicos jovenes, y rubios. Al menos eso le dió por entender en los pocos viajes que habían echo juntos. Se levantó de encima de la maleta y se encogió de hombros.

Luke se sintió relajado. Claramente no pensó que Deker sabía más que él de Ashton. Unas horas después, despidió a su primo y cerró la puerta, echó llave. Se tiró en el sillón, y se quedó en silencio. Extrajo su celular del bolsillo moviéndose un poco para sacarlo de sus ajustados jeans. Y revisó su extensa lista de contactos.

Miriam, Chels, — Encontró a Beatriz — Thomas, Ryan, Calum. — Extraño nombre, pensó. — Siguió pasando su dedo por la pantalla táctil hacia abajo. — Kelsey, Tim, Michael (Calum) — Se preguntó por que el contacto de "Michael" estaba agendado con un "Calum" entre paréntesis. Pero de todas formas lo dejó pasar. Toda gente que por supuesto, Luke no conocía. Ashton. Detuvo su dedo. Inspeccionó el contacto, el número, lo releyó tantas veces como para aprendérselo hasta de memoria. Dudó. Pasó su dedo por encima de la tecla para llamarlo pero lo sacó cuando casi lo apretó sin querer. Hacía dos días, ya casi tres, que no sabía nada de él. No le había marcado para saber como se encontraba de su tropezón. Pero ni siquiera tenía su número, pensó un momento después. Vaciló algún tiempo más, y inició la llamada decidido. Más o menos.

El tono sonó cuatro veces antes de que lo atienda Ashton.

— ¿Hola?

— Luke permaneció en silencio. Todas las palabras y cosas que habría querido decirle, una explicación de por qué lo llamaba, todo se había ido. Todo en blanco. —

— ...¿Hola? ¿Quién habla? — Volvió a preguntar Ashton impacientándose. —

— ¿Ashton?— Susurró Luke. Pero no a propósito, así le salió. —

— ¿Luke? — Dudó Ashton. Acertando, conocía la voz de Luke. —

— Sí..soy yo. Mira, es que me confundí de número. — Se aprontó a decir antes de que pudieran intercambiar alguna palabra. —

— ¿Cómo tienes mi número de todas maneras? — Preguntó Ashton. —

— Ah, verás.. Fue Deker. Él, necesitaba los contactos, y mi celular, pero yo no sabía, sabes, eso fue, fue su culpa. No tenía idea de que, bueno, tengo muchos contactos que no conozco en mi celular ahora. — Se molestaba Luke en dar explicaciones para todo, pero así era cuando se ponía nervioso. —

— Mh, claro. — Asintió el rizado con algo de desconfianza ante la mala explicación de Luke. — Como sea. ¿Querías algo? — Preguntó. —

— No, como te decía, me equivoqué de número, quería llamar a otra persona.

— ¿Otro Ashton?

— No. Digo, sí. — Las mentiras siempre se le daban mal. —

— Ajá..bueno, en ese caso, adiós. — Dió por terminada la llamada Ashton, cortándole. —

Luke sostuvo el celular en su oreja. Aún después de que Ashton le cortara. Lo alejó y miró la pantalla. Y volvió a llamar, sin saber bien lo que hacía.

Tres veces antes de que Ashton atendiera esta vez.

— ¿Hola?

— Hola.

— ¿Qué quieres, Luke?

— No te llamé sin querer, mentí.

— Ya lo sé.

— Quería saber como estabas. Supongo. Espera. ¿Cómo que lo sabías? ¿Cómo sabías que te mentí? 

— Luke, eres patético para mentir. ¿Nunca te lo han dicho?

— Mh, no.

— Pues lo eres. — Ashton se río apenas, como para que Luke no le escuchara. —

— Gracias.

Luke cortó la llamada esta vez, y se sonrió. Era la llamada más extraña que había tenido, pero hacía días que no se reía de verdad, sin estar borracho. Se acomodó más en el sillón, hacía calor. No necesitó taparse, y poco rato después, se durmió. 

Buenas, buenas. ¿Ya ven que estoy actualizando seguido? Estoy teniendo tiempo, sí. No se olviden de comentar, votar, no sé. Las quiero un buen, xx.