Uchiha enamorada (Gaara)

matame

Irani se negó rotundamente a usar chakra de su bijuu pues creía que si la capturaban seria mucho mas fácil y rápido extraer el bijuu.

Irani utilizó el Amaterasu en todos los Pain que quedaban menos el principal pues su chakra había llegado a su limite obligandola a desactivar su sharingan.

—Joder—susurró viendo que ya estaba derrotada.

Por entre las hojas de los arboles vio a la mujer con el halcón en el brazo, le dirigió una mirada a Irani la cual asintió levemente, usar ese Genjutsu con Konohamaru antes le había afectado y usar el Amaterasu y Susano'o también así que supuso que ya no había vuelta atrás, ya estaba pérdida.

Irani con su velocidad habitual corrió hacia el Akatsuki e intentó golpearlo pero fue imposible ya que el la elevó un par de metros y luego la soltó haciéndola caer al suelo con una fuerza impresionante.

En ese momento solo pudo pensar en el perdón, el perdón que le pediría a todas las personas que amaba algún dia, pedirle perdón por se tan terca y obstinada a Kakashi, pedirle perdon a Naruto por no verlo como Hokage, pedirle perdon a Sakura por no formar parte del clan cuando ella se uniera, pedirle perdón a sus padres por no poder cuidar bien de sus hermanos, pedirle perdon a Sasuke por no poder salvarlo, perdon a Itachi por no poder haber recreado el clan, perdón a la abuela Tsunade por hacerle salir canas, perdon a Hinata por dejarla ahí, perdón a Gaara por no amaro lo necesario. Gaara, se sentiría decepcionado de si mismo si eso sucedía, no podía dejar que eso sucediera, no podía dejar que Gaara se sintiera culpable por toda su vida.

Licuo esos pensamientos en su mente y trató de levantarse, le sangrada un corte en su mejilla y la boca, sentia como si le dieran con piedras en la espalda y luego le lanzaran llamas a la misma, le ardía como el mismísimo infierno todo el cuerpo pero eso no le detendría.

—no me rediré—dijo Irani levantándose con dificultad—no dejaré que me lleves.

Pain la miró neutral y luego la levantó denuevo, le azotó contra el piso causando un gran revuelo de polvo en el lugar.

Hinata había comenzado a despertar en el momentos que Irani calló al suelo puesto a que solo veía polvo. Cuando logró sacar el metal que la atravesaba activó el Byakugan y miró a su alrededor en busca de Irani, la encontró en el suelo, herida y con una cantidad minúscula de chakra.

—Irani—susurró.

Se levantó tambaleante poniendo una mano en su herida mas profunda dejando así que su mano se mancha con sangre.

—Hinata—dijo Irani al verla frente a ella.

Hinata la miro de reojo y sonrió.

Pain logró verlas y se sorprendió de ver a Hinata en pie pues el golpe que le había dado antes (según el) la mataría.

—no dejare que le sigas haciendo daño...—dijo Hinata limpiando un hilo de sangre que corría por la comisura de su boca.

Hinata al ver que solo quedaba uno de los Pain sintió un poco de esperanza y a la vez pena, Irani los había derrotado a todos sola siendo que ella estaba ahí para ayudarla.

—veo que denuevo estas acá—dijo el extendiendo su mano—será mejor sacarte del camino.

Irani se levantó tambaleante a las espaldas Hinata y luego avanzó hacia un lado de ella arrastrando los pasos.

—vamos—dijo—juntas.

Las chicas corrieron hacia el, Irani formó un chidori, no usaba nunca esa técnica pues le hacia recordar mucho a su hermano(se la había copiado con el sharingan) pero en situaciones como esta lo único que no podía hacer era ponerse nostálgica con Sasuke.

Irani era rápida por lo que solo bastó un segundo para que la mano de Irani ya estuviera en el hombro de Pain. Hinata por su parte le dio uno de sus milagrosos golpes en el pecho causando que el Akatsuki escupiera sangre.

El hombre las expulsó a ambas hacia atrás haciendo que chocaran con los arboles que habían ahi.

—Joder—susurró Irani al ver que el no estaba nisiquiera cerca de ser vencido.

Hinata por su parte se preocupaba por Irani, no podía dejar que la capturaran, no así de fácil.

Irani apareció detrás de el pero el fue mas rápido y la tomó por el cuello, la lanzó hacia donde estaba Hinata la cual al verla tirada junto a ella se llenó de rabia.

—Hinata—dijo Irani levantándose.

El hombre puso atención a la conversación que se estaba formando entre las chicas.

—Hinata...—los ojos de Irani se llenaron de lágrimas— Hinata matame.