Pasé tres largas horas decidiendo si escribiría o no. ¿Qué pasaría? acaso...
¿El libro me respondería?
No, eso no era posible. Y como no lo era, entonces podía escribir cualquier cosa. Aunque aún estaba la duda, entonces, ¿Escribiría un hola?
¿Debería escribir un hola?
Era tan solo un libro. Sin autor, sin año de escritura, ni imprenta. Tan solo un libro vacío. Leer la segunda obra de Rowling me estaba afectando. Ahora me sentía el pequeño niño mago cautivado por un libro misterioso.
Incluso así, nadie lo sabría. Nadie respondería. Podía ensoñar con lo que quisiera.
¿Debería escribir un hola?
Me decidí por algo con más temperamento.
-¿Quién-dudé, al trazar mis letras-o qué eres?
Nada apareció. Leer tanto me estaba afectando.
Más vi con horror, que se escribía algo.
-Soy...la dama de este libro.
Escribía con una hermosa letra cursiva. O me estaba volviendo loca o tenía algo sobrenatural frente a mis ojos.
Al final, no sé si fue que aquel libro me atraía, o fue mi simple curiosidad ante lo nuevo y desconocido, pero seguí escribiendo.
-¿Por qué te metiste en mi bolso?
-No me metí, tu alma literaria me llamó.
-¿Mi alma literaria?-no pude evitar preguntar.
-Sí, la oscura alma afligida que se encuentra dentro de ti, me llamó-cesó de escribir por varios minutos-es extraño, he andado en tantas manos y eres la primera que escribe.
Paré de escribir.
Yo debía estar delirando. Nadie en su sano juicio me creería que un libro estaba hablando conmigo y mucho menos que una persona muerta estaba ahí.
Me sentí tonta hasta de mis pensamientos. Dejé el libro aún abierto y a pesar del dolor, bajé a la cocina por un poco de agua.
¿El sufrimiento de mi caída había sido tal, que me hacía alucinar?
-¿Qué sucede Elisse?-preguntó Tim, curioso de la cara pálida que traía.
-No es nada-sonreí falsamente.
-Ah...-sí, de seguro no me creía nada-¿Vienes a ver pelis conmigo?
-No...-vacilé-aunque, sí, la veré.
Cualquier cosa sería mejor que subir y encontrarme con un libro que escribía.
Mi hermanito veía el hombre manos de tijeras. Si él creía que aquellas raras manos era algo insólito, no imaginaba las extrañas cosas que yo acababa de conocer.
-Me gusta la película, quien la hizo debe ser grandioso-exclamó alegre.
-A mamá le encanta, por eso te pusieron así, por Tim Burton-expliqué.
-¿Tim Burton?-interrogó-¿Quién es él?
-Un director y productor de cine -conté mientras miraba la película y me escuchaba- El humor negro, la fantasía, lo romántico son el sello de identidad de muchas de sus películas, los personajes son generalmente seres marginados o excluidos de la sociedad.
-Es mi productor favorito-susurró admirando el televisor.
-Hey, recién sabes que existe-regañé-no puede ser de tu admiración tan pronto.
ESTÁS LEYENDO
El alma de una suicida
Fiksi UmumA sus 19 años creía que su aburrida vida solo la podían cambiar los libros, que aquellos eran los únicos que le permitirían soñar y divagar con cosas extrañas, pronto se daría cuenta...que no estaba del todo equivocada. Prefacio Y entonces leí la in...