Efecto Mariposa: Una historia de dos [PAUSADA]

Capítulo 5: ¡Por encima de mi Gema!

Holoooooooo *mete la cabeza en el cuarto como retarder* OH YEAH!! ¡¡YA VOLVÍ BITCHES!! Vale, ya tenéis vuestro capítulo; por favor, bajad las armas *bajan las armas con cara de desconfianza* Sori por no actualizar >-< ¡En serio, lo siento! Pero es que no me inspiraba ·-·' Además, he publicado dos en el mismo día B) Así que aquí está (disfrutad!):

Lapis P.O.V.

Era un edificio enorme de estilo victoriano. Tenía tres plantas, y en cada una había tres terrazas de hierro negro. Llevándole la contraria a los muchos (muchos) clichés que mis padres me habían inculcado sobre la gente de Homeworld, como por ejemplo que eran todos unos bordes (bueno, no iban muy desencaminados) y que para nada les gustaban las cosas bonitas pero inútiles; la mayoría de ellas tenían unas cuantas jardineras con un montón de flores de colores colgando, y un poco de hiedra se enroscaba por la fachada.

-Yo... -dije-. Yo... A mí... ¡¡¡ME ENCANTA!!!

-Me alegra que te guste, porque aunque no te gustase te tendrías que aguantar. ¿Entramos, que me estoy muriendo de frío? -dijo ella, que ya estaba en la puerta del portal. Yo me quedé un momento más mirando, y cuando quise darme cuenta, ella ya iba a cerrar para dejarme fuera; así que corrí a la velocidad de una fujoshi hacia el yaoi (dejando, obviamente, a Usain Bolt a la altura del betún) y la abrí de una patada. Peridot puso cara de fastidio al ver que su plan no había resultado. El interior de la casa estaba decorado como una hipster como ella lo tendría: todo forradito de libros.

-Sinceramente, no soy muy lectora, pero si se trata de manga, entonces me apunto -comenté dejando la bolsa en el suelo. Ella se volvió a verme con cara de espanto.

*Mientras tanto, en la cabeza del Dorito*

Está todo en siencio porque todas tienen la boca abierta de par en par.

Todas: ¡¿PERO CON QUIÉN CARAJOS ME HA TOCADO VIVIR?!

-¡¡¿PERO QUÉ...?!! -grité cuando cogió un cojín y me lo tiró con fuerza a la cara-. ¡¿Pero a ti qué te pasa?!

-¡No se te ocurra volver a decir eso en mi presencia! -dijo mientras me señalaba con un dedo acusador.

-¿Qué pasa, eres anti-otaku? -dije sobándome la cara. Cuando le apetecía podía tener mucha fuerza.

-¿"Otaku"? ¿Qué es eso? -preguntó desconcertada. Abrí los ojos como platos.

-Cuánto tienes que aprender, 'ja mía, cuánto tienes que aprender... -le di una palmadita en el hombro.

Peridot P.O.V.

Ahora me he quedado con las ganas de saber qué es "otaku". Lapis se acercó al recibidor, donde tenía un cuenco con un montón de propaganda que me mandaban. Cogió uno de los papeles, sacó el teléfono y llamó.

-¿A quién llamas? -pregunté desde la habitación mientras me cambiaba.

-A una pizzería -me respondió. Salí corriendo, extrañada.

-¿Tú comes?

-Sí, ¿tú no?

-No, qué raro -empezó a reírse. De verdad que esta chica es extraña.

-Me hace gracia lo que acabas de decir, porque eso mismo en la Tierra sería declararte anoréxica.

-¿Y eso qué es? -Dios, me sentía como una verdadera retarder, haciendo tantas preguntas (Nta: un poco lo que es. TURN DOWN FOR WHAT *Ninoninininonino*).