Crazy in Love - Calum Hood {EDITANDO}

Capitulo 9

- No recuerdo haberte dado permiso para salir con este chico, Kate.

Las palabras de mi padre eran serenas, podría decir que lo estaba llevando de una manera tranquila y paciba, pero existe algo llamaod contanto visual, que si no fuer por ello, no me daría cuenta de que en verdad esta muy molesto, cruzo los brazos esperando una respuesta.

Senti la mano de Calum estrujando mi mano para después soltarla y caminar despacio hacia donde estaba mi padre. "No lo hagas, por favor. ¡No lo hagas!" Repetia una y otra vez en mi cabeza como si eso fuera a empedir que Calum luciera como aquel chico que mi padre odia.

- Buenas noches , señor Dolvet. – Excelente, ahora lo odiara. Dije al escuchar las palabras de Calum, pasando mis manos sobre mi cara como si quisiera huir de esta escena. – Soy Calum Hood.

- Mi apellido es Kulkarni. Mi esposa y yo nos divorciamos hace tiempo.

Calum me volteo a ver con el seño fruncido, abriendo y cerrando la boca de manera vacilante, queriendo decir algo pero no tiene idea de qué.

- Yo... Yo lo lamento señor. – Sin apartar la vista de mi por unos segundos para regresar a ver a mi padre.

- Kulkarni.

- Si – Se aclaro la garganta soltando un breve suspiro. – Lo lamento.

- Buenas noches.

Mi padre se dio la vuelta y entro a la casa, dejándonos a Calum y a mi a solas. Calum se dio vuelta sobre sus pies y se dirijio hacia mi, se quedo parando frente a mi, esperando a que yo dijera algo pero no se que decir, tenerlo tan cerca, viéndome fijamente a los ojos, sin decir ni una sola palabra hacia que me puciera nerviosa, no sabia que hacer. Aun con el seño fruncido, se relamio los labios y por fin dijo algo.

- ¿Cuándo pensabas contarme?

- ¿Contarte qué?

- Que tus padres están divorsiados.

- No crei que era algo importante o que debía decirte.

- ¿Importante? Claro, quede en vergüenza frente a tu padre. Debiste reeconsiderarlo al pensar que podía pasar algo como lo de antes.

Dijo un poco alterado soltanto esta vez un largo suspiro.

- Tu padre me aterra.

Y si, esas fueron las palabras que hicieron que soltara una gran carcajada.

- ¿De qué te ries? No me digas que eres de las personas que en situaciones comprometedoras y serias te dan ataques de risa.

- No, no lo soy. – Dije tomándolo del hombro, sin parar de reir. – Pero debiste ver tu cara patética de preocupación. Fue lo mejor para terminar este dia.

- Si, burlate lo que quieras.

Respire hondo para tratar de traquilisarme, bajando la cabeza para evitar ver a Calum y no soportar reirme de nuevo al recordar su gran y patética cara.

- Oye, deberías entrar o tu padre me matara. – Dijo levantando mi rostro con sus dedos para verme directamente a los ojos. -

- A la que matara es a mi. A ti no pasa de que te odie por recordarle a su ex esposa.

- De acuerdo, ahora entra. Fue divertido.

Dijo soltando una pequeña risa y bajando la vista por unos segundos. Me aclare la garganta y aprovechando la escasa distancia que teníamos entre ambos, me acerque y le plantee un beso en la mejilla.

- Gracias, fue una noche linda y agradable.

Parecia como si le hubieran hechado una cubeta de agua helada o como si hubiera visto un fantasma porque se quedo completamente estatico, solo observándome fijamente. Le pegue en la frente para ver si de ese modo reaccionaba y dio efecto, pero a la hora que reacciono parecía como si regresara de sus pensamientos.

- Tonto. – Dije burlándome de él. – Nos vemos, descansa.

Camine haciéndome a un lado de Calum, dio un par de pasos y me tomo del brazo antes de que avanzara mas, voltee hacia dirección de él y note que no estaba observándome.

- Gracias por aceptar.

Dijo sin voltearme a ver, no había nada de vasilante en esa frase, no parecía una broma.

- No fue nada.

Sonrei a pesar de que no me veía y pocos segundos después de mi respuesta, solto mi brazo. Sin decir absolubtamente nada. Camine de nuevo hacia la entrada de mi casa y entre cerrando la puerta, dejándome recargar en ella, tratando de encontrar algún significado para lo que acaba de pasar y por que sonrí ante algo tan común. Pero esa nube de pensamientos se esfumo cuando escuche a mi padre en la cocina moviendo trastos. "La guerra acampal se acerca" Dije en voz baja, pensando en lo que me esoeraba al entarar a la cocina.

Camine por el pasillo hasta llegar a la cocina y vi a mi padre cocinando lo que parecía ser huevo.

- Lo lamento.

- Que yo no viva en esta casa, el que tu madre y yo nos hallamos separado y que ella este de viaje no significa que puedes hacer lo que quieres. Deberias respetarnos y minimo avisar.

Dijo dejando de mover el huevo revulto, apagando la estufa y volteando hacia mi.

- Se que te sabes cuidar, de que eres mayor de edad pero solo quiero tu bien, no quiero que arruines tu futuro y mucho menos por un chico.

- Papá, descuida, nada de eso pasara, tengo en mente que es lo que quiero y nada ni nadie se interpondrá en ello para que lo cumpla. Ademas, sabes que no soy la típica chica que cae tan fácil ante un chico.

- Te pido que seas responsable y consiente de lo que haces, no que pases sola toda tu vida.

- ¿Quién dice que estare sola?

El sólo se limito a sonreírme y se acerco hasta mi para rodearme con sus brazos.

- Quiero que seas feliz, Kate.

- Lo soy papá, aquí y ahora, contigo y con mamá.

- ¿Y Frank?

- Frank es un idiota.

Se rio un par de segundos y me planto un beso en mi frente.