◇Say Something◇(Thomesa)

¿Qué demonios es eso shank?

-De acuerdo, si no quieres que la ofenda , tendrás que borrarme de tu lista de amigos shank - suspiró Minho con fuerza -No creas que no me e olvidado de lo que le hiciste a Newt-

Y se me destruyó el corazón por completo .

Le conté a Minho sobre eso , unas semanas después de llegar aquí.

Casi pierdo su amistad por esa razón y ahora con esto. Me tomaba muy encerio la amenaza.

-Vale , solo te pido respeto- estaba algo enojado. Nadie se metía con Teresa.
Pero tampoco, no quería perder a Minho , mi mejor amigo , o al menos uno de los pocos amigos que me quedaban.

-Shank ¿de verdad la amas? - puso cara de seriedad, mientras cruzaba los brazos y me miraba con rabia pero a la vez gentileza.

-¡Si! O al menos eso creo yo- no pude contenerme y sentía como mis mejillas se coloraban.
Minho lo notó y se dio cuenta de que decía la verdad.

-¡Pero ya dejemos de hablar de eso ¿vale shank?-decidí no darle importancia a sus absurdos comentarios.

-De acuerdo -

-Mejor dime ¿qué paso en el Laberinto? - estaba mas curioso de lo normal
¿¡pero quien no lo estaría si ve unas demoniacas huellas del tamaño de dos de sus colosales zapatos!?

Minho se calló por un minuto.

-Había dos tipos de huellas, de el gigantesco perro que estaba en cuando apareció la traidora- me enoje ante lo que dijo pero quería dejarlo terminar -Y de unos pollos o aves del mismo tamaño que las del perro, sin duda gigantescas- habló ahora mas serio.

-Tendré que verlo por mi mismo- asegure dando unos pasos al frente .

-¡Woww tranquilo shank!- me detuvo dándome un empujón. Era mucho mas fuerte que yo así que no podía darle batalla.

-¿Qué pasa Minho? Soy un corredor , tengo derecho de ver esto- reproche sin duda alguna, esto era mas que injusto.

-Nadie a excepción de Brenda y de mí tiene derecho a entrar ahí otra vez - me volvió a dar un leve empujón.

-Pero...Minho ¿qué carajos tienes en la cabeza hoy?-

-Demustramelo- me dijo con voz grave y me dio otro empujón.

-¿Demostrarte qué? - estaba confundido pero le conteste igual de fuerte que él a mí.

- ¡Que puedo confiar en ti!- parecía dolido.

-¡Ya asesinaste a dos de mis amigos , no permitiré que por confiar en ella mates a mas! ¡¿qué no lo entiendes?! - estaba muy dolido , demasiado , parecía que no era él. Había algo que no me estaban diciendo.

-¡Minho!- le grité y él parecía estar en otro mundo, simplemente se perdió.

-¡Escuchame tu sabes de que habló! No me has dicho algo, por eso no me permites ir- entonces él volvió a mirarme, al parecer ya había regresado, volvió a aterrizar.

-Y si lo hiciera, de igual manera no vuelves a entrar al Laberinto- sonó duro y fuerte. En fin cuando me asignaron el cargo para liderar sobre este lugar no lo acepté porque me recordaba las pruebas, especialmente a Teresa. Así que se lo deje a Minho.
Y según se acordó que nadie desobedecería a el líder. Y que haríamos todo lo que dijiese.

Y la pena por hacer algo prohibido era muy alta.
La pena era irte de el Laberinto y quedarte en las instalaciones de CRUEL o lo que quedaba de ellas. Pero al cruzar por las ruinas colisionadas se encontraban los cranks aún intentando entrar a el Laberinto. Era un riesgo de posible muerte.