Abrí el mensaje y sonreí aún más al leer lo que decía:
-Hey, feliz año nuevo espero y no estés ebria y tirada en el suelo, ya que tenemos que estar preparados para la primer gran fiesta del año del grupo (la fiesta de Christine) y vamos a embriagarnos por eso tienes que estar reservándote para ella. I love you.
Ian es mi mejor amigo, y sí... es gay.
Si tan sólo me pusiera a pensar cómo es que lo conocí y la persona en la que se ha convertido para mi hoy, sería casi increíble. Ian es, aparte de Katherine, mi apoyo y consuelo, mis mejores amigos son ellos dos.
A Katherine le conozco hace 16 años, desde que estábamos en el jardín de infantes y fue ahí donde empezó nuestra amistad, sin embargo, decidió cambiarse de casa a la edad de 12 años; no muy lejos, pero si lo suficiente como para tener que recorrer 1 hora de mi casa a la suya sólo para vernos y hacer nuestras tonterías usuales.
¿A Ian? Bueno, podría decirse que él es una obra de Katherine. Cuando Kathe cumplió 16 años hizo una gran fiesta con sus amigos de la nueva escuela (lo digo así porque ya no era la misma escuela en la que entramos juntas) y fue ahí donde conocí a Ian.
Desde el principio al presentármelo como uno de sus mejores amigos de la escuela, pude darme cuenta de porqué lo escogió; es un chico simpático... guapísimo, para ser franca, sin filtro para hablar y aparte, demasiado divertido. Desde ese día nosotros no dejamos de contactarnos y salir como nuevos mejores amigos, claro, incluyendo a Katherine. Desde ahora éramos nosotros tres para todo. Hasta el día de hoy, que tenemos 21 años.
-Eres un tonto, obviamente no estoy tirada en el suelo... aún. Jaja obviamente, este será nuestro año, mejor que todos los demás, ah! Y claro que estoy preparada, como siempre. Haha I love you too, babe <3 -le contesté.
-Mañana paso a tu casa, estoy aburrido, Kathe aún no regresa de sus vacaciones en Hawaii, haremos algo mañana, así que recupérate pronto de los desvelos. See you
-Seguro jefe -le respondo sarcástica, poniendo así punto final a la conversación.
***
Horas más tarde, mi familia decidió dejar mi casa y retirarse hacia la suya, la verdad es que ya nos hacía falta algo de descanso... pero claro, mis padres decidieron recoger todos los destrozos de la fiesta de año viejo, así que si la familia se fue a las 6 p.m. yo me metí a la cama a las 10 p.m. después de haberme dado un baño y cepillarme los dientes, decidí no cenar, pues estaba más asqueada de tanto comer en la fiesta, que hambrienta.
Tan cansada estaba, que al caer en la cama caí en un sueño profundo y no supe más de mí.
Pues aquí está el segundo capítulo de la historia.
Saludos y gracias si es que estás leyendo la historia.
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Obsesiones Enfermizas
أدب المراهقينSINOPSIS Todo en mi vida iba bien: amigos, fiestas y escuela hasta que llegó mi primer novio del año; el cuál, después de un no muy largo tiempo hizo que mi vida y la vida de terceras personas cambiara. . . aunque no sé si para bien o para mal. En t...