Lo volvieron a hacer, como de costumbre, me dejaron. No sorprendí de que lo hayan hecho pero, lo último que se pierde es la esperanza, y tenía una mínima esperanza, que rogaba que ellos estuvieran conmigo más de 3 horas, sin contar las horas que dormían en mí casa.
No estaba triste, sino acostumbrada. Creo. Así que decidida a terminar mi noche sola, pensé terminarla de la mejor manera, agarre una botella de vodka de papá más un pote de helado y subí a mi habitación a ver alguna película para llorar hasta quedarme completamente dormida.
Elegí la película The Notebook, una de las pocas películas que me estremecían y me hacía derramar lágrimas por doquier. Comencé a ver la película mientras disfrutaba del helado hasta que sonó mi celular con mensaje de mi madre.
- Te queremos Hellen! - reí sarcásticamente en mi mente, eso era absurdo. O sea, no negaba que no me quieran, si no que nunca me lo demostraron en absoluto.
Mis padres prácticamente viven trabajando, solo compartimos un par de horas a las semanas, que solamente se basan en descansar o salir por algún lado. Ambos eran médicos, mi papá especializado en Cirugías neurológicas y mi mamá era cirujana pediatra, tienen una gran trayectoria, varías personas me habrían dicho que ellos eran unos de los mejores médicos del país y que realmente tendría que estar orgullosa de tenerlos a ambos como padres. La gente a veces es tan ingenua.
Mis padres se casaron a los 22 años y ambos se propusieron a terminar su carrera y tener un trabajo realmente honorable, nunca estuvo en sus planes tener un hijo, ni siquiera querían antes de pisar los 35 años; pero por una especie de milagro o mejor digamos que fue error de cálculos en anticonceptivos, llegue al mundo, cuando ellos apenas tenían 26 años. Si, prácticamente les arruine sus planes, la mayoría de sus doctorados, la vida laboral en definitiva. Aunque nunca me lo mencionaron de esa forma, yo lo sentía así.
Ellos se conformaban con verme que estaba en casa mientras ellos estaban acá y en el tiempo que los veía solamente me dejaban dinero, me preguntaba como andaba y si necesitaba algo.
Yo no me quejaba, tenía todo lo que quería en mi casa. Toda la porquería de tecnología que se actualizaba, ellos lo compraban (nunca usaron ni la mitad de las cosas), tenía bastante alcohol porque mi papá tenía la idea de sentirse más culto con botellas de vino o tequilas y toda clase de bebida exótica importada, aunque no duraban ni un mes porque entre mis amigos y yo, se los terminábamos completamente. Y, más allá de todo eso, estaba completamente sola, y yo amaba la soledad; no necesitaba nada más que películas, libros o, a veces, a mejor amiga.
Me levante de mi cama al haber terminado la película, me dirigí a la de la cocina por un vaso con agua. Me lave la cara en el baño tratando de sacar un poco el maquillaje del día corrido a causa de la película, lave mis dientes y luego a mi cama. Cerré mis ojos y me sumergí en un sueño profundo.
Hola a todos! Bueno, primer capitulo algo demasiado tranquilo como para empezar, lo mejor esta por venir... Les cuento que esta es una historia que escribí hace bastante y me base en varios aspectos que viví. Paso a comentarles que hasta me amenazaron para subirla -.- jajaja. Ya mañana subiré el segundo capitulo muchísimo más interesante, en cual voy a indagar más en la historia de Hellen y vamos a encontrarnos con Kyle <3 espero que amen y disfruten esta historia tanto como yo lo hice al escribirla.
Nos vemos :)
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My Propeller
Teen FictionHellen no tiene muchas esperanzas de que su forma de vida cambie, no tiene nada ni nadie que la motive a realizar algún cambio, nada que la propulse a cambiar. No tiene metas, proyectos o algún objetivo claro marcado que la ayude a asentar cabeza. E...