Las tardes entre amigos siempre pasan rápido y cuando me quiero dar cuenta ya es Lunes. Jodido Lunes.
Me levanto de mi bonita cama y voy a la cocina a preparar el desayuno para Julia y para mi.
Julia es un año menor que yo, es muy guapa, lleva aparato y siempre está pensando en porros. Ella trabaja en la típica tienda en la que venden cosas de cantantes y grupos, es por eso que siempre desayuno con una taza distinta. Hoy me toca la de Los Suaves y a ella la de Bob Marley.
-Buenos días.- dice al entrar por la puerta.
Sirvo los vasos con cereales en la mesa y nos sentamos. Me empiezo a reír.
-¿Qué?- pregunta.
-Tienes baba, ahí.- digo señalandole la barbilla.
Ella se encoge de hombros y sigue comiendo.
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Me aburro, mucho. Suele haber más personas en el bar.
Me pongo a limpiar las mesas cuando entran un grupo de chavales, entre ellos Xavi.
-Hermanita.- dice Xavi mientras yo sonrío y le doy dos besos. - Te presento, el es Marcos.- dice señalando a un chico alto, rubio y con aparato.- Y el es Ivi.- Ivi un chaval alto, fuerte y bastante mono, que tiene pinta de jugar al rugby.
Los saludo con dos besos a cada uno y se sientan en la barra. Les sirvo lo que me piden y hablamos un rato. Me fijo en que Marcos saca cartitas de Pokémon. Uuy.
-¿Cuántas tienes?, ¿tienes a Latios?, nunca me sale.- digo poniendo pucheros.
Noto como al chaval se le iluminan los ojos. Y me da una cartita, la giro y ¡LATIOOOOS!, sin dudarlo salto a abrazarlo.
Seguimos hablando hasta que marchan porque tienen que ir a entrenar. Rugby lo sabía.
Salgo a fumar un cigarro y pasa una kawasaki verde que ay. El conductor me mira y debe ser por la cara de autentica lerda que tengo mi mirando a tal preciosidad.
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Llego a casa tras el aburrimiento bestial en el bar salvo por la visíta esa.
Jul y yo cenamos viendo una película y pronto nos acostamos.
Estaba yo tan tranquila en el quinto sueño hasta que oigo mi móvil sonar, mierda.
-¿Qué?- pregunto borde.
-Marta, soy Xavi, estoy planenado hacer una cena, el problema es que no tengo casa...-
-Primero, la próxima vez que me despiertes a las tres de la mañana te parto la cara y segundo... ¡Claro joder, fiesta!.- exclamé.
-Graci...-
-Que te den.- y cuelgo.
Y ahora volver a soñar con Theo James.
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No soy la típica fresita.
Novela Juvenil-¡Largate de aquí, tú ya no eres mi hija!- hijo de puta. -¡Qué te den!- dije colgando la mochila al hombro y saliendo de casa.