Dos.

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-Te vamos a extrañar Bonnie.- dijo Brianna dandome un gran abrazo.-

-Yo tambien Bri! Ame estar con ustedes todo este año.

-Iremos a visitarte lo prometemos.-dijo Kendall.- Ten.-me dio un cuaderno.- Son todas las fotos que me pediste de nosotras.

-Las voy a a amar siempre.-dije dandoles a cada una un beso en la mejilla. Hoy era el dia. No podía echarme para atras, en serio necesitaba ver a mi mamá. A pesar de que era algo pesada y algo testaruda, era mi madre y la amaba. Entré al autobús y les tire un beso volador a las dos. El autobús arrancó dejándolas atrás a mis mejores amigas.

En el camino iba escuchando "Hello" de Adele. Me vinieron recuerdos acerca de la última noche en que estuve con... no importa. No es momento de mencionar su nombre.

-Disculpa hija.-dijo una anciana de unos setenta y pico de años tocandome el hombro. Saque mis auriculares.- Puedes prestarme un pañuelo?

-Claro, tenga.- dije acercandole mi pañuelo.-

-Gracias..- solo asenti y seguí hundida en mis pensamientos. Cerré los ojos, y me dormí.

-.-.-.--.-.-.-.-.-.-.-.-.-..-.--.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-

Narra Dylan.

Pasaron dos largos años. Años en los que extrañaba demasiado a Bonnie. Ya tengo 20 años y últimamente estuve trabajando en el negocio de mi padre que, desgraciadamente murió lo que me sorprendio un poco ya que era un hombre tan joven. Bueno hay que admitir que el tabaco no es la mejor compañía. Me heredó "Beagles" y unos cuántos millones. Increíble no? Pagué el tratamiento de mamá y luego me compré un nuevo teléfono. También compré un departamento y lo comparto con Charlie, mi única mejor amiga.

Como todos los dias, voy a visitar a Kali para ver si hay noticias de Bonnie. Le mandé varios mensajes pero ella solo contestó uno de cien "Quién eres"  Pero no le respondí. En fin, fui hacia casa de Bonnie y Kali me recibió con una sonrisa de oreja a oreja.-

-Hola Dylan! Pasa.-dijo Kali alejándose de la puerta e ir directo a la cocina. Se sentia tan vacía sin ella.-

-Sabes algo de...

-Bonnie?.-me interrumpió.- Vendrá por la noche. Se mudara de vuelta aquí.

-En serio?.- dije con una sonrisa en mi rostro.-

-Si, pero imagino que no querrá verte.

-Lo se.-dije desilusionado.- aún recuerdo lo que paso. Soy un maldito idiota.-

-Lo eres Dylan. Pero bueno, todos cometemos errores. Eres un ser humano.

-Pero es un error que jamás olvidaré..-dije sacandome mi chaqueta y dejándola en el respaldar de la silla. Nos quedamos hablando acerca de su trabajo y también del mio. Ganaba muy bien en el negocio familiar. Ella me comentó que su matrimonio no iba nada bien y decidió separarse de su esposo. Bonnie se puso muy triste cuándo se enteró de la noticia, que por eso viene aqui. Para acompañar en este mal momento a su mama.

Ya anochecio y era hora de irme. No queria que Bonnie tuviese una pésima bienvenida.

-Debo irme Kali, no quiero echarle a perder la felicidad de Bonnie.- Ella asintió y fui hacia la puerta. La abrí y me encontre con una Bonnie de pelo lacio, sus ojos delineados y un poco mas alta por los tacos. Me quede viéndola por largos minutos al igual que ella a mí.

Volviendo a El (Novela de Dylan O'Brien)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora