Capítulo 1: Primer Encuentro.

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—Bueno, estás lista ¿no? ¿Quieres que te lleve? —me preguntó mi padre ya que (como siempre) iba un poco tarde.
—Iré en mi coche —mi querido twingo color celeste me estaba esperando en el garaje— adiós papá, te quiero.
—Y yo a ti, adiós cielo.

🌙

Cuando llegué al instituto, me reuní con Lydia.
—¡Buenos días! —le dije con una sonrisa. Lydia me responde igual y vamos hacia dentro.
—...lo mejor que le ha pasado al pueblo desde el nacimiento de Lydia Martin —escucho decir a Stiles, un chico que desde que lo conocí está colado por Lydia. Pero la verdad es que creo que Lydia nunca se ha dado cuenta de su existencia— ¡Hola Lydia! Estás muy... —deja de hablar cuando ve que está demasiado lejos para oírle— dispuesta a ignorarme...—la verdad es que me da bastante pena—Hola Ella —dice con media sonrisa, esperando que yo también le ignorara. Pero debido a aquel plan de ser mejor persona del que os hablé y que no le hago mucho caso a esas cosas de chicas populares, algunas veces intento no ignorarle (venga Ella, es el primer día, sé amable).
—Hola —le dije sonriendo levemente. Pude ver que se sentía aliviado.
—¡Vamos Ella! —me llamó Lydia, que había seguido sin mí. Corrí hasta llegar a su lado y entramos juntas.
Estaba sentada en una postura poco adecuada (echada en la silla como una buena pasota que soy) cuando Lydia me llamó la atención. Resoplé y me senté derecha.
—Como sabéis anoche encontraron un cuerpo —comenzó el profesor, (por una vez ocurre algo interesante y yo no me entero)— la policía ya ha encontrado a un sospechoso, así que podéis dirigir vuestra atención al plan de estudios que tenéis en vuestros pupitres.
Cogí el papel que tenía delante para inspeccionarlo cuando Scott, el mejor amigo de Stiles que estaba delante mía, empezó a mirar hacia todos lados como buscando algo. Se gira hacia atrás pero en cuanto ve que soy yo se da la vuelta.
Volví a dirigir mi mirada a mi plan de estudios cuando entró el subdirector acompañado por una chica.
—Chicos, vuestra nueva compañera, Allison Argent. Que se sienta cómoda.
La chica, (bueno, Allison ha dicho ¿no?) se sentó al lado de Scott. Y sin decirle absolutamente nada a este, Scott le da un boli. Allison parece extrañada pero sonríe. Me deberían dar un premio a la más distraída. Después de esto dirijo mi atención al título "la metamorfosis de Kafka" escrito en la pizarra y a ese estúpido profesor.
Cuando salimos Lydia y yo fuimos a las taquillas a ver a Allison.
—Tu chaqueta es una verdadera pasada ¿compras aquí? —le dice Lydia a Allison.
—Mi madre me la compró en una boutique de San Francisco —responde ella.
—Y tú, vas a ser mi nueva mejor amiga—responde Lydia. Entonces carraspeo— después de ti Ella —rectifica sonriendo.
—Hola Allison, soy Ella. Y esta es Lydia.
—Hola Jackson —dice Lydia y besa a su novio.
—Y ese —digo señalando a Jackson— es su estúpido novio —Jackson me mira riéndose, debo admitir que puede tener sentido del humor de vez en cuando.
—Bueno, este finde hay una fiesta —dice Lydia.
—Sí el viernes por la noche, podrías pasarte —dice Jackson.
—Oh, no puedo estoy con la familia, pero gracias —Allison no parecía querer venir.
—¿Seguro? Irá todo el mundo después del partido —respondió Jackson
—¿Un partido de fútbol? —preguntó Allison.
—¡Lacrosse! —respondí animada— ¿quieres venir al entrenamiento? ¡Seguro que te encanta! —a mí me encantaba el lacrosse.
—Bueno...no sé —dijo Allison.
Al final Lydia enganchó a Allison para venir a ver el entrenamiento. Nadie se puede resistir a la insistencia de Lydia.
Nos sentamos muy cerca del campo en las gradas.
—¿Quién es él? —preguntó Allison, señalando a un chico de pelo castaño.
—¿Aquel? No estoy segura de quien es —respondió Lydia confusa.
—Es Scott, Scott McCall —dije mirándole.
—Ah —dijo Allison. Parecía algo interesada en él desde el principio aunque no dijera nada.
El entrenador pita para que comiencen a lanzar a portería. Menos Scott, que estaba de potero. La primera bola le da en la cara y se cae al suelo. Pero entonces empieza a pararlas todas.
—Parece que es bueno —dice Allison.
—Eso parece —responde Lydia asombrada.
Entonces Jackson se dispone a lanzar.
Parecía que todo pasaba a cámara lenta, Scott la paró como cualquier otra. Lydia se levantó y animó a Scott, igual que yo pero creo que a Jackson no le hizo mucha gracia.
A Scott le fue aún mejor en la eliminatoria, hizo un tiro tan espectacular que lo nombraron titular en el momento. No sabía que jugaba tan bien.

🌙

Hoy era la fiesta. La verdad es que no tenía muchas ganas de ir, me sentía algo mal, pero habría sido imposible convencer a Lydia. Además, sí que tenía ganas de ponerme mi vestido nuevo.
—Ella estás guapísima —dice Lydia arreglando un mechón de mi pelo que se había escapado de mi recogido— perfecta para conquistar a tu verdadero amor —hizo una sonrisa pícara.
—¿De qué hablas? Sabes que no me gusta nadie desde lo de Taylor —respondí decepcionada.
Taylor era el chico que me gustaba desde que tenía conciencia, era muy amigo mío y un día como cualquier otro salió del armario. Sí señoras y señores, era gay. Después de eso ningún otro chico ha llamado mi atención, o quizás he sido yo la que no ha querido fijarse en ninguno. Además Taylor y yo... no hablamos mucho después de eso.
—¡Venga ya! Olvida eso, cualquier chico del instituto saldría contigo. Solo que tú no quieres —dijo haciendo un puchero.
—Algún día —respondí riendo.

                                 🌙

Acabé bailando yo sola (es decir, estaba rodeada de gente que conocía y con la que me llevaba bien, pero no es lo mismo) ya que Lydia estaba con Jackson besándose como si no hubiera un mañana. Me estaba empezando a agobiar y marear así que intenté salir del montón de gente. No debería haber venido, el malestar que sentía antes de la fiesta se intensificó notablemente y casi no podía respirar. Cuando por fin logré salir caí al suelo en mis rodillas. Sentía que me ahogaba.
—¡Ella! ¿Qué te pasa? ¿Estás bien? —me preguntó alguien pero no le reconocí.
Entonces de repente la sensación comenzó a desvanecerse. Me senté en el suelo.
—Oye ¿estás bien? —esta vez le miré a la cara. Era Stiles— te he visto caerte al suelo y pensé que vomitarías, pero sé que no bebes alcohol.
(¿¡Que lo sabe!? ¿¡Cómo lo sabe!?)
Me ofreció su mano y me levantó, ahora estaba temblando.
—Gracias —dije cuando por fin pude articular palabra— no sé qué ha pasado, yo solo...—paré porque la verdad no tenía ni idea de lo que acababa de pasar— da igual. Oye ¿cómo sabes que no bebo? —pregunté con el ceño fruncido.
—Siempre que te veo pides ron con coca-cola, tiras el ron por ahí y echas la coca-cola antes de que alguien te vea —se ríe cuando ve mi cara.
No suelo hablar casi nada con Stiles así que esto era un poco extraño.
Entonces Scott pasó corriendo a nuestro lado. Y Allison detrás de él. Pensé que se habrían peleado así que fui a ver cómo estaba ella, me costó alcanzarla. Stiles siguió a Scott. Scott cogió su coche y se fue.
—¿Qué ha pasado? —le pregunté a Allison.
—¡Nada! Estábamos bailando y de repente estaba raro y se ha ido corriendo —dijo preocupada.
—Allison— la llamó un chico unos años mayor, de pelo oscuro y ojos claros —soy amigo de Scott, me llamo Derek.
Derek se ofreció a llevarnos y aceptamos. Primero dejó a Allison en su casa y yo me quedé con él en un silencio incómodo. Le di las gracias pero cuando me iba a bajar sentí...¿peligro?  (Sí, he dicho que lo sentí).
—No eres amigo de Scott ¿verdad? —le pregunté un poco asustada.
—Nos conocemos, y le estoy haciendo un favor —respondió sereno.
Le asentí y entré a casa. La verdad es que si no me hizo nada y fue amable para qué le voy a dar más vueltas.
Caí reventada en la cama, ni siquiera pensaba ponerme el pijama. Cuando estaba a punto de caer en el séptimo cielo, alguien llamó a la puerta de mi casa. Seguro que mi padre no lo habría escuchado (duerme como un tronco), fuera quien fuese era insistente, así que bajé a ver quien era. Por la mirilla vi que era Stiles. (¿Qué hacía él aquí?).
—Hola Stiles, ¿qué pasa? —dije al abrir la puerta.
—Estás...viva —dijo con la boca abierta.
—Sí, creo que sí —respondí riendo — estoy bien, lo de la fiesta fue...
—¿Te pasa más a menudo?— pregunta con el rostro un poco apenado.
—Eh...no, es la primera vez— respondo frunciendo el ceño.
—Bueno verás...cuando mi madre murió, empecé a tener ataques de pánico, y sé que tú casi no recuerdas a la tuya pero teniendo en cuenta que fue una muerte violenta puede ser que estés sufriendo como un estrés postraumático o...
—Stiles, tranquilo —digo riendo— estoy bien. Ni ataques de pánico. Ni estrés postraumático. Solo...me agobié— intenté parecer segura de lo que decía para que se tranquilizara, parecía un poco nervioso.
Stiles era de las personas que más sabían sobre el asesinato de mi madre, ya que su padre trabaja en la policía. Seguro que cuando se enteró de que mi madre fue asesinada se puso a investigar. Pero no podría encontrar nada, ya que nunca se supo quién fue. Lo que él sí sabía, por lo que acababa de decir, es que yo lo presencié. Me alegro de que haya guardado ese secreto.
—Bueno entonces me voy, nos vemos Ella— se despidió y se fue corriendo hacia su Jeep.

I: Apolune ↞ Stiles/Isaac/Teen Wolf ↠Donde viven las historias. Descúbrelo ahora